PARTE UNICA

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Hace algunos años nació un pequeño niño, de tez blanca como la nieve, ojos tan rojos como llamas en el infierno, pelo negro como el cielo cuando está de luto y un rostro tan Angelical e inocente el cual hacía que todos lo adorarán como si fuera su dios.

Lo que nadie sabía era que ese pequeño tenía un don especial el cuál fue obsequio de la diosa Luna.

Desde pequeño se caracterizó por ser diferente a los demás cachorros, mientras ellos sólo jugaban, dormían y comían el pasaba su tiempo leyendo, entrenando y tratando de ser mejor cada día.

Era serio y reservado, no le gustaba estar rodeado de personas, ni siquiera con su familia, pero eso cambió cuándo tenía tan solo 16 años, dentro de la manada nació un pequeño niño el cual era conocido por el nombre de Park Jimin.

Un bebé cachetón, con labios gruesos, manitas pequeñas y gorditas, pestañas largas y gruesas, ojos grises como la Luna cuando se refleja en los lagos cristalinos, simplemente un ser hermoso y tierno, el cual desde el primer instante se robo el corazón de aquel alfa frío y reservado que llevaba el nombre de Min Yoongi.

Al pasar de los años Yoongi se convertía en un alfa más fuerte, inteligente y maduro, mientras que Jimin seguía siendo delicado y tierno pero ahora tenía un cuerpo esbelto y lindo, haciendo que algunos alfas estuvieran tratando de cortejarlo, pero obviamente Jimin solo tenía ojos para Yoongi y viceversa.

En el tiempo transcurrido Yoongi se había vuelto el alfa de la manada, esto paso gracias al regalo de la diosa Luna, el cual solo el poseía y era liderazgo, fuerza y protección, antes de convertirse en el líder de la manada estuvo cortejando a Jimin, el cual ahora tenía 16 años, era el Omega más lindo de todos, aunque ahora solo era suyo y estaba más que orgulloso de eso.

Pov Yoongi

Estaba dormido, realmente estaba cansado, ser el alfa de una manda no es nada fácil, aunque amo cada vez que llegó del trabajo ya que mi niño me recibe con un beso y con alguna comida deliciosa, en serio lo amo, no se que haría sin mi bebé.

Aún estando dormido sonreí, ya que estaba recordando los momentos con mi pequeño, pero unos sollozos delicados y agudos se hicieron presentes haciendo que me despertara de golpe.

Lo que vi fue algo que me partió el corazón, mi niño estaba a lado mío llorando mientras abrazaba su peluche de pollito con sus lindas manitas, sus mejillas estaban mojadas por el llanto al igual que sus largas pestañas.

El aún estaba dormido, seguro estaba teniendo alguna pesadilla, acerque con cuidado a Jimin para poder envolverlo entre mis brazos, ya una vez que tenía abrazado a mi bebé empecé a soltar un poco de mi aroma para poder calmarlo, lo cual funciono a la perfección.

Pov Jimin

Cuándo desperté estaba tan calientito, no me quería parar aparte tenía la escencia de mi Hyung en todo mi cuerpo, eso me hacía sentir protegido y cómodo, al abrir mis ojos me encontré con el rostro de mi Hyung, tan guapo y varonil como siempre, empecé a dar pequeños piquetes con mis deditos en su mejilla provocando que hiciera algunos gestos, se veía tan lindo enojado.

Jiminnie mi amor déjame dormir -dijo un somnoliento Yoongi aún con los ojos cerrados-

Hyung ya despierta -hace un puchero- necesito mimos -se pega mas al cuerpo de Yoongi-

Minnie, ¿seguro que quieres mimos?-pregunto con una sonrisa ladina-

-Jimin asiente varias veces con su cabezita-

Bueno bebé tú lo pediste~.

Yoongi se puso encima de Jimin, comenzando a besarlo frenéticamente, mientras que con sus manos acariciaba sus muslos.

Alfa •Yoonmin•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora