20

14 5 5
                                    

Aquel día tan inolvidable para aquellos jóvenes, los dejó con una explosiva mezcla de sentimientos, Vahi sentía que debía darle una respuesta respecto a la confesión de él, saber que a él le gustaba sólo hacía que ella fuera un manojo de nervios, no sabía que decirle, tampoco quería que él supiera lo que provocaba en ella, porque a pesar de todo seguía teniendo sus miedos respecto a él, no se olvidaba del historial que tenía con las mujeres, se sentía poca cosa, ella había visto el tipo de mujeres con las que él se enrollaba por una noche o día y no quería ser un número más en su lista.

En el instituto se veían en los pasillos, pasaban tiempo juntos en la biblioteca, de hecho ahora se sentaban juntos en la clase de ciencias y no sólo por el trabajo, sino porque lo querían. Aleks estaba muy tranquilo, por fin le había dicho lo que sentía por ella, se había replanteado más de una vez los pro y contras, pero dejó a su corazón hablar, tampoco esperó a que ella le dijera al instante que también sentía lo mismo, no, sabía perfectamente que ella no era fácil de conquistar, también sabía que tarde o temprano ella tendría que escoger entre Egan o él y la verdad que le aterraba sólo el hecho de pensarlo.

Sus días en el instituto estaban contados, ya habían rendido los exámenes finales de casi todas sus asignaturas, sólo le faltaban cerrar ciencias y eso sería con el proyecto que estaban haciendo. Poco a poco se acercaba su graduación y con ello también se acercaba el baile de graduación, Aleks no pensaba en ir, era una "putada" como solía decir él, odiaba a casi todos de su salón, a excepción de Catriel y Vahi, pero los demás podían irse al infierno.

Aleks estaba demasiado concentrado introduciendo la combinación a su casillero que no se fijó que había una chica parada frente a él, era una chica de su salón que estaba enamorada de él, pero a éste no le importaba en absoluto, la chica notó que él desconocía su existencia, así que tuvo que carraspear y éste se giró a verla con la ceja levemente enarcada.

—¿Tú eres...? —preguntó lentamente esperando a que ella continuara.

—Nayra —respondió rápidamente —, he venido porque quería preguntarte algo —miraba hacia cualquier lado, menos a él.

—Suéltalo, no tengo mucho tiempo, cielo —dijo con su particular tono de voz un tanto arrogante.

La chica notó cómo éste la miraba con sus oscuros ojos penetrantes, eso hacía que más tardará en contestar, era más nervios que persona. Vahi estaba a unos cuantos casilleros, ella estaba sacando los libros para su siguiente clase, pero se detuvo y se escondió detrás del último casillero para escuchar atentamente la conversación de ellos.

—Vaya ahora eres muda, si no vas a decir nada mejor déjame largarme, mira que yo no ando regalándole mi tiempo a cualquier... —se detuvo a mirarla, pero sintió lástima por ella, así que contuvo sus ganas de ser un maleducado —Chica.

—Lo siento, no quise molestar, sólo quería preguntarte si quisieras ir al baile de graduación conmigo —miró sus pies apenada.

—Ya veo... —notó que lo había jodido con una chica que no era como las demás, así que con sus dedos índice y pulgar, levantó la barbilla de ella —Hey, mírame cuando te hablé.

Vahi se había imaginado miles de cosas respecto a lo que estaba viendo y escuchando, pensaba que él estaba volviendo a ser el mismo picaflor que era cuando lo conoció, pero no era así, Aleks sólo estaba tratando de arreglar lo que había jodido, lástima que Vahi no se quedó para ver cómo finalizaba todo.

Andronico Donde viven las historias. Descúbrelo ahora