Beauty queen falls in love » Jack Johnson |BOOK #1|

24:So Hard.

-¿Puedo ir a tu casa?

-No-contesté fríamente.

-¿Por qué?

-Chris esta conmigo-mentí.

Colgué antes de que el dijera algo más, tomé una chamarra y salí de mi casa, caminé sin algún rumbo, siguiendo las luces que iluminan perfectamente las calles, y las luces de los autos, sintiendo las lágrimas recorrer mis mejillas, me detuve en algún lugar y me senté en la acera, sorbí mi nariz, el viento despeina mi cabello moviéndolo en diferentes direcciones, limpie mi rostro con la manga la chamarra, es inútil derramar tantas lágrimas por la misma persona.

«Recuerda que siempre serás la única para mi.»

Eso es pura mierda, me mintió, me odio en estos momentos por haber creído en el. Por haber caído ante el. Por sentir amor por el. Y por no poder hacer nada por evitarlo. Me quedé en esa posición por varios minutos que me parecieron horas.

Llegué a mi casa, en la entrada está Jack parado en la puerta, me vio y corrió hacia mi, al ver mis ojos rojos de tanto llorar se preocupó.

-¿Estas bien?-preguntó con angustia en su voz.

-De maravilla-agregué sarcasmo en mi voz.

-¿Quién fue el idiota responsable de eso?

-Te estas llamando idiota a ti mismo.

Pareció no entender, pero reacciono después tomándome entre sus brazos, forcejee para que me dejara pero el aplico más fuerza haciendo que el intento de zafarme fallara, al final lo abracé igual sintiendo que en cualquier momento derramaría lágrimas como antes.

-Lo siento Lynn, en serio-dijo.

No respondí, y me hundí en su pecho, inhalando el aroma que el desprende voy a extrañarlo, también a sus labios carmín cual cerezas, perder mi mirada en la de el o simplemente oír su voz dirigirse a mi. Tomé la decisión de alejarme de el por un periodo de tiempo, no se con exactitud cuanto, pero en verdad espero que funcioné.

-¿Podrías hacer un favor para mí?-pregunté con la voz quebradiza, separándome de su anatomía.

-Todo lo haría por ti.

- Alejate de mi, no preguntes por qué, solo hazlo. Por el bien de ambos.

Jack bajó la mirada pero asintió. Entré a mi casa sintiéndome rota, pero no derramé más lágrimas, me hundí en la sábanas de la cama, invocando al sueño para que olvidara todo al menos unas horas.

(...)

Jack

El vacío en mi interior hace notar su presencia desde ayer. Aventé el balón de americano con toda la fuerza que poseo, me importo un bledo el lugar en el cual caería, mi móvil vibró, lo saqué de mi bolsillo frontal, presioné el botón verde dando pasó a la voz de mi supuesta novia.

-Bebé ¿me acompañas a comprar los disfraces para el baile?-su chillona voz inundó mi oído izquierdo.

-¿Puede ser otro día?

-Esta bien yo los compraré.

Presioné el botón rojo parando el sonido de su voz, la puerta de mi casa se abrió, miré por la ventana, vi a Gilinsky buscarme por todos lados.

-¡Por acá!-le grité llamando su atención.

Volteo, al verme caminó en mi dirección, abrió la enorme puerta transparente y llegó a mi lado.

-Dude, prepárate para la fiesta de esta noche.

-¿Dónde será?

-En la mansión de los Espinosa.