Joshua despertaba de nueva cuenta encontrándose con su pareja, Yoon Jeonghan, un chico de cabello rubio, sonrisa angelical y facciones demasiado perfectas <<Un Ángel>>
Sonrió, sonrió ampliamente al ver lo tranquilo que reposaba en aquella cama que habían comenzado a compartir hacia poco, una casa demasiado bonita junto con dos perros que felices cuidaban. Realmente Joshua no podía desear más, tenía la vida perfecta y estaba feliz por ello.
El chico a su lado se movió en su lugar, cambiando la posición en la que descansaba por una más cómoda, pronto el castaño comenzó a oír susurros indicándole que su chico estaba empezando a hablar dormido señal que mostraba que pronto iba a despertar, de nuevo sonrió mientras tomaba sus pantunflas y con sumo cuidado se paraba de aquella cama para poder dirigirse a su cocina y preparar algo para el chico a su lado.
Al abrir la puerta pronto dos seres pequeños aparecieron ladrando muy ruidosamente, Joshua se alarmó, si seguían podrían despertar a Han. El chico trató de callarlos pero era demasiado tarde ya que sintió una cálida mano tocando su hombro."Demasiado temprano ¿No lo crees Joshuji?" el mencionado levanto su mirada encontrándose con una sonrisa demasiado perfecta para este mundo, un cabello desordenado pero sobre todo con el amor de su vida diciendo aquel apodo que tanto amaba.
"Lo lamento, no planeaba despertarte pero Woozi y Hoshi no dejaban de ladrar." el contrario rió mientras tomaba a uno de los perritos entre brazos y empezaba a darle mimos.
"Vamos, hay que preparar el desayuno." alentó, Joshua repitió la acción y comenzó a avanzar siguiendo el paso de Jeonghan quien ya se había adelantado por mucho. "Has despertado muy temprano ¿No lo crees, Joshuji?" Los ojos de el mencionado se iluminaron, de nuevo oía ese apodo que tanto le encantaba. El apodo que hizo que poco a poco la relación creciera formando en Joshua una celda donde todos sus sentimientos se encontraban, sin escapatoria alguna y logrando que día a día se hicieran más fuertes. Le dieron ganas de llorar.
"Yo... No era mi intención despertarte ¡Lo juro!" Jeonghan seguía bajando las escaleras sin parar y aquello estaba comenzando a desesperar al castaño más de lo debido, su cabeza baja y dando pasos un poco torpes provocaban aquella fragilidad remarcada.
"Oh Joshuji, entiendo que no fue tu intención, solo procura no despertarme a estas horas." a pesar de que no lo podía ver el castaño asintió con una gran sonrisa en su rostro, en serio lo había perdonado y eso lo hacía desbordar de felicidad. "¿Que te parece un ramen como desayuno?" cuestionó una vez que ya se encontraban cerca de la cocina, al mismo tiempo dejaba a Woozi en el piso para que jugara con el otro perro por toda la casa.
"Hum... Me parece bien." Han se acercó para abrazar a su novio dandole cortos besos en su cuello provocando que el cuerpo de el chico se estremeciera. "Yo... Yo lo podría preparar ¡Tal como te gusta!" los besos de el rubio se detuvieron para dar paso a sonrisas cómplices, el ángel tomó la mano de su chico acariciando suavemente aquel parte.
"Estaré esperando ese rico desayuno." sentenció para luego ir tras sus mascotas y darles un poco de comida.
El chico suspiró con los ojos un tanto aguados, pronto caminó hacia la cocina arrastrando los pies y mordiendo sus labios con el propósito de retener las lágrimas. Llegó hasta la alacena inspeccionando su alrededor, girando su vista hacia atrás encontrándose con Jeonghan quien felizmente buscaba algo en Netflix mientras acariciaba a ambos perros dulcemente. Joshua tenía que ir pronto a trabajar, no podía perder tanto tiempo junto a Han como la última vez.Tomó el ramen mientras el agua que recién había puesto se calentaba, sintió el calor de la lumbre y aquello lo hizo estremecer.
¿Por qué cada día se sentía cada vez más y más extraño? Acarició sus frágiles brazos sin encontrar respuesta alguna.
El agua comenzó a burbujear señal de que era hora de verter el ramen sobre aquella cacerola.