Luis: Por lo que veo en la noche abren las aguas termales, podemos ir ahora pero están en mantenimiento por el momento, es por eso que iremos más tarde
Aurora: Nada mal solo hay que esperar que Diego deje de estar comiendo y ponernos de acuerdo, además se nota que Gabriel está muy animado
Luis: Si se ve muy alegre por estar aquí, eh de imaginar que tenía tiempo que no venía
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Gabriel: Bien yo puedo saltar. . . Esta muy alto mejor regreso
-Hey apresurarte
-Si no tenemos todo el día
Gabriel: No puede ser. . .Hay no puedo. . . No luce tan alto. . . A quien engaño tengo miedo
-Date prisa niño, hay personas que están esperando su turno
-Si no lo haces yo mismo te lanzare
Gabriel: No hace falta jeje, aya voy. . . No puedo
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Tamara: Entonces así lo conociste
Diego: Justamente
Tamara: Pero la historia que me contó fue una anécdota más extravagante
Ahri: ¿Que es esa cosa?
Diego: hmm. . .
Tamara: Es una vieja tradición se embarca de esa manera para agradecer al mar por la pesca, Aunque da miedo estar adentro
Diego: Vaya, luce algo peligroso que cuelguen de esa manera y trepen de una forma algo particular. . .
Tamara: jaja Vuelvo chicos iré por Gabriel
Diego:Aquí estaremos por el momento, ¿Te la has pasado bien?
Ahri: De maravilla me la eh pasado muy bien junto a ti
Diego: (Besando su mejilla) Sigamos así entonces
Ahri: S-si por ¿cierto ellos que juegan?
Diego: Ellos no creo que estén jugando. . . Oh. . más bien se están peleando (Tomando una rama)
Ahri: ¿Qué dibujas?
Diego: Ah cierta chica
Antes de que dijera algo Ahri solamente observo su figura dibujada en la arena, lo cual se emociono al ver aquel dibujo bastante bien echo
Diego: Sabes me la paso bastante bien si estás presente
Con un abrazo por parte Ahri y un beso por parte Diego, era un momento en que los dos podían sentir el amor del otro
Ahri: Te amo
Diego: Yo también te amo (Tomando su cintura para besarla nuevamente)
Al separarse solo sintió un gran mareo con un zumbido que se hacía más fuerte por cada segundo que pasaba, por lo cual marca de su mano empezaba a brillar de una manera en la que su propia mano deja de verse