Tentación

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¡El diablo me obligó a hacerlo!».

La tentacion no es pecado, sin embargo, mucha gente utiliza esta excusa para justificarse cuando cae en tentación o pierde el control. Si bien es cierto que el enemigo está rondando la tierra buscando a gente para destruirla, también es cierto que un seguidor de Cristo tiene el poder de Dios viviendo en su interior.

¿Está mal ser tentado?

¿Quién es responsable cuando usted sucumbe a la tentación o pierde el control?

¿Tiene usted algunas opciones cuando se encuentra en una situación difícil?

La Biblia tiene mucho que decir acerca de la tentación y el dominio propio.

La tentación se presenta de diferentes maneras y es facil disculpar nuestras  decisiones y justificarnos , cada vez que fallamos.

Pero debemos de ser humildes y reconocer que somos débiles y que fallamos muchas veces y que necesitamos cada día de la misericordia y ayuda de Dios para cambiar y vencer las tentaciones.
Tomemos tiempo para calmar nuestra mente , dejar que Dios hable a nuestras vidas y encontrar la fortaleza para vencer las mas grandes tentaciones de nuestras vidas.

Tal vez creerás que la TENTACIÓN es imposible de vencer o que para tu problema ya no hay remedio , pero no es a así . Dios tiene la solución a tu problema.
Quizás dirás ya eso lo he escuchado muchas , esta bien pero cuantas veces lo has aplicado a tu vida , atrevete a creer y aplicarlo a tu vida acercándote a Dios pero no solo unos segundos , ni minutos , acercate a Dios todos los dias de tu vida y caminaras en victoria.

Pues en cuanto él mismo padeció siendo tentado, es poderoso para socorrer a los que son tentados.
Hebreos 2:18 RVR1960

Santiago nos enseña que la tentación es una prueba a mi fe, y que quienes soportan en la tentación sin pecar, recibirán la corona de vida (Santiago 1:12). De la misma manera Pedro escribe que nuestras pruebas (tentaciones) son motivo de gozo, pues nuestra fe es probada, y tiene la salvación de nuestra alma como resultado.

El mensaje del evangelio es que aunque yo sea tentado no necesito pecar; yo puedo andar en las pisadas de Jesús y vencer en la tentación. La paga del pecado es la muerte, ¡pero los que vencen van a recibir la corona de vida!

¡Cuantos se atreven a creer y aplicarlo a sus vidas!
Hazlo, corre a la presencia de Dios.

De mi otro libro cristiano "¿Todos Merecemos Una Segunda Oportunidad? "
Los invito a que se pasen por él. Les gustará.

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