No volveré a dejarla ir

CAPÍTULO 29

-Melanie-

El sonido de la alarma me despierta y me preparo para ir a clase, la primera es con Jenny.
Al cabo de unos veinte minutos ya estoy en el instituto así que entro y me siento de nuevo en la última fila como anteriormente junto a mi amiga Karen.
En esa hora lo único que hago es ignorar a Jenny y no prestar nada de atención, pero para mi sorpresa ésta interrumpe mi siguiente clase para que mantengamos una conversación. En vez de una conversación más bien se convierte en una súplica continua ya que me pide como unas veinte veces que no me mude.
Y al final acabo haciendo caso a mi corazón y decido besarla porque tiene razón, no voy a echar a perder nuestra relación por una tontería así que ya no pienso irme.

-No esperaba que hicieras eso –me acaricia Jenny muy suavemente mis labios con los suyos.

Decido volver a la carga después de sus palabras ya que me apetece volver a besarla una y otra vez, así que eso hago.

-¿Quieres ir a comer a mi casa cariño? –me propone Jenny con una gran sonrisa de oreja a oreja.

-Claro que sí, pero ¿qué vamos a comer? –le sonrío yo también pero pícaremente.

-Pues lo que desees –contesta mordiéndose el labio inferior.

-Te recojo en la salida –vuelve a morderse el labio inferior para provocar.

Después de unos cuántos besos, abrazos y demás seguimos con nuestro horario de clases hasta que llega el final de la última hora y nos dirigimos a su casa.
En cuanto abre la puerta decido estamparla contra la pared de la entrada y comenzar a besarla ya que a ella es a quien deseo comer, le muerdo los labios ya que es lo que deseaba hacer antes y decido dirigir mi lengua hacia el lóbulo de su oreja que se lo chupo muy lentamente. Cuando iba a ir hacia su cuello cambian los papeles totalmente y ahora es ella quien tiene el mando, me imita poniéndome contra la pared y comienza a hacer justo lo que quería hacer yo, recorre sus labios por mi cuello dándome húmedos besos por todo él haciendo que suelte algún que otro gemido contenido, me quita totalmente toda la ropa y va bajando suavemente a la vez que me da cortos besos en los labios hasta llegar a pararse en mis pechos. Se pone frente a mis pezones para morderlos provocando en mí una sensación de dolor y placer al mismo tiempo que hace que no quiera que se detenga. Pero a pesar de ello no dejo que siga, la empujo al sofá y le quito directamente los pantalones para no andarme con rodeos así que después de desnudarla le ordeno que se tumbe boca arriba y que abra las piernas para pasar mi lengua por sus muslos muy cerca de su parte íntima, acompaño mi lengua con caricias y cortos besos. Muerdo sus bragas para quitárselas de un tirón y miro su intimidad con lujuria.
Decido no hacerla esperar más ya que me susurra que lo haga de una vez, así que adentro mi lengua y voy dando círculos con ella en su centro. Jenny no me deja continuar ya que quiere ser ahora ella la que me de placer a mí, así que se coloca encima de mí y...

-¿Jenny? –dice mi suegra que nos ha pillado totalmente por sorpresa.

-Eh...esto...hola mamá –contesta Jenny cubriéndonos a las dos con una manta.

-Hola señora –dirijo mi mirada hacia el suelo por miedo a la reacción de la madre de Jenny.

-Anda que os habéis ido a la habitación o algo, os ponéis aquí en medio de la casa –empieza a reírse su madre haciendo que me tranquilice después de mi último encuentro con ella.

-Es que mamá, ¿yo que iba a saber que venías? –dice Jenny con una cara extraña por la rara actitud de su madre que actúa como si no hubiera pasado nada.

-Bueno chicas ya que estáis aquí las dos juntas aprovecho para deciros que lamento mi actitud del otro día, no debo meterme en las relaciones de mi hija y si de verdad Melanie es la chica que te hace feliz pues adelante, olvidad todo el daño que os he hecho por favor lo siento –se seca las lágrimas de los ojos.

Después de eso nos quedamos Jenny y yo bastantes sorprendidas ya que no sabíamos a que se debía ese cambio tan repentino en su madre pero aún así esperamos que de verdad sea cierto lo que ha dicho y sobre todo que demuestre que no volverá a meterse en la relación porque nos afecta bastante.
Después de hablar un poco más sobre el tema nos fundimos las tres en un fuerte abrazo, verdadero espero, y nos dirigimos a mi casa ya que se ha hecho de noche y Jenny ha optado por llevarme ella en su coche.

-Te quiero –me susurra ya delante de la puerta de mi casa.

-Enamorada me tienes –le contesto dándole un suave beso en los labios.

-Gracias por quedarte, cabezona –me agarra fuerte de la mano y me mira muy profundamente a los ojos.

-Gracias a ti por hacer que me quede –oculto mi sonrisa en su cuello.

-Buenas noches princesa –me dice dándome continuos besos y haciéndome sonreír sin saber todo lo que me quedaba todavía por vivir y las lágrimas que iba a derramar.

Buenas noches a tod@s, ¿os ha ido bien el día? ¡Espero que sí! Y también espero que este capítulo os haya gustado🤗❤️

_María_