OS/ Una vida sin ti

Mi vida sin ti

Eran exactamente las tres de la mañana cuando escuché ese sonido raro proveniente de mi ventana, con pereza y tallando uno de mis ojos me asomé para ver de qué se trataba. No me sorprendió ver a Namjoon, mi mejor amigo en el primer piso lanzando piedritas, ya era muy típico de él cuando sus padres lo regañan, siempre venía por eso.

Pero algo en sus ojos me decían que era algo diferente, que no sólo eran sus padres la causa de su tristeza, era otra cosa. Mire por mi puerta y mis padres no se daban cuanta de nada, sonreí por aquello. Le hice señas a mi amigo para que entrara, y así lo hizo.

Le sonreí, pero él sólo me dejó ver una mueca en sus labios, miro al suelo y en este mismo se sentó exhausto. Su olor llegó a mis fosas nasales, es increíble como me hace sentir, es algo que no puedo explicar a nadie, aunque muchos dicen que Namjoon a su edad no puede tener el olor tan fuerte, más sin embargo lo es. Nadie se explica cómo un niño de doce años huele de esa manera tan fuerte y agresiva. Era una enigma para todos en la aldea. Que, por si no lo dije, es la aldea más grande de las cinco que habitan, gobernada por el alfa Jeon Jeunsook y su esposa la hermosa Omega Kim Jihyu y claro los hijos de estos.

Las mejillas de Namjoon estaban rojas y no sabía la razón de ello, pero pensaba descubrirlo. — Dime qué ocurre — me puse a su lado.

Kim tomo su cabello y se acurrucó a mi lado, toque levemente su frente y esta ardía de una manera inquietante. El olor de Namjoon lleno mi habitación por completo, sabía que se trataba de un alfa, Kim Namjoon nació para serlo. ¿Yo seré también... Un alfa?

Aún no lo sabía, pero quedaba mucho tiempo para descubrir.

— No tengo nada — Kim quito mi mano, yo solo le sonreí comprensivo, porque ambos sabemos que no es asi, se que él es diferente al resto de nosotros, al resto de los alfas. Y él sabe eso, sólo que piensa que nadie se da cuenta, aún cuando mi papá me ha dicho que hablan sobre la transformación del hijo del señor que vende pan en la junta directiva de alfas, es un tema delicado que el mismo Alfa Jeon esta llevando acabo. Nadie lo sabe, pero podría ser peligroso que Kim este aquí.

Mis padres no saben que Namjoon es mi amigo y no deben saberlo.

E escuchado hablar a mi papá con sus amigos, ellos quieren desterrar al joven chico que se está convirtiendo rápidamente en un alfa, no es normal y eso lo sé, pero a mis once años de edad se que sólo lo hacen por temor a que un chico pueda ganarles en fuerza.

Si esto es difícil para mí, entonces no sé como se encuentre Namjoon.

— Tus padres...— negó antes de que terminara la oración. Mis ojos comenzaban a picar, e de suponer que por el sueño.

— Hoy no, mi papá pudo vender todo el pan esta vez y mi mamá terminó de pagar deudas pendientes... Ellos duermen ahora.

— de acuerdo, ¿entonces? — mi mirada la coloque en sus manos, estas se veían fuertes y llenas de venas. Mi estómago comenzó a doler. — Namjoon... ¿que haces?

Kim cerro los ojos y comenzó a oler mi cuello, me daba cosquillas de vez en cuando pero se sentía muy bien.

— hueles muy bien

— No se si te has dado cuenta, pero la habitación está llena solo con tu olor, además... Yo aún no tengo olor, o no uno estático — Kim sonrió y con apenas unos centímetros rozo con sus labios mi cuello, mi piel se puso de una manera rara, jamas había sentido algo así. — no has contestado mi pregunta

Y no lo hará si sigue de esa manera. El dejo de sonreír y lentamente se separó de mi.

Lo mire a los ojos, pero en ellos un brillo que nunca ví se instaló en él, no sabía exactamente como me sentía. Pero Namjoon volvió a sonreír y desde ahí todo se fue al carajo. Me acerqué más para poder besarlo, el gustoso me recibió, este es mi primer beso y se que el de él también, nuestros labios iban en sincronizar, de manera lenta y suave.