Kyūketsuki! | adaptación

kyūketsuki!

espero que les guste el drabble tanto como me gustó a mi uwu

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—Se supone que me tenían que matar, ¡No enamorarse de mí, par de idiotas! —reclama Hoseok mientras sigue acostado con una bolsa de hielo en su trasero, porque el idiota de su novio (Seokjin) lo estuvo nalgueando durante el sexo y quedó todo adolorido.

—Lo intentamos, Seokie —ríe Jimin con diversión. Hoseok levanta su mirada de la almohada y mira los ojos rojos de Jimin, y con un sonrojo en sus mejillas, se vuelve a ocultar. No puede con la vergüenza. —Anda amor, no te enojes con Seokjin. Si quieres puedes enterrarle un cuchillo por el enojo —se encoje el rubio de forma aburrida, mientras escucha un chillido de horror fingido por parte de Seokjin.

—¡Por favor no, Seokie! ­—suspira el moreno. El pelirosado unta más medicamento en las suaves y deliciosas nalgas de su novio. —La última vez me dolió mucho —hace un puchero fingido. En realidad, no le dolió, pero Jimin le dijo que, si no actuaba con dolor, pondría triste a Hoseok. Y Seokjin amaba hacer feliz a su joven y humano novio. —Además, no finjas que no te gustó, cielito mío —ronronea el vampiro mayor mientras separa los dos globos morenos de Hoseok y pasa su lengua sobre el agujero rosado del humano. El pelirrojo chilla de impresión y entierra su rostro en la almohada a la vez que se aferra en ella.

—N-no, Seokjin... —responde en un gemido al sentir como el pelirosado lame la línea que separa sus glúteos y muerde con gentileza. Jimin mira todo desde lejos y sonríe con cinismo. —U-ustedes bastardos... s-solo me usan para s-satisfacerse —muerde la almohada cuando siente al vampiro de ojos azules meter su lengua en su ano. Seokjin chupa y lame sin vergüenza el bonito hoyo de Hoseok.

­­­—Sabes, Seokie. Tal vez hemos masacrado pueblos, matado a muchas personas e incluso torturado —Jimin se levanta y se acerca hasta tener al moreno en su rostro y le regala una mirada dulce y comprensiva, justo en ese momento, Hoseok supo que estaba jodido. —Pero nuestro amor hacia ti es tan puro como tu sangre en nuestros colmillos, amor mío —estaba jodido porque se dio cuenta que ama a ese par de idiotas con locura. ­—Aparte, sé que te gusta cómo te tocamos... —comenta Jimin para regresar a su silla y sentarse. Hoseok tiembla un poco por la mirada de lujuria y amor que el rubio le está dando. —Sigue con lo tuyo, Jin —susurra mientras lleva una mano sobre su pantalón y empieza a masajear su parte intima. Hoseok relame sus labios por el deseo de querer chupar algo.

—Lo que digas hermano —sonríe el vampiro para después meter dos dedos de golpe dentro de Hoseok, los gira y estira para poder extender sus paredes. Hoseok jadea y chilla de placer, entre sus dedos siente las suaves sábanas de seda. El calor de su cuerpo sube, al igual que su sangre. —¿Puedo beber, Seokie? —el moreno asiente.

Seokjin lame el muslo izquierdo de su amante, para después enterrar sus colmillos en aquella tierna piel. Hoseok se siente casi explotar por la sensación de placer que aquella mordida le ocasiono, sentía su erección sobre su estómago, quería acariciar su miembro hasta venirse. Quería sentir a Seokjin jodiendolo por detrás mientras tenía el pene de Jimin en su boca.

Con cuidado, el pelirosado voltea a Hoseok y le regala una sonrisa de cariño. Hoseok se sonroja porque puede ver los azulados ojos de Seokjin y es como si estuviera viendo el mismísimo mar. Sin siquiera pensarlo, el moreno lleva su mano hasta la mejilla de aquel hombre tierno, pero que cuando se enojaba, era como un huracán: arrasaba con todo y sin piedad. El vampiro mayor ríe con ternura y se deja acariciar mientras besa la mano de su novio.

—Genial, ahora entraron en un plan tierno —gruñe Jimin para dejar de acariciarse. Hoseok y Seokjin ríen para después invitar al rubio a acostarse con ellos. El vampiro menor solo niega con una sonrisa para quitarse sus vestimentas y acostarse con aquellas maravillosas personas. Deja salir un suspiro mientras abraza a Hoseok de la cintura. —Te amo, Seokie.

—igual te amo, Jimin —susurra con sueño el humano. Seokjin gruñe de enojo. —A ti también, Jin —deja salir un bostezo para después cerrar los ojos y dejarse ir

Jimin y Seokjin ríen mientras miran a Hoseok echar pequeños suspiros.

—¿Cuándo le diremos que nosotros no dormimos? —pregunta Seokjin para después pasar su dedo índice por los labios del castaño.

—No le rompas la ilusión al niño.

Y ambos terminan por reír para aferra más a Hoseok. Y es que ambos prometieron proteger al pelirrojo de todo, no importa de quienes. El humano es suyo y así se quedaría. 

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Esta historia es originalmente JinNamMin ¡Mil gracias a Big_bee por permitirme adaptarla! (vayan a leerla si les gusta el nam bottom osi)