Perfecta
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Nie HuaiSang se recostó en el espaldar de la silla giratoria, faltaban menos de diez minutos para terminar su horario en oficina y sus apresurados compañeros hacían todo lo posible para terminar sus deberes del día y no tener que hacer horas extras que nunca serian pagadas. Él ha terminado con todo, se levantó de su cómodo asiento, tomando sus pertenencias y los expedientes que se le encargaron, miró por última vez el lugar que fue como un segundo hogar en los últimos años y aunque se despide de sus compañeros, estos se hallaban muy inmersos en las pantallas de sus computadoras como para prestarle atención, estaban sobre la hora.
Ingresó a la oficina de la gerencia general en la empresa en donde hasta ese día laboraría, hace un mes presentó su carta de renuncia al departamento de Recursos Humanos y pese a que su hermano no estaba de acuerdo con su repentina decisión, lo dejó hacer lo que creía más conveniente para su comodidad. Habló por última vez con quien había sido su jefe y tras unas cuantas palabras más, agradeció que se le brindara la oportunidad de poder trabajar ahí aun desde que fue sólo un egresado de la universidad.
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Debido a que el trabajo de Nie MingJue demandaba que estuviera viajando constantemente para cerrar los tratados de los nuevos convenios para su empresa, provocaba que el hecho que ambos hermanos Nie estuvieran bajo el mismo techo al mismo tiempo fuera realmente escaso, por no decir, inexistente, pero gracias a la tecnología podían comunicarse cuando quisieran, o cada vez que la apretada agenda del hijo mayor de la familia Nie se lo permitiera. Nie HuaiSang no podía quejarse, su hermano es un hombre emprendedor que va en medio de una carrera de éxito al ascenso, lo menos que podía hacer era distraerlo. Desde que su padre falleció, solo fueron los dos y la ausente madre de él, el segundo compromiso del padre de ambos hombres jóvenes, una mujer que pasó desapercibida en su vida, hasta cierto día.Nie HuaiSang estaba en una edad crucial, donde la mayoría de personas de su entorno ya se encontraban comprometidas y con familia, además, de un buen trabajo. Su hermano mayor nunca le dijo nada sobre este aspecto, él tampoco estaba en una relación, ni parecía tener planes a futuro para algo similar, su trabajo exigía su atención a tiempo completo, la única persona con la que compartía el mismo estilo de vida era su amigo de siempre, Jin GuangYao; y sin embargo, este también estaba en la misma situación.
Decidió tomarse unos días libres mientras meditaba sobre lo que estaba pasando en su vida. Durante su tiempo como trabajador, había ahorrado una buena cantidad de dinero pese a su enorme gusto por coleccionar chucherías y podía planear volver a estudiar, pero por casualidades de la vida, un día se encontró con Wei WuXIan, su antiguo compañero de clases en secundaria y parte de la universidad, a quien recordó también como el chico que tenía una relación amorosa con otro muchacho de su mismo grado, Lan WangJi.
Un brillante anillo puesto en el dedo anular de quien fue su compañero de bromas en su tiempo de colegio lo sorprendió, tenía entendido que el país donde Vivian prohibía el matrimonio entre personas del mismo sexo y aun hasta el día de hoy ese hecho era visto con malos ojos, ¿cómo fue posible?
O tal vez, en realidad, la persona con la que Wei WuXian iba a contraer nupcias no era Lan WangJi, ni un hombre. Pero, ¿cómo? Él fue un espectador en primera fila al ver la hermosa relación que ambos chicos tuvieron, algo debió pasar durante el tiempo que sus caminos se separaron y su teléfono se malogró, perdiendo todos los contactos que tenía. No tuvo tiempo de aclarar su duda, el entusiasmado joven le hizo una propuesta interesante luego de conversar un poco de sus situaciones laborales actuales.
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Perfecta [Mo Dao Zu Shi / GrandMaster of Demonic Cultivation]
FanfictionNie HuaiSang se encuentra en esa etapa difícil de su vida, no tiene trabajo y tampoco una novia. Wei WuXian aparece en su vida como una rayo de luz y todo comienza a ir bien en mucho tiempo. Sin embargo, nadie le dijo que su amigo estaba comprometi...