Toma la vida por los cuernos

Capitulo 4 No lo pienses mas

A pesar de ser un día común y cualquiera de cierta manera era algo especial, mi mama por fin llegaba a casa después de trabajar toda la semana cuidando personas de la tercera edad, mi hermana y cuñado venían de visita, pediríamos algo de comida y la pasaríamos en familia, ese día no pude salir con Rudo, ni hablar mucho con él, me sentí un poco mal por el, no poder hablarle o mandarle mensaje, según el entendía bien, pero yo me sentía algo mal, dejarlo abandonado, aunque no fuera así en realidad, el saco planes rápidamente, paso toda la tarde trabajando como era su rutina y cuando quedo libre se fue a casa, limpio y ordeno un poco lo que veía fuera de su lugar hasta que llamaron a la puerta, el toro fue abrir y su querido amigo Guillermo entro con una bolsa de caguamas y otra bolsa de comida

-ahora sí, ya está todo, cuéntame como te fue con el chavo ese-

- ¿neta quieres saber lo que hago con él?, luego no empieces a decirme que empiezo con mis "puterias"-

-que no cabrón, pero no te veía tan enrollado con alguien desde hace rato, no te veía tan prendido desde que estabas con la Vero-

-conste, si empiezas con esas cosas ni te cuento nada-

-sí, ya entendí, ahora ya, dime como van las cosas con el-

-pus tranquilas, salimos, comemos, vemos tele, hablamos-

- ¿y ya? -

-mira... abre la botella que así seco no te puedo contar bien-

El toro saco unos vasos de la cocina y el tigre fue llenándolos bebiendo la espuma de uno de los vasos que casi se derramaba en la mesa, Rudo tomo un vaso dándole un gran sorbo

-pus si nos besamos y todo, pero...-

-no te convence o que-

Tomo la botella de caguama llenando su vaso nuevamente y bebiendo nuevamente

-me chiveo un chingo, es bien chido conmigo, muy lindo, me hace reír un montón, siempre que nos besamos me deja bien apendejado, tiene un hociquito bien rico-

-y cuando te lo echas-

-cabron ¿me estas escuchando? Me chiveo un montón con él, cuando nos besamos me pongo bien nervioso y siempre le digo que me tengo que ir y lo dejo-

-mira, lo que tienes que hacer es venir a verme antes de verlo a él, te tomas dos chelas pa'garrar valor, te doy un globito y lo vas a ver, porque si sigue así se va a abrir, se va a ir con otro-

El toro enchuecaba su cara y tomaba más cerveza, en ningún momento pensé en siquiera dejar de salir con él o salir con alguien más pero Rudo tenía esa inseguridad, de que en algún momento yo lo dejara, viera a otro hombre, no sé por qué pensaba que me cansaría o que me molestaba que actuáramos como si fuéramos amigos cuando salimos, tampoco ayudaba el hecho que Memo le dijera esas cosas solo para actuara de una vez

-me chingo a quien quiera quitármelo-

-pus ponte buzo que si esta bueno como dices te lo bajan rápido-

- ¡ya lo sé! Deja de andar diciéndolo...-

. pero... ¿apoco si esta rico el zorro? -

-Puff...tiene un pelaje bien calientito y suavecito, su hociquito tiene unos colmillos que muerden riquísimo, unas manitas suaves con unas garritas y su carita bien pinche linda-

-pus ya te estas tardando, porque, así como lo cuentas hasta yo te lo bajaría-

Guillermo se empezó a reír y bebió de su vaso con cerveza, a Rudo no le pareció muy gracioso, con el ceño fruncido se quedó mirándolo seriamente