Creciendo Juntos [2] ➵ [Terminado]

Capítulo 1

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Un Viaje a GangWon.

— ¿Falta mucho? —Preguntó SooAh, mientras lanzaba un gran bostezo. El señor Do rió y acomodó la bufanda en el cuello de su hija.

—Apenas estamos en el aeropuerto, SooAh.

La llegada del invierno había sido fuerte, por suerte aún no estaba nevando. SooAh se encontraba con un calentador negro mucho más grande que ella; los tres estaban sentados en la sala de embarque, aunque en aquel momento su madre había ido por un par de cafés y una leche con chocolate mientras esperaban abordar. Asientos más allá se encontraba una madre con su bebé en brazos, quién dormía pacíficamente.

—Qué suerte — Murmuró, SooAh. El señor Do miró en la dirección que veía su hija y sonrió. —Él duerme tan cómodo y calientito.

—No me digas que quieres ser un bebé, con pañales apestosos, baba por todo el rostro y cuando comías popó de conejo pensando que era chocolate.

SooAh lo miró con el ceño fruncido. El señor Do tenía la expresión divertida plantada en su rostro.

—No eres gracioso, papá.

—Oh, vamos... Eres una hermosa bebé, siempre serás mi bebé — El señor Do suspiró, y apretó las mejillas de su hija, quién lo apartó para después masajearse las mejillas — Y no tendría que preocuparme por los niños...

—¿Niños? —SooAh resopló y mostró sus brazos, que actualmente estaban inflados y gordos debido a la casaca. —Estos dos no los dejarán acercarse; los niños son bobos.

El señor Do palmeó la cabeza de su hija con cariño.

—Sigue con ese pensamiento hasta que cumplas cuarenta, por favor. —SooAh asintió solemnemente. La señora que estaba metros más allá, quién había visto todo el intercambio de palabras, sonrió divertida.

La señora Do, llegó a los pocos minutos con unos cafés humeantes y un chocolate, aunque SooAh también pudo divisar que llevaba otra cajita donde al abrirlo encontraron varios bimbaps. SooAh tomó uno rápidamente y lo llevó a su boca.

—SooAh, cariño; mastica, por favor —La señora Do le entregó el café a su esposo y se sentó al lado de su hija para acomodarla muy bien y que no se quemara con la bebida que ya ingería. — Como si alguien te fuera a quitar lo que comes, hija.