Esta es la primera historia que escribo así, espero que les guste.
Les agradezco desde ya por leer mi historia, y darme la oportunidad de crecer como escritora.
Han pasado 3 meses desde que mi relación con Jessica terminó. Tres meses en los que no he podido hacer nada más que beber y recordar.
A pesar de ser una celebridad y tener a billones de chicas hermosas muriéndose por estar conmigo mi corazón solo le pertenecía a cierta castaña de ojos mieles de estatura promedio y rostro angelical, pero para mí mala suerte ella ya no era nada mío. Ahora mismo me encontraba tirado en mi sofá pensando en ella, en los momentos que compartimos y las lágrimas traicioneras amenazan con salir en cualquier momento.
La canción de maroon 5 sonaba de manera aleatoria en mi reproductor y sin querer mi vista se posó en el bello portaretrato donde la fotografía que lo adornaba era una nuestra.
¿A caso piensas en mi? Por favor que la respuesta sea si
¿En lo que solíamos ser? Te echo de menos
¿Es mejor ahora que no estoy cerca? Vuelve
Misamigos están actuando extraños Ellos también te extrañan
No mencionan tu nombre Y aun así no sales de mi mente
¿Eres feliz ahora? Deseo que así sea...
Sin pensarlo dos veces tome mi celular y cambie de canción.
Entré a whatsapp y observe lo preciosa que luces en tu foto de perfil...
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Flashback: -Jessi... -Si, Shawn? - no podía verla pero me imaginaba su hermoso rostro.
-te echo de menos.
-Y yo a ti mi chico hermoso, solo faltan 3 meses más y nos veremos, ya pasaron 5, resiste un poco más, nos lograremos ver para tu cumpleaños.
-Es que no quiero esperar Jessica. Te quiero aquí conmigo, en la gira. - todo se torno en silencio y la oí suspirar.
-Shawn ya hablamos de esto varias veces, no tengo ganas de discutirlo otra vez...
-Es que tu nunca quieres discutirlo, prefieres evitar el tema y estoy cansado
-Que demonios Shawn? Tengo un trabajo, no puedo irme 3 meses así como así, por mas que quisiera acompañarte no puedo!
-Podrías renunciar.
-No puedo creer que estés pidiéndome algo como eso, yo jamás te he pedido renunciar a tu sueño para estar conmigo Shawn, siempre te he aceptado y amado a pesar de la distancia! No seas injusto
-Tu no seas injusta Jessica. Si me amaras en verdad no te importaría renunciar a tu trabajo para estar conmigo.
-A caso te estás escuchando Shawn? No pase 6 años de mi vida estudiando veterinaria para luego renunciar a mi puesto! Te amo shawn pero estas siendo egoísta en estos momentos
-Solo quiero que estés conmigo, cumpliendo mi sueño... Es demasiado pedir?
-Escuchate tantito, estas pidiéndome cumplir tu sueños juntos a costa de los míos.
-Entonces no me amas.
-Shawn, esto es absurdo sabes que...
-Estoy harto de esta mierda Jessica. - su voz se torno rasposa y temblorosa.
-Que quieres decir?
-Creo que es mejor terminar, no puedo más con esta relación a distancia.-frunci el ceño molesto. - No, no puedo mas con esta relación donde doy pero no recibo.
-Shawn... Yo.. - se quedó callada unos minutos y luego dio un largo suspiro, pude escuchar como sorbia su nariz. -Está bien, si eso es lo que quieres, eres libre Shawn Mendes, que seas muy feliz y cumplas todos tus sueños.
Antes de que pudiera decir o hacer algo ya me habia colgado, no tarde en darme cuenta del gran error que habia cometido, pero ya era demasiado tarde.
Te extraño de eso no hay duda. Te amo tanto que he decidido dejarte ir, espero con el tiempo dejes de doler tanto como ahora lo hacer, alejarme es lo mejor para ambos, no puedo mantenerte atada a mi...
Sin mas bloquee mi celular y me prometí hacer mi mayor esfuerzo para olvidar de ti.
Tres meses más tarde...
-Shawn, ya es hora de salir, el público espera por ti, más vale que estés fuera en 10 minutos o patearé tu trasero hasta que llegues al escenario.
-Si claro, solo dame unos minutos.
-Ya dije, tienes 10 minutos.
Suspiré pesadamente. Me mire al espejo y recargue mis peso en el lavabo, me sentía agotado, no puedo reconocer a la persona que estoy mirando ahora, es tan difícil hallarme.
Mojé mi rostro y lo observe una vez más, como las gotas de agua se deslizaba por mi rostro, hasta unirse con otra y caer más rápido por mi barbilla.
Mis ojos ardían, no pude contener más las lágrimas lo cual aumentaba mi frustración y mis ganas de gritar.
Un golpe en la puerta me hizo sobresaltarme. Rápidamente tomé una toalla y seque mi rostro con pereza. Abrí la puerta del baño y me dirigí a paso lento hacia la puerta principal del camerino puesto que los golpes continuaban.
-Ya voy. - apresure más mi paso y abrí la puerta al momento que me restregaba la toalla en los ojos para intentar de manera inútil ocultar que tenía los ojos hinchados de tanto llorarla.
-Por dios Helena no han pasado ni 5 minutos, me diste 10 y apenas si han pasado 2, dejame descansar un poco estoy agotado.
Dije caminando hacia el sofá y guardando mi cara entre mis manos. Al no recibir respuesta levante el rostro encontrándome con la sorpresa más grande de mi vida.
Mi corazón latía a mil por hora, mis manos comenzaron a sudar, mi vista se nubló a causa de las lágrimas que no tardaron en salir y mi cuerpo reaccionó casi por sí solo al verla ahí frente mío de pie, di grandes zancadas hasta llegar a ella y la envolvi entre mis brazos en un cálido abrazo.
Ella al igual que yo sollozaba y se aferraba a mi cuerpo, su pequeño cuerpo daba fuertes sacudidas a causa del llanto.
Al cabo de un rato conseguí calmarme y ella también lo hizo. Seguíamos abrazados, no queríamos separarnos.
-Shawn... - la mire, tan pequeña, tan frágil, tan hermosa, tan perfecta, tan... mía.
-Lo lamento, lo lamento tanto Jessica... Soy un imbecil un cretino de primera, un patán... Yo no sé que puedo hacer para conseguir tu perdón pero te prometo que si me das la oportunidad yo te haré la mujer más feliz y nunca volveré a lastimart...- me calló con un suave y dulce beso.
Extrañaba tanto besarla, sus labios con el típico gloss sabor fresa pero su boca con un fresco sabor a menta, era la mezcla perfecta, tenerla entre mis brazos el mismísimo cielo, y verla sonreír solamente a mi era la manera más mágica de sentirme morir.
Ahí lo supe, mi sueño no es ser cantante, mi sueño es tenerla a mi lado, verla triunfar y cumplir sus metas por el resto de mis días.
