Lo mejor que ha pasado ~ Marco Asensio ~

Capítulo 15

Ahora mismo me encuentro de camino a Madrid, ya es día 2 de enero y ya toca volver. Esta Navidad he estado en Sevilla con mi madre, Luís y mi hermano y en año nuevo estuve en Extremadura con mi padre, también le tenía que ver, ya de paso le contaba mi relación con Marco.
Marco me ha llamado ya dos veces desde que le he avisado que ya salía de Extremadura para ver cuanto me quedaba.

- Dime Marco - digo cuando le cojo la llama por tercera vez.
- ¿Por donde vas?
- Estoy en la entrada de Madrid. ¿Vas a dejar de llamarme para ver por donde voy?
- Es que te quiero ver ya, te he echado de menos.
- Yo también te quiero ver ya pesado. ¿Voy a tu casa o vienes tu a la mía?
- Voy yo a la tuya. Bueno, más bien ya estoy aquí.
- ¿Estas en mi casa? Y porque no te has esperado a que llegase que estarás en la puerta.
- Eh, no se si te acordarás pero me distes una copia de llaves igual que yo a ti. Estoy en tu sofá tumbado ricamente.
- Ais, es verdad, no me acordaba.
- ¿Y tu vas a ser profesora? Un día les vas a decir a los niños mañana vamos a jugar a este juego y al día siguiente ya no te acuerdas de que juego les dijiste.
- Oye, que no tengo la cabeza tan mal.
- Si, si lo que tu digas pero se te olvidan las cosas fácilmente, asumelo.
- Me quedan diez minutos, ¿vas a aguantar diez minutos sin llamar para ver por donde voy?
- Creo que si. Ahora te veo fea.
- Ahora nos vemos - digo colgando.

Ay este chico, me vuelve loca.
Estoy aparcando en el garaje y creo que Marco se está subiendo por las paredes porque me está llando otra vez, he tardado veinte minutos en vez de diez y ya me ha llamado tres veces más en estos diez minutos.
Noto como me vibra el móvil, otra vez me está llamando pero no se le voy a coger porque ya estoy sacando las llaves del bolsillo.

- ¡Ya estoy aquí! ¡Cuelga!
- Ay, Claudia, pensaba que te había pasado algo. Me has dicho que diez minutos y has tardado veinte.
- Han sido diez minutos más.
- Díez minutos en los que no me has contestado ni una sola llamada estaba preocupado.
- Bueno, estoy bien y ya estoy aquí, ¿me das un abrazo?
- Si, por fin estas aquí - dice dándome un abrazo.
- Te he echado de menos Marco, mucho.
- Yo tambien jodia fea - dice dándome un beso que alargo, llevaba muchos días sin besar esos labios - Ayer estuve con Sof.
- ¿Que estuviste con Sof?
- Si, quedo con Brandon.
-Joe, no se espera a que yo llegue. Y que pronto ha llegado esta Navidad otras navidades viene más tarde.
- La interesaba venir antes. Me habló el jueves para ver si ayer ya estábamos aquí y como la dije que el lunes ya estabamos pues se ha venido antes.
- Ay que tía, luego hablo con ella. ¿Y tú que tal?
- Muy bien, en Holanda no tan bien.
- ¿Por qué?
- Ya sabes, mi madre. Mi abuela no lleva muy bien la Navidad sin mi madre y si encima vamos nosotros peor a un.
- Ay, pobrecitos míos. Es normal,era un ser querido, en estas fechas se los echa mucho de menos.
- Ya, ¿y tu con tu padre?
- Bien, con mi padre bien, con la hija de su novia no. Es una payasa esa tía.
- ¿Ya te cae mal y solo la conoces de dos días? - dice riendo.
- Si, es de las típicas pijas gilipollas consentidas, su madre la tiene muy mimada y como su madre también pretende que mi padre va a ser igual que el suyo y como mi padre no la consiente, no me ha consentido a mi la va a consentir a ella, pues enfada con él y hace que su madre y mi padre discutan.
- Sique es un poco payasa si, como la hermanastra.
- ¡Oye! - digo pegándole en el brazo.
- Payasa y agresiva, lo tiene todo.
- Te encanta esta payasa agresiva.
- Me encanta esta payasa agresiva - dice afirmando. ¿Te quieres venir con estos y conmigo a jugar al tenis?
- ¿A jugar al tenis?
- Si, o al padel. Están las dos pistas al lado asique lo que se nos antoje.
- Venga, voy. Pero yo no voy a jugar mucho que estoy cansada.
- ¿Ya estás cansada? Si son las doce de la mañana.
- Si, me he tenido que levantar temprano y ayer me dormí tarde hablando con un chico muy feo.
- No me tendré que poner celoso de ese chico feo ¿no? - dice de broma.
- Que tonto eres - digo yo ríendo también y cogiendo la maleta para ir a la habitación.
- Te dejo que no juegues mucho si juegas un partido conmigo.
- ¿Con quién iba a jugar sino?
- ¿Te recuerdo que las tres últimas veces has jugado con cualquiera d emis amigos menos conmigo?
- Ah, si, es verdad. Pues venga, hoy juego contigo.
- ¿Echamos una de parejitas?
- ¿Viene alguna novia?
- Viene Sof.
- Entonces si, yo quiero jugar contra esa parejita.

