Narra Simón
¿Lo hice? Pues sí. Fue tan rápido decirlo allí pero nada de esto fue verdad. Me imagino lo que estarán pensando todos, no me lo quiero ni encontrar. Recuerdo cada cosa que dije a todos aquí.
"Hola, mi nombre es Simón Álvarez". Recordaba lo que anunciaba. "Pues, sí, soy gay,". "Ahora... Matteo no es gay, sólo era un amigo. Un buen amigo"
Susurros de otras personas se clavan en mis pensamientos. Al oír eso rápidamente se me aceleró el corazón.
- La persona con quién salgo es Ramiro Ponce - Afirmé y aunque es verdad que salgo con él, no quería nada con él - Ahora sí, me iré en paz - digo
Los murmullos de personas, las caras de impresión de mis amigos por lo que hice desde el comienzo. Estaba muy concentrado en eso que casi tropiezo al bajar de ese escenario.
- No me puedo arrepentir de lo que hice. Ya está hecho - Susurran mis pensamientos.
Cómo quisiera estar como antes. Acostado en el hombro de Matteo, acariciando su pecho y el mi cabello, diciéndole amor y él a mí vita. Extraño esos momentos en los que nadie podía interrumpirnos. Sólo éramos él y yo.
- Simón, aunque ya hayas salido del clóset, no significa que no debes trabajar - Me toma por sorpresa Pedro
- Lo siento, enseguida voy - Reacciono rápido.
- Sólo bromeaba, no es para que te alteres - Dice riendo
- Jajajaja. Bueno, pero igual voy - Aclaro.
- Pues sí. Hay mucha gente en el Roller por tu culpa. Necesitamos tu ayuda para atenderlos - Informa
- Ok, vamos que Nico está solo - Hablo para irnos a acompañarlos.
Toc, toc... Tocaron en la puerta. Salí a ver quién era y cuando la abrí, era de esperarse que aparecería...
- Hola Simón - ...Ramiro
- Hola - Simplemente respondí - Sabía que vendrías - No pude contenerme a comentar
- ¿En serio? - Cuestiona
- Sí, pero te esperaba en el Roller, no aquí - Afirmo
- Jamás estuve en el Roller, vine aquí porque me dijeron lo que habías dicho - Dice.
- ¿Qué dije? - Digo haciéndome a un lado para dejarlo pasar. No pude creer que no estaba en el Roller y que el chisme se regó super rápido, a menos que Ramiro tuviera a sus amigos.
Ramiro entra a la casa y luego cierro la puerta.
- Simón, ¿Quién era? - Grita Pedro
- Ramiro.
- Hola, chicos - Grita
- Hola - Devuelven el grito desde la sala Pedro y Nico.
- ¿Qué decías? - Hablo
- Pues... Es que... ¿Cómo es eso de que tú y yo salimos? - Pregunta como si susurrara.
- Yo tenía que hacer que todos dejaran de unirme con Matteo, era molesto que lo siguieran emparejando conmigo.
- Tienes razón, es muy molesto que te emparejen con una persona que en realidad no te ama - Nombra
- ¿Por qué lo dices? - Pregunto. Tenía dos opciones: O se refería a Matteo y a mí, o a él y a mí.
- Por nada. Sólo es un decir - Contesta
- Si es por nosotros, perdóname. Eres la única persona que ha salido conmigo y que el algunas personas en el Roller nos hayan visto saliendo. No podía dejar que todos pensaran por unas estúpidas fotos que Matteo y yo seamos algo. Es...
- ¿Imposible? - Menciona. No era la palabra que tenía en mente pero no podía contradecirlo en estos momentos.
- Sí, imposible - Afirmo repitiendo la misma palabra.
- Pero, ¿existiría una mínima posibilidad de que tú y yo podamos ser algo? - Pregunta
- Quizás - Susurro como si fuese un secreto.
- Sí - Exclama de buen humor. Una parte de mí decía que yo mentía, mientras otra me impedía pensar en que no había posibilidad porque sabía que cualquier cosa, en cualquier momento, podía suceder - Ahora que me has dado esperanzas, es hora de irme.
- Ok, pero ten en cuenta qué es un quizás - Digo para que no se haga tantas ilusiones.
- Y ya no es un no porque "tengo novio" - Dice guiñando un ojo.
- Es cierto - Me convenzo después de pensarlo un poco.
- Por favor - Pide refiriéndose a que le abra la puerta.
Abrí la puerta para escuchar un susurro de su parte que decía: "Adiós, Simón." En eso, rápidamente, se acercó y me dio un rápido beso.
- A...a... adiós Ramiro - Me despedí con un leve movimiento de mis dedos.
21 de junio de 2019: viernes
Pasaron muchos días después, no pasaban cosas realmente interesantes. Ramiro llegaba al Roller o me visitaba cada vez que podía, el trabajo era norrmal y no había noticia alguna de Matteo. Espero que haya terminado lo poco que le queda en clases por allá.
- Chicos, el día si pasó muy rápido - Menciono luego de estar llegando a casa.
- Es cierto, Simón - Responde Nico.
- ¿Ya nos toca cerrar? - Pregunta Pedro
- Aún no, pero falta poco - Contesta Nico
- Ok, terminemos para poder irnos - Sigo.
Cuando llegamos a la casa, cenamos y cuando estamos a punto de ver una película, tocan el timbre. Al abrir, vuelvo a ver el mismo rostro del día anterior.
- Hola - Me saluda Ramiro con un ramo de flores en las manos.
- Hola - Saludo haciéndome a un lado para dejarlo pasar.
- Vine a traerte esto - Anuncia
- Ehh... Gracias - Agradezco.
- Ramiro, pasa - Se escucha a lo lejos la voz de Pedro, cómo si se estuviera acercando - Veremos una película
- ¿Estás seguro de que quieren que yo esté?
- ¡Sí! Muy seguro - Responde Pedro
- ¿Y tú, Simón? - Pregunta
- ¿Yo? Pues... La neta... No me importaría que te quedaras un rato con nosotros - Suelto
- Entonces, veamos una película.
Después de ver la película, Ramiro y yo vimos que Nico y Pedro se habían quedado dormidos. Ramiro se levanta repentinamene y pide que le abra la puerta para poder irse.
- Ramiro, es muy tarde - Informo
- Lo sé, cuándo venía ya era tarde - Bromea
- ¿Por qué no te quedas? - Cuestiono
- Simón...
- Quédate - Pido
- Tengo que irme - Sigue con la idea
- No me gusta que mis amigos se vayan a estas horas, por favor - Insisto
- ¿Sólo soy tu amigo? - Pregunta
- Eres importante para mí. Por eso no quiero que te vayas así.
- Entonces, ¿Dónde dormiré? - Sigue
- Pues en mi cama o en el sofá - Anuncio.
- Pero...
- Si te vas, no saldré más contigo, ni te hablaré - Le amenazo.
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¿Seguiré Siendo Tu Amor Inevitable? (Sitteo)
FanfictionPara leer esta historia, lean Un Amor Inevitable (Sitteo), ya que es la primera parte.