"Yo me mate en esa curva (Dije señalando su sonrisa)" -Julio Cortazar
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A principios de febrero, cuando ya habían pasado cuatro meses desde que Harry comenzó una nueva rutina, se dio cuenta que Cedric tenía todo aquello que le atraía en otras personas. Hiciera frío o hiciera calor siempre mantenía un color sonrosado en sus mejillas, el cabello marrón que a veces caía en su frente, tentando a Harry de acariciarlo para apartar los mechones rebeldes, los ojos grises -claro, tenían que ser malditamente grises- y llamativos que a veces encontraba mirando demasiado concentrado en sus labios. Cedric emanaba belleza, naturalmente llamaba la atención; cuando caminaban juntos por el pasillo no se le pasaban desapercibidas las miradas que muchas chicas les daban y es que Cedric era guapo mirara por donde lo mirara.
Además, su manera de ser lo mantenían constantemente en una nube de enamorado. Siempre tenía el placer de verlo sonreír por algo, y es que el chico tenía la sonrisa mas fácil y hermosa del mundo. lo cierto es que Harry se perdía en ella la mayoría del día. Sino lo encontraba en su habitación o en la biblioteca, sabia que probablemente estaba en el jardín, recostado en el pasto escuchando música o simplemente descansando. Tenía la buena costumbre de siempre ayudar cuando alguien lo requería; el otro lugar en el que podía encontrarlo era la cocina, ayudando a los empleados o cocinando el mismo, aunque sabia que eso no estaba realmente permitido, pero los cocineros tenían un favoritismo por el y lo dejaban estar. Parecía que nada lo podía preocupar realmente, y eso resultaba en Cedric teniendo que calmarlo cuando la ansiedad lo abrumaba.
-Cedric, creo que Snape me odia. -Le dijo Harry con la cara enterrada en la almohada.
-¿Quien podría odiarte, Harry? -Se burlo Cedric, quitandole la almohada de la cara- ¿Que te hizo? -Cuestiono, cambiando su mueca a una seria cuando le vio con los ojos llorosos y la nariz roja.
-Estoy por reprobar química ¡Lo odio! -Se lamento Harry, acurrucándose en la cama del otro- Ni siquiera lo hice tan mal, ¿Sabes? Pansy lo hizo prácticamente igual que yo y a ella la aprobó.
-Reprobar una materia no es el fin del mundo, y todos saben que Snape tiene favoritismo -Cedric, acostado al lado suyo, lo dio media vuelto y tomo su cabeza; comenzó a acariciarle el pelo y cuando Harry se dio cuenta tenía la frente de Cedric pegada la suya- Snape no merece que te sientas mal por el, ¿Si? luego yo te ayudo, era muy bueno en química.
-¿Era? -Le pregunto Harry, mientras le extendía el cepillo para que le peinara el cabello mojado. Ambos venían de hacer ejercicio y Harry se había bañado antes de dirigirse a la habitación del mayor. Cedric acepto peinarlo mas por el simple placer de tener una excusa para tenerlo cerquita.
Lo cierto es que cuando no había nadie alrededor, ambos actuaban demasiado cómodos alrededor del otro, como si ya estuvieran acostumbrados a las muestras físicas del otro; sin embargo, cuando había personas alrededor, Harry no lograba serlo tanto como le gustaría.
-Es que ahora me distraigo con... cosas...
Cedric lo acomodo entre sus piernas, mientras Harry jugaba con un cubo de Rubik que no sabia de donde había salido. Luego de unos minutos, Cedric se rindió de intentar controlar los mechones de Harry y simplemente comenzó a jugar con ellos, grabando la suavidad en sus manos.
-¿Cosas? -Cuestiono Harry- ¿Que cosas te pueden distraer?
-Cosas... una de ellas tiene ojos verdes y lentes -Harry juro haberlo visto guiñarle un ojo, pero prefirió no pensar demasiado en ello y en cambia decidió recostarse su cabeza entre la unión de su cuello y hombro, mientras intentaba completar el cubo de rubik.
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Brave Enough
FanfictionHarry intenta arreglar su rota amistad con Draco luego de años de rencor, mientras al mismo tiempo intenta poner en orden sus sentimientos por Cedric. Por razones que parecen escapar de toda lógica explicable, estos tres chicos se encuentran entre l...