C a p í t u l o_2

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; ; W o n d e r l a n d


 En ese túnel se podían ver miles de mundos, de cualquier forma, color o naturaleza que te puedas imaginar, todos y cada uno de ellos separado de aquellas plataformas por muros compuestos por lo que parecía ser un líquido flotante qué, pese a su notoria densidad se podía atravesar fácilmente. La pequeña se mantuvo de pie en una de esas plataformas completamente insatisfecha por aquella experiencia, no sabía qué hacer en esos momentos, quizás volver para ayudar a esa mujer o simplemente pasar de ello.

----- ¿Qué quiso decir?

Se preguntó ella en voz alta.

----- No lo sé

Respondió el más bajo con simpleza

---- Los adultos no nos entienden.

Como si no hubiera pasado nada la convenció de seguir con aquella aventura pasando por mundos diferentes hasta que al fin escogieron uno. El diseño de éste era bastante colorido llamando a gritos la atención de la pequeña quien tomó impulso y saltó hacia uno de los muros para aterrizar como hizo antes, cayendo sobre el mismo 'colchón'.

----- ¡Woah!

Exclamó maravillada.

----- ¡Es increíble!

Extendió ambos brazos manteniendo esa expresión de felicidad y asombro en su rostro.

Era un mundo lleno de colores, las nubes de diferentes formas teñidas de rosado, violeta o azul pálido pastel, el suelo de color oscuro contrastando con todo el ambiente. Los animales parecían sacados de un cuento de hadas infantil: desde leones que como cabeza tenían un girasol hasta aves que parecían figuras de origami.

----- ¡Vamos!

Exclamó él animado señalando uno de los lugares.

Así se animaron a correr por ahí, jugar con cualquiera de los animales u otras criaturas, conversar con ellos, bailar con los árboles, patinar en una de las lagunas en donde convivían animales inmensos, hacer coronillas de flores para todos y como tal, pasar un muy buen rato con lo que parecían ser sus amigos.

El pasar del tiempo fue increíblemente rápido, de no haber sido por el cielo teñido de un hermoso rosado coral con un sinfín de estrellas que parecían la mismísima galaxia seguirían ahí. Ella se quejó, debía volver por si ocurría algo en su planeta ya que en su cabeza, el rumor de que unos piratas invadían los planetas para hacer de las suyas en cualquier terreno la había preocupado.

---- Hay que volver, Briggitte

Le recordó con un tono de voz seguro, en su cabeza tenía pequeñitos pétalos que conformaban una coronilla de flores.

---- ¿Qué? ¿En serio?

Se quejó ella quien le hacía una trenza a otra niñita de ahí quien estaba más que maravillada por su compañía.

Al final, luego de una cariñosa despedida regresó con el cabeza de hongo atravesando nuevamente el muro. A paso tranquilo hallaron una plataforma lo suficientemente grande como para crear el portal de regreso, portal el cual salió nuevamente de aquel sombrero parlante amargado por haber sido despertado de su siesta, éste abrió la boca despidiendo una masa que se solidificó formando un portal que los condujo a su planeta.

La chica caminó por el sitio, efectivamente, ya estaba anocheciendo, alzó la vista al cielo para comprobarlo: un hermoso juego de colores entre el azul marino, rosado coral y ligeros toques de violeta se formaron. Ella suspiró en una sonrisita, caminó hasta la casita del pequeño, el cual saludó a sus familiares, sonriente fundiéndose en un abrazo con más de uno.

Viaje de memorias.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora