parte unica

15.9K 1.6K 586
                                    

Era entonces durante  la gran dinastía de Jeoson cuando el rey Sejong el grande reinaba y el imperio Coreano era fuerte.

Las fortalezas imponentes, los soldados dispuestos a todo por su rey y pueblo, grandes magos y la promesa de un largo reinado.

El rey y su esposa tenían tres hijos, Jeongjo, el mayor, Nam Joon, el mediano, y JiMin. Este último siendo el más pequeño pareciendo ser poco importante para todos pero el mundo entero para alguien más.

Golpes en la puerta se escucharon, tan fuertes que lo hicieron despertar asustado.

—Mi señor, los sabios vendrán pronto. Su padre quiere que esté listo antes, Señor JiMin. —dijo el criado del otro lado de la puerta.

¡Oh no!

—Gracias. —dijo antes de levantarse y correr para ponerse las vestiduras.

—¿Gusta que le ayude, mi señor? —preguntó el criado todavía detrás de la puerta.

—¡No. puedo solo!

Corrió por la gran habitación hasta el cuarto de baño, sabía que su criado ya había preparado el agua caliente desde antes de despertarlo.

—¡Es tan tarde, no voy a estar listo para él! —se dijo de nuevo mientras tomaba su baño matutino.

Más rápido de lo que un caballo podía dar dos vueltas en el patio principal  el estaba de vuelta y se colocaba con espero su Hanbok lo más rápido que sus nerviosas manos le permitían.

Haciendo su ritual mañanero corrió por todo el pasillo de las habitaciones bajando por las escaleras y llegando hasta la sala principal.

Cuando llegó su padre  lo miró con desaprobación.

—Lo siento, se me hizo tarde. —dijo apenado.

—Te dije que te quería aquí antes de que el sol saliera. Un príncipe jamás debe llegar tarde agradece que los sabios no han llegado aún. —ese era su padre.

Jimin agradecía que no estuviera nadie ahí más que sus padres y hermanos o de verdad sería demasiado vergonzoso.

—Te dije que  ocultaras bien tu cabello. —le susurró su madre cuando se sentó a su lado.

Cierto, el cabello rubio, lo había olvidado. Miró a su padre y a sus hermanos y a ninguno pareció importarle, así que decidió tampoco darle importancia.

Esperaron un poco más y los criados informaron sobre la llegada de los sabios.

JiMin se movió incómodo y nervioso de su lugar y su madre lo miró de reojo. él se sonrojó y bajó la mirada.

Cuando los hombres entraron JiMin sintió cómo todo su cuerpo se estremecía. Ahí estaba,  el hombre con el que quería hacer todo. El descendiente del gran mago y sabio Jeon Yi Son.

Jeon Jung kook era perfecto y muy inalcanzable.

La homosexualidad no era mal vista, algunos de sus antepasados habían tenido matrimonios con personas de su mismo sexo pero Jimin casi estaba seguro  que Jeon no era de ese modo.

Los hombres se inclinaron ante ellos y su padre les pidió sentarse. Jeon se sentó justo enfrente de Jimin quien sintió cómo su respiración se aceleraba.

Su padre habló con los sabios de un tema y otro a los que JiMin no puso interés. Él sabía que jamás sería rey.

—Entonces, Jung Kook-ah ¿tomaras el puesto de tu abuelo? —preguntó el rey.

T͎h͎e͎ W͎i͎z͎a͎r͎d͎ A͎n͎d͎ T͎h͎e͎ P͎r͎i͎n͎c͎e͎ •°KookMin O.S°•Donde viven las historias. Descúbrelo ahora