Ojalá las cosas fueran como aquellas escrituras, donde las ocasiones malas acaban muy rápido y las olas toman un rumbo más tranquilo.
Aquellas hermosas historias que relatan un final desalmado o uno completamente feliz, si tuviese la oportunidad elegiría ambos, el final desalmado especialmente, para acabar con este avasallador sufrimiento, y el feliz para tener la oportunidad de estar muy lejos.
Pero no; no tengo opción de ninguna, porque esto no es una de esas historias, con un final elegido, este es un final tan alternativo, que me provoca ganas de finalizarlo a mi modo. Cuando me dijeron que la vida daba golpes demasiado duros y rápidos para contarlos, creí que era algo un tanto exagerado; pero es cierto, no acabo de dar un solo paso, y siento el cuerpo entumecido, la cabeza ardiendo, y el corazón hecho pedazos. Creí tenerlo todo, creo que aún lo tengo en comparación a otras personas; pero el conflicto es que no lo siento, sólo siento un dolor inmenso constantemente, junto a un vacío desesperante, y una soledad desgarradora.
¿Dónde está? ¿Dónde está todo aquello que dicen que tengo? ¿Y porque no siento que lo tenga? ¿Dónde está la felicidad inconmensurable que promete el mundo?
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Bitter Life
Teen FictionTu vida tomará el rumbo que desees, será un campo de batalla o un prado imperturbable. O eso es lo que hacían creer a Hellen, una ingenua chica corrompida por el estereotipo en la sociedad, intentando encajar en un grupo de personas cercanas, toma...
