|| ¿Puedes soltarme? || Rantaro x Hinata

Capítulo único.

Con serenidad dejo sus brazos envolver el torso de su novio permitiéndose apoyar su cabeza en la espalda del contrario, el de cabello castaño tensado por la acción de este murmura cosas, con un sonrojo realmente fuerte intenta alejar al avocado humano, para Rantaro ese comportamiento era sumamente tierno que lo hizo sonreír provocando que Hajime gruñera, realmente lo hacía avergonzarse y no le encontraba la gracia a sus acciones, Hinata no comprendía a su pareja.

— ¡Y-ya es tiempo de que me sueltes! — Exclamó irritado y nervioso, con un poco de delicadeza trato de quitar los brazos del masculino.

— Solo un poco más  — replicó aspirando el aroma del delicioso perfume del mayor.

A pesar de que Hinata sea mayor todos sabían perfectamente quien era  el que mandaba en la relación, y ese era Amami, era obvio, Hinata parecía ser él activo pero... era todo lo contrario. Se sostuvo de la mesada de la cocina esperando la separación de su cuerpo con el de Rantaro pero nunca paso.

— ¿No te cansas? — Preguntó en su tono neutro.

— Amor, jamás me cansaría de tenerte en mis brazos —  se aferró más a el cuerpo ajeno, Hinata soltó un pequeño gemido debido a la fuerza de Amami, sus mejillas teñidas de rojo y su corazón teniendo un pulso irregular demostraban que ese "amor" proveniente de las palabras de Rantaro habían tenido efecto en él.

De forma involuntaria dejo que de sus labios saliera un "te amo", al darse cuenta de lo sucedido sus manos rápidamente tapan su boca, y nota como los brazos de Amami lo dejan de abrazar para ahora com sus manos tomar el hombro a Hinata y hacerlo voltear para verle el rostro.
Con los mofletes pintados de un carmesí fuerte por las palabras escuchadas se permitió sonreír como tonto enamorado, el mayor no era de expresar sus sentimientos asi que esta ocasión había sido especial, soltó un suspiro y acarició com ternura el rostro de su pareja que le miraba curioso.

— Yo también te amo — Susurró cerca de su oído en forma de seducción recibiendo un pequeño empujón como respuesta y para su sorpresa también recibió un beso en la frente, con la yema de sus dedos tocó donde antes estuvieron los labios del que carece de talento, Amami dirigió sus hermosas gemas verdes hacia Hinata que miraba hacia otro lado, nuevamente su senpai le había demostrado una pizca de amor y con eso él era felíz.