|A través de la pared| Mikellino

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El recuerdo de como habíamos bromeado sobre lo delgadas que eran las paredes del piso se veía tan lejano en la actualidad. Como nos habíamos metido cada uno en una habitación y habíamos comenzado a hablar como si la pared no existiese, como nos habíamos reído al darnos cuenta que incluso se oía cuando yo abría una gaseosa en mi habitación.

Cambiaría mi canal por unas paredes más gruesas.

'' —Te amo

—Te amo aún más.

—Eres la casualidad más bonita que llegó a mi vida."

Y luego silencio. No sé si me mataba más oír aquel silencio, imaginándome que estaban haciendo u oír aquellas promesas de amor eterno que se recitaban mutuamente. 

Habíamos conocido a Ela al mismo tiempo, en el cine. Como me arrepentía de haber querido ir al cine esa noche. Además de llamar la atención físicamente. Y con eso se había ganado el corazón de Javier (Trollino) de forma instantánea.

Uno de sus defectos que él mismo era capaz de aceptar era que se entregaba con mucha facilidad a las personas, se enamoraba con mucha facilidad, se encariñaba con mucha facilidad y luego esas personas no eran quien él creía que eran. Ela en un corto plazo de dos semanas se había ganado su corazón, y ya hace un par de meses que llevaban una relación seria.

'' —No creo en el amor eterno.

—Tu tranquila, que yo soy inmortal.''

Yo era quien provocaba sus risas. Yo era con quien él jugaba todas las tardes. Yo era con quien el salía todas las semanas. Yo era con quien él se quejaba de lo cansado que había llegado del gimnasio. Yo era quien lo sostenía mientras lloraba, cuando los insultos y quejas en su canal eran excesivos. Yo-...yo soy quien está llorando mientras él ríe a carcajadas con su novia.

"—Me encanta estar así contigo.

—¿Así como?

—Entre tus brazos.''

Cubrí mi boca con ambas manos ahogando así un sollozo, ¿En qué momento fui tan torpe como para enamorarme de mi mejor amigo? La mejor parte de esto es que me dí cuenta cuando comencé a sentir celos. Celos de la forma en que él la miraba. Celos de la forma en que él la abrazaba. Celos de la forma en que él tomaba su mano por las calles. Celos de la forma en que él la besaba. Celos de ella.

" —¿Ela?—¿Mhm?—¿Te he dicho lo mucho que te quiero?—Solo un par de veces hoy, muy pocas en realidad.

—Te adoro, mi Ela." 

Mis ojos ardían, no recordaba haber llorado de esta manera hace más de cuatro años. No recordaba nunca en mi vida haber sentido este dolor en el pecho. Sé que es casi imposible que él se fije en mi, pero verlo con otra persona es algo que me mata lentamente. 

El día en que me dí cuenta de lo que sentía por él fue como si una llama se encendiera en mi corazón, ahora aquella llama arrazaba y destrozaba todo a su paso, mis sentimientos incluidos.

" —¡No, cosquillas no, por favor!—¿Tu sabes como me llamaban a mí en el colegio?—¿Trollino?—Vale, te has escapado de esta solo por responder bien."

Su risa, su risa siempre me había hecho sonreír, me había hecho gracia, aunque se estuviese riendo de mí. El saber que no era yo quien la provocaba la hacia avivar aquella llama dentro de mí. Dolía.

flashback

"—¿Quieres ver una película?

—Depende, ¿Cuál?

—La que tu quieras, mascotita."

Fin del flashback.

Me llenaba de mimos. La tontería que yo quisiera se hacía, ya fuera en juegos o en la vida real. Porque a él le encanta hacer feliz a todo quien lo redea. Le gusta provocar sonrisas. Me pregunto que pensaría al saber que estoy llorando y ahogando sollozos solo por oírlo a él.

" —¿Traigo algo para comer?

—Un Javier Lopez a la plancha, please.

—¿No te conformas con un Javier Lopez a la cama?"

Muchas veces había oído el sonido de un beso de su parte, siempre que le pedía un pico, siempre que quería hacer el tonto, siempre que estábamos entre amigos y él se despedía, pero era un sonido corto, con un principio y un final en menos de dos segundos. Los oía besarse. Los oígo besarse. ¿Por qué no puedo oírlos dejando de besarse?.

Al oír un sonido en seco de algo caer, me di cuenta de que no terminarían allí.

No puedo seguir oyéndoles. No puedo seguir aguantando el verlos besándose frente a mi. No puedo seguir oyendo a Javier decirme lo mucho que la ama cada vez que hablamos. No puedo seguir enamorado de mi mejor amigo. No puedo seguir.

Me puse de pie lentamente y dejé escapar un suave sollozo, puedo confirmar y estar seguro de que él no lo oiría.

flashback

—¿Trolli, falta mucho?

—Un rato Mi mascotita

—Joder

—Eres tan lindo mascotita

Fin del flashback

Apoyé mi mano en la manilla de la puerta que daba al baño, quizá estoy pensando demasiado rápido las cosas. Cegado por el dolor, la tristeza y soledad.

'' —Te amo más de lo que debería, mi Ela."

No. No puedo. Es imposible.

La verdad estoy aburrida y pues... se me ocurrió escribir otra historia XD, espero que les haya encantado... Los jamo <3