K I S S T E A C H E R

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No esperabas que las cosas acabarán así, es decir, ¿en qué momento llegamos a esto?. Increíble que todo haya iniciado solo porque tu primer beso no fue el mejor... Es que a quien se lo cuentes no te creerá, por Dios.

Ahra era esa típica chica divertida, amigable, tierna e inteligente de la que se habla en las etiquetas sociales. Sin embargo, según ella, tenía un defecto; nunca había tenido novio, ni mucho menos ha dado su primer beso.

Para Ahra, claro que esto era un detenimiento, pues ¿qué es lo que esperas de alguien que ha estado más solo y abandonado que la biblioteca escolar?; exacto, no esperaban mucho. Ahra sabía que aquello era una desventaja, ya que no tenía idea de tan siquiera como mostrarse interesada en alguien; además que sus amigas siempre le pedían consejos amoroso, con los cuales no contaba.

Ahra se sentía desgraciada en el amor, ya que desde el inicio de clases, llevá un tanto "hipnotizada" por un chico en específico, ¿quién era?, nada más y nada menos que Jeon Jungkook.

Jeon Jungkook ingreso a el instituto a inició de ciclo, y con tan solo un día de estancia, ya varias de sus compañeras se esmeraban en mostrarle cuan potente era su presencia. Por su parte, Ahra se presentó a él como una amiga, y bueno, aún lo seguía siendo; no eran tan íntimos amigos, sin embargo si llegaban a charlar por varios minutos sobre diferentes motivos, creando un pequeño lazo de confianza en ambos.

Y eso parecía no cambiar, hasta aquella noche, en la cual se encontraban en una fiesta organizada por uno de sus compañeros; pues finalmente Jungkook se le declaró a Ahra.

¿Jungkook a Ahra?, ¿qué no era al revés?; ahí fue cuando Ahra cayó en cuenta de lo que realmente pasaba. Ella le gustaba a Jungkook, Jungkook correspondía sus sentimientos y nada podía ser mejor; ambos se sentían tan aliviados al saber que el sentimiento era mutuo.

Finalmente, se acercó el dichoso momento de la muestra de afecto; el beso. Ahí fue cuando Ahra comenzó a ponerse cada vez más nerviosa; era su primer beso, ¿qué se supone que debía hacer?, ni siquiera sabía si tenía que mover siquiera los labios. Jungkook fue acercándose lentamente hacia ella, rostro a rostro, aliento con aliento, mirada con mirada; Dios, Ahra casi se desmayaba.

Jungkook tomó a Ahra de la mejilla, atrayéndola y finalmente haciendo que los labios de ambos se juntaran en un pacífico y lento beso.

Ahra se sentía... Rara. Jungkook era el único que aportaba algo al beso; movía sus labios e incluso llegó a introducir su lengua en la cavidad bucal de Ahra, lo cual la hizo sorprenderse un poco. Ambos se separaron y Ahra no se sentía mejor que antes, se sentía tan estúpida e inconforme; literal y textualmente no había hecho nada durante aquel beso.

Al siguiente día, el objetivo de Ahra era encontrar a su mejor amigo, Park Jimin, para comentarle sobre su experiencia de la noche anterior.

Park Jimin era conocido por ser todo un Casanova; chico o chica que se cruzará con su mirada, caía en un hechizo del cual nunca podrían deshacerse, haciéndolos caer rendidos a sus pies.

Para Ahra, Jimin era algo así como su mentor de vida; Jimin se encargaba de enseñarle a Ahra diferentes aspectos de la misma, entre otras cosas, así que creía conveniente el contarle su penosa experiencia.

Pero para mala suerte de Ahra, Jimin y ella no compartían clases; ya que Jimin es dos años mayor que ella, lo cual lo hacía pertenecer al grupo de último año. La única clase que compartían era la de música, así fue como se conocieron; sin embargo, era lunes, y los lunes no tocaba aquella clase.

"Tengo que contarte algo importante". Ahra envío el mensaje, esperando que su receptor contestara rápido.

"¿Sobre qué?". Recibió Ahra después de dos minutos.

KISS TEACHER ── park jiminDonde viven las historias. Descúbrelo ahora