When Love Is Not Enought

Capitulo 13: Progreso

Capitulo 13:

-Ah...ah...ah

Zoro estaba agarrado a la pared, como si se estuviera sosteniendo de ella mientras jadeaba en busca de aire debido a ese golpe recibido en su estomago, y entrecerraba sus ojos debido a la vista nebulosa por la sangre que se mantenía en su ojo derecho.

Ya no podía dar un paso atrás, por Sanji, jamás lo haría. Le haría frente a cualquier situación.

12 horas antes...

Zoro solo se mantenía abrazado a Sanji esperando a que su respiración se regule. Luego de todas las palabras que ambos se habían dicho, el impulso de Zoro por estar allí y Sanji por aceptar una segunda oportunidad de vida gracias a ese alguien que apareció de manera desprevenida en su vida. Los hacía mantener a ambos en el mismo cuarto.

Todo en ese hogar era un desorden, las decisiones ya no parecían estar presentes en la mente de Sanji, la lejanía de ese día le demostraba que todo había sido un error. Como si una bofetada mental lo habría despertado de esa ceguera que tenía por Law. No está seguro si aún la conserva, pero en este estado, su mente se quiere mantener en blanco.

Zoro abrazaba a Sanji mientras estaban sentados en el suelo y le sostenía su cuerpo, el rostro de Sanji estaba oculto en el hombro del peliverde y él mismo le acariciaba la cabellera y con su otra mano pasaba tranquila de arriba a abajo, con un leve roce, por la espalda de Sanji para tratar de transmitir la seguridad que le había sido arrebatada hacía unos años atrás. Zoro no quería moverse, pero no podía quedarse por más minutos en ese lugar si corrían el riesgo que ese cínico de Law regrese y sea capaz de hacer quién sabe qué cosa. Estaba más que seguro que no iba a permitir que ese sujeto se acerque más al rubio. No lo iba permitir por nada del mundo.

Ese silencio largo que era necesario para los dos, sostenían ese delicado sentimiento que los obligaba a permanecer callados antes de expresar todo con ese dolor y tristeza. En esa situación que lo acorrala, Zoro regresaba a su infancia y quería aferrarse lo más posible a esa segunda oportunidad que también se presentó en su vida. Si Sanji supiera toda su historia, en totalidad, tal vez también llegaría a creer que es un monstruo. 

-Mhgn...

Zoro lo separó unos centímetros de su lado al escucharlo quejarse.

-¿Quieres que nos vayamos?-Le susurro al mirarlo en ese aspecto, con intención de querer cruzar su mirada con la de él, pero mantenía su vista baja, mirando ese suelo frío que parecía ser el último sentimiento que había quedado en ese hogar; La frialdad.-

La expresión de Sanji le dolía al mayor. Su rostro reflejaba todo, no hacían falta palabras si ya todo era expresado por sus facciones.

-Sí...-Musitó-

Zoro comprendió con los sentimientos enredados en su interior y al pararse, extendió su mano hacia el Sanji.

Sanji, con su mano temblorosa tomó la de Zoro que demostraba el indicio de un nuevo sentimiento: La calidez. Sanji ya había olvidado cómo se sentía, pero Zoro estaba allí para no traer recuerdos de las mismas, si no, para recrearlos a su propia manera.

Juntos decidieron atravesar cada habitación de esa casa que ya parecía lo más próximo a una ruina, salieron y fueron al auto del mayor que lo esperaba de manera mal estacionada por el nerviosismo y la rapidez por querer llegar al lado de Sanji. Pero no pensaron encontrarse con él al lado de su Audi negro.

-¿Ace?-Preguntó al encontrarse con esa silueta familiar-

-Si pensabas que te iba a dejar solo, no hubiese sido capaz de llamarme tu mejor amigo.