Segunda parte de " NECESITAS MODALES"
Park Jimin obtiene por fin el puesto que merece en la cima pero las piezas que pierde en el trascurso del juego le dejan con una sola jugada y el desenlace es predecible.
cuánto podrá mantener la frente en alt...
Su extensión completa se perdía dentro de ese trasero redondo y suave, cada embestida era satisfactoria y Park no dejaba de moverse sobre su pelvis, su respiración se escapaba caliente al igual que sus jadeos, su cuerpo ya estaba empapado en sudor y las múltiples marcas de besos en sus pectorales se volvían cada vez más visibles. Jeon tocaba esas piernas perdido en éxtasis ante el movimiento de esa pelvis, se sentía abrumado con cada sensación y el aroma que desprendían sus cuerpos le mantenía en celo, su pene estaba tan duro y con cada eyaculación perdía parte de su cordura, mantenía los ojos cerrados disfrutando, entonces los abrió y dirigió la vista arriba para contemplar la belleza de ese Omega de cabellos dorados, su pupilas centellaron fascinados, reflejando en sus iris el cielo estrellado pero Jimin se robaba la atención incluso del firmamento, Jeon reconoció que ni las luces del cielo podían superar su adoración por ese Omega ya que su belleza era inigualable. Su aliento se escapó en un jadeo profundo al contemplar como esos ojos oscuros ahora poseían un brillo especial, un encantador color celeste tenue.
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Las lágrimas brotaron de sus ojos cuando sintió su pecho lleno de calidez y una sensación de júbilo, como si hubiera encontrado lo que buscaba después de muchas vidas pasadas, como si el destino por fin le sonriera y le entregará a su destinado. Su alegría duro poco cuando los pensamientos pesimistas aparecieron en su cabeza, no quería creer que ese sentimiento solo fuera propio quería que Park le reconociera como su Alfa pero su orgullo era demasiado, era consciente de que luego de ese periodo de celo Jimin le trataría con la misma indiferencia de siempre más ahora que este tenía un motivo para odiarle, se había condenado a sí mismo y su felicidad al hacer esa marca.
La actitud casi amorosa de Park hacía él le provocaba más dolor del esperado, esos labios cálidos al besarle de dejaban un sabor amargo en la boca y es que no quería que eso terminará, no era simple instituto y definitivamente no era solo sexo. Con sus brazos abrazo ese cuerpo ligeramente más delgado que el propio, sus dedos se aferraron a esa piel cálida mientras lloraba sobre ese pecho con disimulo, anhelaba su corazón con desesperación y deseaba escuchar las palabras salir de esos labios gruesos.
"Te amo"
×××
Su mirada estaba en las sábanas con la cabeza colgando de sus hombros en aquella posición derrotada, las lágrimas caían producto de aquel remolino de emociones, la marca en su cuello ardía y entonces supo que el lazo estaba roto. Apretó con fuerza la tela y abrió la boca para gritar producto del dolor que como Omega le invadió, su instinto estaba tomando el control y cuando estaba por perder la cabeza escucho la puerta abrirse.
— Jin! — Aquella voz llamándole le salvo y reconoció aquel tono sintiendo alivio y unas incontenibles ganas de romper en llanto pero esta vez de felicidad.
— Taehyung... — Soltó con voz temblorosa, si no fuera por su pierna y el suero habría saltado de la cama para abrazar a Tae.
Taehyung se aproximó abrazándole con fuerza, reconoció su aroma y acaricio esos cabellos negros entre sus dedos oyendo con atención el llanto del hermoso Omega. Le extraño tanto y estaba tan asustado de no volverle a ver que no quería soltarlo.
— Te amo! Estaba tan asustado! — Pronunció el menor recordando cada día separado de su gran amor, Min Yoongi había sido un gran susto y agradecía que Park se hubiera encargado aún cuando le seguía guardando resentimientos por sus acciones pasadas.
