Nuestro hilo rojo

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Se encontraba ofuscado en su oficina, tenía que darse un respiro, tantos papeles que revisar lo estaban colapsando, paso su mano por su cabello castaño y se recargo en el respaldo mirando por el gran ventanal, su vida era apagada a pesar de tener todo, tal vez lo que le dijo hace unos días Yeri, su mejor amiga, era verdad…

“¿Qué sucede Jonghyunnie? Te noto apagado” le dijo su mejor amiga con un puchero mientras tomaban un café en su cafetería preferida, las rubia volteo los ojos y le cerro la computadora que tenía en frente de su amigo “Nos juntamos a hablar, no a que sigas trabajando Kim Jonghyun” El Castaño sabía que cuando su amiga usaba ese tono y su nombre en él no era buena señal.

“No sucede nada” suspiro tomando su café bajo la atenta mirada de Yeri, se comenzó a poner nervioso mediante seguía la mirada de la menor “Deja de mirarme, solo estoy cansado”

“Eso no es cansancio”

“Entonces según tu ¿Qué es?” rio con el café en sus manos

“Falta de una pareja… ¡Jonghyun, que asco!” grito cuando el, mayor escupió su café, el moreno le miro y ella volteo lo ojos “No me mires así, ya búscate un novio, ya hasta deberías estar casado, tienes casi 30 años”

Luego de aquella charla y de comprarle una nueva camisa a su mejor amiga no pudo dormir cómodo en los siguientes días, había estado tan sumergido en su trabajo que no pudo ponerle atención a su vida privada, la había descuidado, aun se sorprendía de que Yeri y Jinki siguieran siendo sus amigos a pesar de no verlos.

Se levantó de su cómoda silla y miro por el gran ventanal a las personas caminando por todo aquella gran ciudad, alguna de esas personas tal vez sería su pareja, debía de haber una persona destinada para él.

“Corrección, la hay para cada persona que pisa en mundo” se sobresaltó al escuchar una voz femenina detrás de él, se quedó sorprendido al ver a  su hermana y suspiro “Si si, ya sé que te asuste, y no, nunca dejare de leer tu mente”

Volteo los ojos y se sentó en su escritorio, no sabía cómo, pero había nacido con ese don de poder leer mentes, aparte de ser bruja literalmente.

“Bueno, iré al grano, mamá quiere verte hoy en la noche, cena especial” sentencio mirando a su hermano a los ojos, sabia de sobra que no había buena comunicación con su madre desde que le confeso que era gay, ella siempre lo iba a apoyar, pero no sabía cómo hacerlo si se lo ponía tan difícil

“Hermanito, debes de ir”
Jonghyun rio amargadamente y la miro fijamente “¿Para qué Sodam? Me va a volver a menospreciar”

“Sé que es por algo bueno, lo presiento, hazlo por mi” le susurro suavemente tocando su mano, sabia como era su hermano, el haría cualquier cosa por ella, sabía que debía ir, estaba segura que esta noche en la cena las cosas para su hermano cambiarían para mejor.

“Joder, está bien, pero como y…”

“Te vas” sonrió feliz su hermana y salió corriendo de la oficina de su hermano y luego abrió la puerta y negó con su cabeza “Nunca dejare de leer tu mente, así que ni preguntes”

Jonghyun suspiro sabiendo que lo que su hermana dijo era verdad, nunca dejaría de serlo, se enfocó a seguir con su trabajo sin pensar en lo que le depararía la noche, siguió toda la tarde enfocado en su trabajo y decidió tomar un pequeño descanso viendo videos en YouTube, se encontró con uno muy peculiar.

“Leyenda del hilo rojo” susurro para sí mismo interesado en aquello, así que le dio click y se dispuso a verlo, era algo corto y contaba la leyenda…

«Hace mucho mucho tiempo, un emperador se enteró de que en una de las provincias de su reino vivía una bruja muy poderosa, quien tenía la capacidad de poder ver el hilo rojo del destino y la mandó traer ante su presencia. 

Nuestro hilo rojo 《Jongkey 》Donde viven las historias. Descúbrelo ahora