Al día siguiente en la Universidad me centro en pensar en quien puede ser el lobo, y no encuentro ningún candidato. Pienso en Loan que alguna vez ha babeado por mí, pero es facilísimo leerle la mente. Me dedico a la gente más conocida a leerle la mente, y a todos puedo leérsela. Lo mismo Cassandre se ha equivocado y a los hombres lobo sí que puedo leerla.
Ha sido un día agotador, pero antes tengo que enfrentarme al profesor Jones y decirle que conmigo su secreto está guardado. Voy disimuladamente hacia su despacho y cuando me abre se sorprende.
Pr. Jones: Pasé y sientese.
Rose: Verás quería decirte...
Pr. Jones: ¿Sí?
Rose: Que conmigo tu secreto está guardado, no diré nada. Todos tenemos secretos.
El profesor Jones se sorprende, se para y no contesta inmediatamente.
Pr. Jones: No esperaba esto la verdad.
Rose: Me di cuenta como te sentiste atraído por mi sangre.
El profesor se ríe irónicamente y con ganas.
Pr. Jones: No soy un vampiro, Rose.
Vuelve a ponerse serio, pero en su mirada hay una calidez especial.
Pr. Jones: Creo que me deje llevar por la situación, simplemente.
Pero si no es un vampiro, ¿entonces?
Rose: He leído mucho sobre vampiros y no les tengo miedo.
Pr. Jones: Ya te he dicho que no soy ningún vampiro. Y entiendo que no les tengas miedo si te juntas con ellos.
Rose: ¿Qué?
Pr. Jones: Los Bartholy, sé que usted está al tanto, y sólo espero que usted no sea su cena.
Noto que me mira el cuello y está alterado, diría que le molesta profundamente que me hable con ellos.
Rose: Ellos jamás harían eso, para mi son casi como una familia.
Pr. Jones: He visto como Drogo la mira, esa mirada no es de un hermano adoptivo. Temo a que le hagan algo.
Rose: ¿Pero qué te crees?
Le suena el teléfono al profesor y hace un gesto como que no es importante, pero yo decido irme para que coja esa llamada. No me gusta el vuelco de la conversación, me hubiese encantado saber porque se dejó llevar y que es lo que siente, pero al final hemos acabado hablando de los Bartholy.
Cuando salgo por el pasillo me encuentro a una alumna morena de pelo rizado especialmente guapa que jamás había visto y me mira con curiosidad, como si ya me conociera, pero a mi no me suena de verla por el campus.
Las noches siguientes he salido a pasear por el bosque, antes iba por las tardes, pero ahora me encanta salir cuando ya ha anochecido, me conozco el camino de memoria, y me encanta bañarme en el lago es como si me atrayera meterme en esas aguas, me siento conectada con el lago y las aguas y me ayuda a poner en orden mis ideas y a pensar en todo. En cuanto llego me voy quitando la ropa, y cuando me estoy quitando el pantalón noto que hay alguien más en la orilla del lago. Cuando llegó no puedo creer lo que ven mis ojos. ¡Es el profesor Jones! ¡Y está desnudo!, pero... ¿qué hace aquí? Me escondo tras unas ramas mientras vuelvo a ponerme mi ropa. No puedo dejar de contemplar lo que estoy viendo, su cuerpo brilla bajo la luz de luna, sus músculos son de acero perfectamente definidos, y su culo, su culo es muy sensual. Me fijo en su cuello, me entran unas ganas irrefrenables de besarlo. Se gira un poco y veo cómo unas gotas le caen desde el pelo hasta el pecho y van bajando hasta caer en su entrepierna, lugar que no puedo ver a no ser que se gire un poco más.
Noto calor, mucha calor, y mis ganas de abalanzarme al lago aumentan, y si es junto a él mucho mejor. Dudo unos segundos si salir a su encuentro... Parece que me estuviera incitando a salir de mi escondite, aunque se está visitando para irse.
El profesor gira su cabeza varias veces como buscando algo, creo que ha debido de sentir mi presencia, he debido de hacer ruido.
De repente noto otro tipo de calor, me arde, mi colgante está ardiendo, lo cojo rápidamente y lo pongo encima de mi ropa. Algo pasa. Miro a mi alrededor, y veo que el profesor ya se ha marchado. No, creo que él no es el peligro... A no ser que él sea el que corre peligro.
Decido elevar la mano hacia la altura del colgante, me indica hacia donde debo girar,y voy corriendo para allá. Ahora si siento miedo, me da la sensación de que alguien me persigue. Corro todo lo que puedo y cada dos por tres miro mi péndulo para ver si voy en la dirección correcta. El péndulo sigue ardiendo. De repente tropiezo con una rama, y caigo al suelo. Cuando voy a levantarme veo que hay un hombre que no conozco acercándose a mi con sus ojos color sangre, y una expresión malvada en su rostro. Cuando me ve en el suelo sonríe. Mi corazón se dispara, presiento que va a hacerme daño, así que intento hacer algo, pero no puedo concentrarme, intento hacerlo levitar pero no puedo. Coge su mano y me toca la cara, veo unas imágenes de ese hombre sufriendo, parece ser que este sufriendo una transformación o alguien lo esté torturando.
De repente veo una rama, la miro y la disparo en su dirección clavándosela en la espalda a la altura del corazón, me levanto y sigo corriendo todo lo que puedo.
Veo unas luces al fondo y entonces conozco la casa, es la casa de los Bartholy. Bajo corriendo y veo que Drogo, Peter y Nicolae están en el jardín, parecen buscar algo. Cuando me ven a lo lejos, corren hacia mí y en menos de un segundo están a mi lado.
Nicolae: ¿Donde está?
Drogo: Vamos Peter puedo olerlo muy cerca, ven por aquí. Nicolae si te necesitamos te aviso.
Veo a Drogo que mira mi rodilla y sale disparado junto a Peter.
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Sebastián- Mistery Spell - It is love (Fanfic)
RandomBasada en una de las historias de It is love de Claire Zamora. Rose es una chica de 23 años que decide terminar sus estudios de Arqueología en la Universidad de Mistery Spell. Allí descubre que los mitos sobre esa ciudad son ciertos y que muchos de...