El hotel no es tan lujoso, ni por fuera ni por dentro. Es cálido, acogedor, familiar, incluso aceptan mascotas. Nosotros esperamos mientras Liz y David se encargan de pedir una habitación. Tenemos que dejar a Mewtwo entre nosotros para no llamar la atención, pero creo que funciona a la inversa pues las miradas de todos en la recepción están fijas en nosotros.
Liz y David se acercan a nosotros, Liz lleva una llave en la mano.
—Ya tenemos una habitación —dice David.
—Hemos pedido un solo cuarto para todos nosotros —secunda Liz—. Será mejor así.
—Subamos ya —dice Harumi—. Mientras más pronto estemos resguardados, será mejor.
Tiene razón, así que subimos todos al ascensor.
De nuevo siento esa mirada tan intensa sobre mi espalda.
Tengo un mal presentimiento.
Ese imbécil de Russell Harrison siempre ha tenido la mala costumbre de llamarme cuando menos quiero saber algo de él. ¿Qué querrá esta vez?
— ¿Qué?
—Señor, tengo noticias de ellos.
Vaya…
De repente ha despertado mi interés.
— ¿Dónde están?
—Los he visto entrar a un hotel. Jay Jason va con ellos, parece que se ha ganado su confianza.
—Todo va conforme al plan.
—He permitido que Perla Cobby se dé cuenta de que los hemos seguido hasta aquí, como usted ordenó. Conociéndola, sé que saldrá en cualquier momento para buscarme.
—Cuando eso pase, ya sabes qué hacer.
—Sí, señor.
—Asegúrate de que su Pokemon, ese gato parlante, no salga con ella.
—Dudo que sea así, señor.
—La quiero viva, recuérdalo.
—Sí, señor.
Eficiente.
Me agrada.
—En cuanto a sus amigos… Quizá deberíamos aplicar un poco de presión sobre ellos.
— ¿Señor?
— ¿Viste quién más iba ahí con ella?
—James Harrison, Onyx Fox, Sheryl Crown, Harumi Itou, Jay Jason, Jackie Roosevelt, Liz Mawson, David Cobby y cinco mujeres de cabello azul.
—Sé quiénes son esas mujeres. Pero, por ahora, concentremos nuestro ataque en los amigos de Cobby. Encárgate de David, su hermano mayor.
—Sí, señor.
—Y si tienes la oportunidad de aniquilar también a tu hijo…
—Ese no será problema, señor. Sabe que me he desligado de mi familia desde que me uní a usted.
—En ese caso, los quiero muertos a ambos.
—Así será, señor.
Termino la llamada.
Hay pocos como Russell Harrison.
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Pokemon V: La Batalla Contra la Elite
Fanfic¿Por qué tuve que ver los ojos de Skyler antes de morir? Él lo dijo, Él lo repitió mil veces. Él me advirtió que si veo los ojos de alguien antes de darle muerte, esa última mirada me perseguiría el resto de mi vida. Y los ojos azules de Skyler no m...