El atardecer había dado paso al azul oscuro de la noche y Sowon que aún se encontraba apoyada en el árbol frente al lago, decidió que era momento de ir en busca de la pelinegra y disculparse por su actitud.
Lo admitía, el descontrol emocional que la había poseído en ese momento, la llevó a decir palabras que, si bien no eran del todo mentira, no tenían que haber sido dichas de esa forma y menos cuando Eunha se había acercado a ella para saber cómo se encontraba. Lo aceptaba, había sido una imbécil y ahora que se encontraba calmada iría y trataría de arreglar las cosas.
Emprendió su camino de regreso hacia la carpa donde se efectuaba la celebración. Al encontrarse cerca, pudo notar como el sonido de la música folclórica se hacía presente y la mayor parte de los invitados se encontraban en la pista bailando entre pasos alegres y algunos con cerveza en mano mientras entre risas bailaban con sus parejas. Irlanda después de todo.
Al entrar se sacó su abrigo y se lo entrego al encargado de guardarlos con seguridad, miro hacia arriba y notó que la carpa se encontraba adornada con luces de navidad color turquesa y amarillo suave. Se veía realmente lindo. Se abrió paso entre las personas, buscando con su vista a Eunha. La encontró sentada de espaldas a ella, a un lado de la barra de bebidas improvisada con una copa de vino entre sus manos. Cerró los ojos un momento y dio una respiración profunda, los abrió nuevamente y camino con paso seguro hacia la pelinegra tropezándose con algunas parejas en la pista de baile.
Por su parte, Eunha se tomó de un solo trago su bebida y solicitó al bartender que le colocara uno nuevo. La molestia por lo sucedido con la castaña había disminuido un poco. Debía entender que quizá era un tema delicado del pasado de Sowon y preguntarle sobre ello no fue la mejor decisión, pero de igual forma se sentía herida por la forma en que la trató.
Giró su cuerpo un poco para observar la pista de baile, mientras esperaba a que le sirvieran una nueva copa de vino. No tenía idea de cuantas llevaba hasta el momento, pero sinceramente tampoco le preocupaba. Ya sentía como su espíritu fiestero renacía dentro de ella y empezaba a darle igual lo que la prepotente irlandesa tenía para decir sobre sus decisiones. Justo fue en ese hilo de pensamientos cuando notó como la alta y delgada mujer trataba de hacerse paso entre las eufóricas personas que bailaban en la pista. No pudo evitar sonreír cuando un chico sin querer, pisó su pie y la castaña lo miró tan fríamente que el joven se apartó rápidamente.
La observó un poco más y notó que se dirigía hasta ella, ¿Para qué la buscaba? ¿No había sido suficiente con humillarla antes? El chico de la barra llamó su atención para entregarle su bebida y a los segundos sintió como le tocaban suavemente el hombro.
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Leap Year in Dublín (Wonha Adaptación)
FanfictionUna joven enamorada (Jung Eunha) va a Dublín para pedirle a su novio que se case con ella. Lo hará siguiendo una tradición irlandesa, según la cual solo un día cada cuatro años -El 29 de febrero- una mujer puede proponer matrimonio a su novio con la...