¿Sabeis el sentimiento de estar tu solo con alguna pareja? Pues así se tiene que sentir Poblete. Estamos todos en parejas menos él.

- Esto se lo pienso pagar a Javi, dejarme solo con las parejita nada más que porque Eva ni quería venir, dejas solo a su amigo por la novia. Bueno, como aquí el señorito Marco.
- Oye, no te quejes de Marco porque con el vas a poder jugar, yo le comparto.
- Si, pero si no estuvieses tu no le compartiría - dice de broma.
- No sé si sabéis que no soy un objeto eh - nos dice Marco.
- Vamos a jugar anda. Echamos unos partidillos y ya dejamos a Claudia que se siente la gorda - dice Paola.
- Oye bonita que tu estas deseando sentarte ya.
- Si, la verdad es que si - dice riendo - Pero por ser una chica fitness aguanto.
- ¿Chica fitness por jugar al tenis? - dice Sof.
- Más quisieras tu ser una chica fitness guapa. Lo estás deseando.
- Bueno, dejad a mi novia pesadas e iros a jugar que os toca - dice Bertto.
- Alguien que me quiere y me defiende.
- No, si es para así jugar nosotros antes - dice Bertto a lo que reímos todo y Paola se hace la ofendida pero en realidad la ha hecho gracia.
- Muy bonito, luego no me pidas que te defienda cuando se metan contigo eh.
- Te quiero.
- Ahora ya no funciona.
- Vamos a dejar a estos con sus peleas y nosotros vamos a jugar - dice Brandon.
- Y a mi me dejáis aquí viendo como se pelean estos - dice Poblete para dar pena pero riéndose.
- No te quejes cabron, que ahora voy a jugar contigo - le dice Marco.
- ¡Vamoss! - grita Marco - ¡Muy bien mi amor! Os hemos ganado chicos, se siente.
- Olee, y decíais que íbamos a perder por haber empezado perdiendo - digo para picarles un poco más. Yo ya no juego más, Poblete te toca.
- Bueno me toca con el ganador, ahora esta súbdito y voy a ganar yo también aunque sea la reserva. Esta te la guardo eh.
- A mi no me guardes nada que por lo menos juegas conmigo, con los demás no.
- Eso también es verdad, te quiero amigo - dice dándole un abrazo a Marco.
- Que pelota eres - le digo.
- No te pongas celosa porque veas que me quiere más a ti que a mi.
- Que tonto eres tío - digo riendo - Marco te llaman.
- ¿Quién es?
- Es...