--¿Viste eso? Dime que lo viste. Ese italiano no sabe nada de respeto-- se quejaba Peter a Jonathan.
-- Fue muy extraño --
-- Lo fue --
Sandy subió al escenario y respiró. En esos momentos respirar era lo mejor que podía hacer. Con su mirada recorrió el lugar, vió a los jueces que la miraban expectantes, el público que no esperaba ser sorprendido y Kathleen que estaba a punto de llorar de la emoción.
Inhaló y alzó su arco lentamente, lo puso en la posición correcta y exhaló. Las primeras notas empezaban a sonar; primero suave, con precaución, y a medida que iba agarrando mayor seguridad, más fluida le salía la tonada. En algún punto, cerró los ojos y se dejó llevar por cada nota que ella producía con su violín.
"La Bella y la Bestia" era una hermosa canción y la muchacha la dominaba, tanto teórica como sentimentalmente.
--¡No me lo puedo creer! ¡Esta tocando tu canción John! ¡¿Que haremos ahora?!-- exclamó el hijo de los Lane, enojado y ofendido al mismo tiempo por razones que Jhonatan no entendía del todo
-- Tu eres el agente -- bromeó
-- No te hagas el listillo muchacho -- dijo imitando la voz de voz de una anciano. Ambos rieron.
-- Ya hablando en serio, tocarás la misma canción, elevará la competitividad y el interés. Además de claro, atraerás la atención del público y los jueces...--
Jhonatan había dejado de escuchar, la música le atraía demasiado y la manera en que Sandy la tocaba lo tenía absorto. El sentimiento era profundo, y más aún en una canción que él conocía a la perfección. Sin duda, la chica era talentosa y era especial.
-- Ese es el plan -- dijo Peter
-- ¿Eh? Ah, si si, seguro --
Cuando Sandy terminó, todo se quedó en silencio por pocos instantes, luego las personas empezaron a aplaudir eufóricamente y mientras tanto los jueces asentían con aprobación. Kathleen retenía algunas lágrimas en sus ojos, parecía feliz por su amiga (y mucho más orgullosa de lo que sus padres jamás estarían).
Sandy se apresuró a desaparecer del escenario, como un asustado ratón bajó rápidamente las gradas, temiendo que en cualquier momento se pudiera arruinar su impecable presentación.
<<¿Qué pasará ahora?¿Que se supone que tengo que hacer?¿Debería ir ya a casa?>> pensaba la adolescente.
-- Jhonatan Perhaps -- llamaron los jueces, y con torpeza un tembloroso adolescente se dirigió al escenario.
El muchacho se sorprendió al escuchar su nombre, el tiempo había pasado demasiado rápido y no se sentía lo suficientemente seguro aún. Pero su única opción era avanzar.
Sus manos se frotaban frenéticamente en su pantalón,era un método común para esfumar cualquier rastro de sudor. Sus mejillas estaban teñidas por la vergüenza y cada paso que daba denotaba su pánico.Sandy lo vió y sintió empatía, para ella Jhonatan parecía el héroe de una encantadora historia fantástica, que atraviesa el campo de batalla dispuesto a enfrentar sus miedos y a sus más temibles enemigos, detrás de él los horrorosos monstruos hormonales de la secundaria lanzaban murmullos como silenciosas dagas, dispuestos a herirlo; pero el héroe (aunque con la cabeza gacha) caminaba hacia el inicio de su aventura.
-- ¡Hey Sandy! , ¡Cariño!, lo hiciste genial -- dijo Kathleen con una voz maternal y cariñosa, así abrazó a Sandy con afecto.
-- ¿Te importaría si vemos esta presentación más?-- preguntó con timidez.
-- Es la última de todos modos... Espera ¿Quieres ver a Perhaps?-- preguntó con sorpresa y entre risas comentó:-- Eres consciente de que es el mejor amigo de Peter ¿verdad?--
Un estruendo las interrumpió, voltearon para darse cuenta que el chico de pelo oscuro había tropezado y caído en el centro del escenario,hubo un mínimo instante de silencio antes que el auditorio entero estallara en carcajadas. El chico quedó inmóvil, parecía que un ataque de pánico iba a terminar con los acelerados latidos de su corazón en cualquier instante.
--No negaré que es adorable -- dijo Kathleen, conteniendo su risa antes el incedente.
Sandy se sentía incómoda, era un momento importante y tenías a todos burlándose de ti antes de poder demostrar tu capacidad (aunque ella no conocía a Jonathan). De hecho, si había sido muy gracioso, pero la adolescente no sabía cómo reaccionar, al final solo soltó carcajadas nerviosas y divertidas.
Peter supo que debía ayudar, así que corrió hacia su amigo, pero los jueces le impidieron subir al escenario y desde abajo murmuraba:
-- Tranquilo, respira... Muy bien, ahora levántate, excelente...ahora haz lo tuyo-- ordenó sonriendo.
Jhonatan se sentó enfrente del piano con tranquilidad, respiró profundamente, dejando que el aire en sus pulmones le permitiera relajar sus músculos. Extendió sus manos y cerró ojos.
-- Siente, siente la música fluyendo a través de tus dedos,de tus manos. La música conecta el mundo y ahora tú eres el mundo -- recordaba a su madre con nostalgia.
Primera nota, larga, dudosa. Tomo aire de nuevo y empieza.
Sus ágiles dedos se mueven rápidamente por el piano, nota tras nota, tecla tras tecla, la melodía resuena por todo el escenario, los sentimientos son palpables y el ambiente es avivado con una incesante sorpresa para todos los asistentes.
Sandy se queda sin aire, Jonathan la sorprende, la absorbe y la transporta al mundo mágico de la música. Sus sentimientos chocan entre sí, era su canción, pero él la interpretaba como si fuera parte del cuento.
La canción termina, dejando un vacío en el aire, un vacío en el alma. El auditorio guarda silencio, nadie aplaude, excepto por Peter (Sandy se contiene, pese a que quería hacerlo).
Las palabras no eran necesarias, los jueces sonríen y anotan.
∆∆∆
-- ¡Aún no puedo creer que haya usado la misma canción que tu! ¿Que clase de cretino hace eso? Es una abominación, un desastre...--
Sandy está absorta en sus pensamientos, sin escuchar. Observaba al otro lado del auditorio, donde Jonathan hablaba con Peter.
--¡Lo hiciste genial John! Dejaste embobado al auditorio entero,eres un profesional, un maestro...--
Jonathan tampoco escuchaba, sentía una mirada sobre él, volteó con calma y la vió. Los vidrios de sus lentes le permitían ver con claridad el dorado de sus ojos y el fuego en ellos. Sandy no apartó la mirada, la mantuvo en esos atrayentes ojos azules, calmos como el mar.
Ambos suspiraron
-- Fue perfecto-- murmuraron.
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Solo por esta cancion
RomantizmPrometimos que nos quedaríamos, y lo lograríamos juntos. No tomaste en cuenta las advertencias. ¿Porque no me lo dijiste? Ahora inevitablemente nos alejamos y estamos corriendo en direcciones distintas, ya no tenemos la misma sintonía. ¿A donde irem...