La escena acaramelada del reencuentro era contemplada por Hoseok quien tenía que cuidar a Jin hasta ese momento porque su misión primaria sería iniciar con la masacre, mientras ese par de amantes vivían un momento cálido el debía volver a la realidad que incluía asesinar a cada Alfa involucrado en los intentos de homicidio hacia su mejor cliente.
×××
El amanecer inicio con los primeros rayos de sol, que entraban por la puerta corrediza abierta al tope, quizá había dormido un par de horas pero poco le importaba cuando sentía su cuerpo deseoso e insaciable, besaba con hambre los pequeños labios del Alfa quien agarraba una de sus manos con firmeza como si no quisiera perder el contacto en ningún momento, Jimin tomo su lugar sobre ese chico sometiéndolo como le gustaba, le estaba recibiendo entre sus entrañas pero era obvio que Park llevaba las riendas y eso le excitaba, amaba someter a un Alfa tan fuerte como lo era el JK de ahora, su cuerpo trabajado era encantador y su rostro ligeramente delicado terminaba de cautivar su frío corazón.
Pensar que estaba haciendo el amor con ese niño mientras Hoseok debía estar cortando cabezas por él le lleno de regocijo, se sentía en la cima de la cadena alimentaria como un gran depredador quien hacía lo que se le antojaba sin importarle las vidas arrebatadas, era quizá efecto de la marca en su cuello que sentía un extraño sentimiento, lo odio en un principio pero debía admitir que se sentía bien y aún si ahora pertenecía a Jungkook las cosas no iban a cambiar porque era él quien mandaba.
— Te quiero... — Soltó jadeante Jeon completamente perdido en el placer con los ojos llorosos y las mejillas sonrojadas, Park jadeo sintiendo su ego crecer al ver como ese hombre tan atractivo le pertenecía por completo.
— Quiero verte llorar incluso más. — Soltó en un susurro caliente para llegar al orgasmo al mismo tiempo que el menor, una sonrisa de satisfacción de apoderó de sus labios mientras temblaba sintiendo el esperma derramándose en sus entrañas.
El tiempo paso de forma imperceptible para los dos, sus sentidos estaban borrachos de tanto placer y sus cuerpos agotados por fin descansaban sobre esa superficie blanda y cómoda, Park despertó primero notando como ese brazo le cogía de la cintura, contempló el rostro del menor por un momento, en verdad tenía cara de niño, esos labios eran pequeños y esa nariz un tanto grande pero se veía bien en él, sin notarlo acaricio esos cabellos y fue cuando se separó con cuidado para levantarse del suelo y caminar para salir de la habitación, su mirada se dirigió a un costado encontrando a Hobi de brazos cruzados apoyado en la pared.
— Pasaste un buen fin de semana? — Preguntó el pelirrojo mientras buscaba en su bolsillo y le entregaba un estuche metalizado.
— Supongo, qué hay de ti? — Dijo abriendo aquello encontrándose con aquella jeringa con cinco agujas, el líquido en el interior era de un color amarillo y no dudo en inyectar aquello en su pierna, Hoseok le entrego su abrigo y se acercó a su cuello casi rozando sus labios sobre esa marca en el cuello del rubio.
— No estuvo mal pero estoy algo celoso justo ahora... — Comentó al olfatear esa piel y alejándose sin mucho más. — No esperaba que algo como esto sucediera! —.
— No se pudo evitar. — Contesto con desinterés el Omega para pasar del pelirrojo emprendiendo el camino al baño sin antes hacer una última pregunta.
— Terminaste el trabajo sin inconvenientes? —.
— Casi... — Soltó el Alfa ganándose la mirada del rubio quien lucía serio. — Te deje la mejor parte. — Dijo por último con una sonrisa para caminar el trecho que les separaba y al volver a entrar a una mínima distancia le entrego un arma a Park.
— Solo harás que mi ego crezca... — Comentó Jimin sonriendo con regocijo.
