P R I N C E S A

Prólogo

Rosa cubierto en sangre

Eran las 2:00 de la madrugada del 22 de Julio cuando el teléfono de mi habitación timbró.

Un asesinato en el muy pacífico Teous Street se había consumado.

Me tomó al menos 20 minutos llegar en el lugar del crimen. Junto al cadáver ya sin vida en la acera de la calle 22. Un tumulto de personas se encontraban gritando y llorando.

Me sorprendió ver tanto color en una escena tan desgarradora. Lentejuelas y tacones de 15 adornaban la oscura noche teñida en sangre.

Policías intentaban alejar a las drags del cadáver.

-Agente Charles, gracias por venir rápido al lugar. - me dice uno de los oficiales de nombre Smith, o al menos eso dice su placa, al bajar de mi auto.

Le doy una sonrisa de boca cerrada. Y procedo a pedirle que recoja toda la información posible mientras nos acercamos a la escena del crimen.

Paso junto a las mujeres que ahí lloran y levanto la cinta policial amarilla.

Un charco de sangre sale por un lado de la sabana blanca que cubre el cuerpo.
Saco unos guantes de látex de la parte de atrás de mis jeans y me los pongo mientras observo al rededor.

Sólo los oficiales y las drags se encuentran cerca. Algunos autos se han detenido pero miran de lejos el desgarrador espectáculo.

Me arrodillo ante el cuerpo y levantó la sábana que cubre a la víctima.

El policía que me recibió empieza a darme la información.

-Adán Evans, 27 años. Hijo de Marta Collins y su fallecido padre Roberth Evans.

Su peluca rosa está pegajosa ya, llena de su propio sangre.

-Trabajaba como mesero de tiempo completo en Peppers Club y de noche asistía al Queens Coliseum dando shows artísticos. - prosigue.

Su maquillaje exagerado pero lleno de color era lo único que le daba vida a su rostro pálido. Su labial rojo era tan rojo como su sangre.

-Recibió 5 impacto con arma blanca. Murió a la 1:20 de la madrugada de hoy. Sin rastro del asesino, sin testigos. No tenemos nada más que una nota que le fue puesta a la víctima entre sus manos.

Quito aún más la sabana para revelar los impactos de las balas.

1 Toraz
2 y 3 abdomen
4 pierna derecha
5 pecho izquierdo, directo al corazón.

Las drags de tras de mi sueltan gritos aterradores al ver a su compañero sin vida.

-Llevencelas de aquí. - le ordeno al oficial. - Quiero a un equipo completo rastreando todo el perimetro en busca de más pistas.

-De acuerdo señor, ya la unidad que recogerá el cuerpo viene en camino. - dice el oficial.
-Ah y otra cosa. - se acerca a mi para susurrar. - Que Dios te guié para encontrar al criminal, Teous Street es una ciudad libre de este tipo de delitos, no permitas que el demonio siga entre nosotros.

Miro por última vez el rostro de Adán antes de cubrirlo de nuevo con la sabana blanca.

Me pongo sobre mis pies nuevamente y miro el panorama.

La mayoría de las drags fueros desalojadas del lugar, pero aún se escuchaban sus llantos a metros del lugar. Miro a mi alrededor en busca de algo, una pista divina, que sé yo.

Llamo a uno de los oficiales que se encuentran cerca.

Este me sigue mientras me devuelvo a mi auto.

-Quiero un informe completo sobre todas las personas que tuvieron contacto con Adán en los últimos meses, quiero interrogarlos uno a uno. Quiero un informe por parte de los oficiales que van a barrer el área. Necesito que den los análisis de la autopsia y si tenemos la suerte de recuperar alguna bala que haya impactado su cuerpo.

Me quito los guantes y los pongo dentro de una bolsa que me brinda el atento y joven oficial.

-Averigua también si algún local de alrededor tiene alguna cámara- le digo señalando los almacenes que se encuentran al rededor.

Y por último, necesito hablar con la madre y los amigos de Adán lo antes posible.

-Entendido señor Charles.

Le doy un asentimiento y me subo a mi auto.

El oficial Smith corre hacia mí a toda velocidad con algo entre las manos.

-Señor Charles, esta fue la nota encontrada.

Me pasa ya en una bolsa transparente y sellada el pequeño trozo de papel.

-Espero que pueda dormir lo que resta de la madrugada señor, este caso le robará el sueño por una temporada - me dice con algo de tristeza.

El oficial Smith vuelve por donde vino y empieza a dar órdenes. La unidad forense acaba de llegar al lugar y las luces azules y rojas iluminan el lugar, iluminan mi rostro en lo obscuro de mi automóvil.

Unos hombres completamente de blanco bajan de la unidad. Destapan por completo el cuerpo de Adán el cuál ya presenta moratones púrpuras en sus piernas y brazos.

El vestido rosa chillante lleno de lentejuelas, brillos y bordados está lleno de sangre. Bajan una camilla para poner el cuerpo en ella y llevarlo a la morgue.

Cierro la puerta y enciendo el motor de mi automóvil.

Miro mi reloj de muñeca el cual marca las 2:57 am.

Tomo la nota que había puesto en el asiento del copiloto y la leo.

En una perfecta letra imprenta escrita a mano decía.

"Dios los aborrece"

Próximo capítulo mañana, los espero ;)