A Un Click: Siempre Tú Y Yo EDITANDO

39: Creí

Mini Maratón 3/4

Poché en mi vida era como una tormenta.

En tres días todo lo que creí verdadero se fue por la coladera.

Vivía creyendo que ella estaba muerta o me odiaba; y resultó estar viva y que me ama.

Creí que la relación con Mario era fuerte y que no daría mi brazo a torcer ante las tentaciones. Poché apareció y esa misma noche caí, pero sin dejar una sola célula a salvo de la Peli-Azul.

Creí que quería de verdad a Mario y había superado los sentimientos por la Mini Jefa, pero aquí voy de camino al edificio y extrañando a la Peli-Azul.

Creí que Mario era bueno y resultó ser un engaño total.

Creí tantas cosas y ya no creía.

Sabía que ella era mi tormenta perfecta y lo sería por el resto de mi vida. Sabía que podían llegar cientos, pero jamás podría ver a otra persona como lo hacía con ella. Sabía que ella le daba ritmo a mi corazón.

-Calle... Llegamos. -Me avisó Sebastián mientras se detenía frente al ascensor del estacionamiento para que yo pudiese subir de inmediato.

-Muchas gracias, Sebas.

-No hay de que. Todo por la novia de mi Jefa. -Dijo con una sonrisa mientras me miraba por el retrovisor.

-Aún no somos novias. -Le aclaré y él se hizo sorprendió. -Cuídate y gracias de nuevo. -Le dije mientras me bajaba.

Entré al ascensor y una extraña sensación se apoderó de mí.

Aunque quisiera no podía engañarme.  Estaba en el edificio donde habían matado a mi prometido hacía unas horas. En el edificio donde él intentó matar a Gabriela hace unas horas.

El ascensor se abrió en mi piso y ví a Juan entrando como si fuese su apartamento.

-¡Hey! -Le llamé antes que cerrara la puerta. -Tendré que quitarte la llave, Pau. -Le dije a mi amiga cuando entré.

Estaban limpiando mi apartamento.

Kim en la cocina. Pau en la sala. Juan camino a mi habitación y Manu... ¿Y Manu?

A paso rápido entré a mi habitación y la encontré durmiendo sobre mi cama.

-Yo le hice las advertencias pertinentes sobre "tu cama es tu cama y nadie duerme en tu cama". -Habló Juan imitando mi voz mientras se metía al baño.

No iba a pelear con ella. Definitivamente ahora no. Salí a la sala y las chicas seguían en lo suyo.

-Vuelvo en un momento. -Les avisé antes de salir.

Subí hasta el piso del ascensor de Poché.

-¡Buenas tardes! -Saludó al guardia y lo reconocí, era Teo.

-Buenas tardes, señorita Calle. -Saludó con su gorra y una sonrisa.

-¿Blue le avisó? -Sabía que sí, pero quería estar segura.

-Sí, dijo que su novia... Daniela Calle... iba a buscar a Ramón, tiene permiso de subir. -Dijo las palabras mágicas.

-Muchas gracias. -No le dije más.

Habían tantas vertientes en una sola frase que me daba miedo.

El ascensor se abrió y caminé por el pasillo, pero ahora me daba de cuenta de un detalle.