Del Amor al Odio. | Trilogía Were Hunter #1

Cap 19

Urías no podía respirar. Era ella… la chica con la que estaba Leya. ¿Sería su hermana? Antes de que se bajara del árbol para ayudarla a salir de apuros hubo destellos y de pronto a lado de la chica apareció… ¡Leya! Su corazón se detuvo.
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Ayel estaba mareada, jamás había hecho un viaje a toda prisa casi siempre lo planeaba pero hoy no. Logro oler el rastro de Gretel y también el de los lobos.

Miro a su izquierda — gr…

Gretel estaba peleando con tres lobos. Ellos eran 7 en total.

Puedo con ellos...

Se abalanzó sobre uno de ellos que iba a atacar a Gretel por la espalda, lo apuñalo el lobo gruño y la alejó con un intento de mordida.

—¿Pero qué? —El líder parecía confundido.

—Yo creo que es mejor que se vayan...—Gruño Ayel

—¿Qué haces metiéndote en nuestros asuntos?

—Pues resulta ser que este asunto me compete… —siseo

Los lobos las rodearon.

El lider gruño—Es mejor que te vayas, a menos que quieras salir herida.

—Ja’ dudo que de los que estamos aquí nosotras seamos las que salgamos heridas. —amenazó

Ayel estaba pensando cómo salir de allí, ella no podía teletransportar a Gretel ya que ella estaba en celo, e impedía que ella o cualquier hembra cerca de ella se teletransporte, es por eso que le había pedido a Nick que buscara a alguien más para que lleven a Gretel y a ella… pero no habían llegado. ¡Genial!

—Ayel…—Hablo gret con los dientes pegados

—¿Si…?

—¿Qué hacemos?

—Estoy pensando…

—Pues hazlo rápido. —siseo Gretel

Los lobos las acorralaban y las dirigían al lago. No le quedaba de otra.

—Gret… tenemos que cambiar.

—¿Estás segura?

—Es eso o morirnos en el lago… —con cada paso el lago les quedaba a sus espaldas.

—Bien tú dices…

Gretel saco el collar que tenía puesto y lo dejo a la vista. Se voltio a Ayel y asintió.
Ayel respiro profundamente…

Es hora de jugar.
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Urías no lo podía creer Leya era… una were-hunter. Una were-hunter ¿lobo?
Escucho a la rubia decir:

—Muestra lo que realmente somos, que nuestros enemigos teman…

De pronto el collar que la chica tenía brillo. Los lobos retrocedieron y la chica cambio: su pelo rubio se cambia a negro azabache, sus ojos negros a unos aceitunados, su piel broceada por una piel casi blanca como la nieve. Era guapa a su manera. Las escucho hablar.

—¡Al fin! Ya me preguntaba cuando me dejarías ser yo.

Ayel sonrío — Bien mi turno…

¿Su turno? Urías estaba realmente confundido.

Leya cambio también, su cabello negro-azulado a café-rojizo, su piel blanca a color arena y sus ojos azules a… ¡verdes cristalinos!

Él no podía respirar, la chica a la
que había salvado y besado con pasión era su enemiga… era ¡Ayel Kimsly!
Ayel sintió ese extraño calor por su espalda. Ser como era antes se sentía
extraño.