Hola gente sin nada bueno que hacer, ustedes ya me conocen. Bienvenidos a mi historia, y como buen protagonista que soy les voy a contar desde el principio así que, les presento nuevamente a Sooga, una aldea pequeña alejada de las grandes y estresantes ciudades, y cerca de exuberantes paisajes de gran belleza y plenitud (creo que ese es su punto bueno) haciéndola parecer de fantasía y perdida en el tiempo (Literal).
Una aldea con gente alegre, donde sus habitantes están orgullosos de sus... cosas (Con eso aclaro que son sus bobos festivales, que les dan motivos de gastar y ganar dinero sin sentido). Todo el mundo es feliz, todos viven alegres, excepto por las persecuciones y peleas de sus "adorables" niños (En serio son irritantes, no me importa si un día fui uno de ellos, simplemente no los soporto).
A lo que iba.
Las rutinas de sus habitantes son tan predecibles, como Pucca persiguiendo a Garu y salvándolo de su máximo enemigo mortal, súper sexy Tobe (osea YO), y mis patéticos ninjas. Ching y Abyo estorbando, digo, ayudándolos, los chefs cocinando (no me quejo de su comida), su trabajador Dada (tan patético como siempre, no se como Ring Ring se acuesta con él, tan sifrinos que se la dan ella y su padre), no hay mucho crimen que Bruce pueda detener (ya que su feto mal desarrollado al que llama hijo, Abyo no hace nada), los únicos que alteran la paz somos nosotros y los vagabundos y uno que otro (Garu y cualquier otro que terminamos arrastrando). Santa trabaja... de lo que sea (tiene demasiados negocios), Muji y sus "Zombis" (esos locos experimentos de él). El Maestro Soo y sus Doncellas (prostitutas bien pagadas prácticamente, ya que Soo y toda su familia lo único bueno que tienen es la cartera), bla, bla, bla, y demás gente (casi sin importancia) que se la pasea por la aldea.
Volvamos a Sooga 10 años después.
10 Años no pasan sin progresar o cambiar a las personas, algo debe ocurrir en cualquier momento, pero este no es el caso (Bueno si, y a la vez no, es difícil de explicar en pocas palabras).
Cambiando el tema. No me imagino el sentimiento de no poder dejar de pensar o realizar algo a lo que estás tan acostumbrado día a día (no me lo imagino del todo pero me identifico a veces, todo aquello que te hace sentir tan cómodo).
Vuelvo.
Cuando no estar con esa persona o realizar una acción se vuelve doloroso, las ansias y el pesar te consumen a tal nivel de enfermarte cuando intentas parar, lo llamarías adicción ¿no? sé que piensas en drogas al nombrar esa palabra con la que esta típicamente enlazada (Pues déjame decirte que, a mí ni las drogas me hacen sentir eso).
Se que lo ultimo que dije les parece un sin sentido, alégrense que me tomare la molestia de explicárselos mas tarde.
Prosigo.
En este pueblucho, donde las cosas más alocadas pueden ocurrir, solo puedes encontrar gente sumergida en esto llamado adición, o como ellos le llaman, amor. A tal punto que no creerías lo que son capaces de hacer para sentirse mejor consigo mismos, sin importarles nada, ni nadie.
Todos aquí harían lo que fuera por proseguir con sus obsesiones.
O eso pensé, pero estoy dispuesto a ayudarlos como buen samaritano que soy ¿A quién engaño? si yo fuese bueno, no habría una historia interesante que contar, y aun así, los ayudare... por lo menos hasta que me harte de ello y encuentre algo mejor para divertirme. MUAJAJAJAJAJAJAJAJA.
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OBSESIONES (TOBECCA)
RastgeleEn la pequeña aldea de Sooga, que alguna vez viste no es nada comparado a la realidad que se vive. Está llena de desastre y gente que no puede evitar causarlos. Nuestros protagonistas no son tan dulces e inocentes comparados a cuando niños, cada uno...