La señorita única

Un buen comienzo

Estaba sentada jugando Damas

— Tramposa— dijo Sicilia —

— Nunca — Terminé la partida —
Siempre soy Honesta —

Salí corriendo con un Sicilia enojada atrás.

— Basta niñas — gritó mi irritante tía—

— Ya ya — rodé los ojos —

— ¿Acababas de rodarme los ojos?! — negué—

— Déjala tía— se interpuso Sicilia protegiéndome —

— Te voy a castigar señorita— me jaló del oído y corrí como un caballo a la terraza —

— ¡Ahg niña insolente!— gritó, Sicilia se echó a reír y ella también corrió de ella —

Nosotras dos teníamos la costumbre de correr de ella.

— La suerte que tenemos hermana , nuestra tía nunca nos encontrará—

— ¿Pero qué hacen aquí?— preguntó Sofía vestida elegantemente—

— Shhh— entendió a qué nos referimos—

— Sigan — susurró— Que la suerte las acompañe — río

— Mañana tenemos que separarnos para casarnos —

— Nooo te extrañaré y no digas esas cosas — la abracé—

— Yo igual pequeña atleta —

— Niñas!!— oh no —

— Run!!— gritó Sofía a lo lejos —

— Asentí—

— Vamos al jardín prohibido— negué—

— Vamos al laberinto pequeño —
Asintió—

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Es un capítulo un poco corto pero es sólo un adelanto de lo que está por empezar..

~M