Claude Dumont es el nuevo joven amo y cabeza de familia de nada más ni menos que los Dumont, una familia de alta alcurnia la cual tenía influencias en la mafia y negocios no completamente honestos. A causa de la corta edad del nuevo joven amo, los q...
"Desde que tengo memoria, había siempre estado sirviendo en casas de personas adineradas, no importaba como fueran, no importaba como me tratarán, lo único en mi mente era la perfección y cometer los menores errores posibles que todo humano cometía." Así pensaba aquel mayordomo. No había lugar al cual no se pudiera adaptar en condiciones poco extremas humanamente hablando, ya que si atentaba contra su vida siempre encontraba la forma de huir de aquel lugar.
-Esta vez serás asignado a la casa de el hijo menor de un mafioso, aquel pequeño heredó absolutamente todo... Por ello queremos que te encargues de informarnos qué tan apto es para recibir la herencia a su nombre. ¿Quedó claro?.- pregunto un hombre mayor detrás de un escritor de madera fina negra, sentado cómodamente en una silla acolchada del mismo color.
Un mayordomo de mirada fría y serio permanecía erguido mientras oía atentamente lo que le decían, un hermoso hombre de cabello negro y ojos comúnmente marrones miraba directamente al señor mayor en la silla- No sé si sea buena idea, no quisiera que esto comprometiera mi cuello.-dice tranquilamente haciendo que el hombre mayor alzará una Ceja.
-Pero si está no sería tu primera vez en peligro. Eres el único que sobrevive a tales clientes... Por ello no puedo encomendar a nadie más a esto... ¿Si lo comprendes?.- le dice el señor poniendo los papeles del que sería su amo en el escritorio para así luego acercarce lo. El mayordomo solo pudo mirar a un lado suspirando, la verdad no tenía nada que perder.
-Esta bien... Acepto.
El hombre mayor ríe mientras unificada ambas manos al entrelazar sus dedos mientras dejaba que sus codos reposarán en la mesa viéndolo directamente con aquella calculadora sonrisa lleno de intenciones sospechosas detrás.
-Eso está muy bien. -concede acomodándose en su silla elegante negra para estar más cómodo y disfrutar de la respuesta afirmativa del mayordomo- Te enviaré mañana... Así que quiero que me reportes si es digno o no. ¿Está bien eso para ti... Dante?...
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