Me Das Tu Número? - One Shot Shikatema

Me Das Tu Número?

-La segunda puerta

-Gracias - contestó a la indicación del encargado.

Se dirigió a paso lento, a decir verdad él no quería estar ahí, no es que le desgustara ese deporte, lo cierto es que le daba igual, pero era viernes por la tarde! Podría haber aprovechado e ir a un parque a echarse y ver las nubes, ese era su pasatiempo favorito después del Shogi.

Siguió caminando hacia donde le habían indicado, podía escuchar la tremenda bulla que se generaba a dentro de ese lugar.
Bueno que más podía esperar, era la final de la copa no sé que y no sé que no le había prestado atención a su primo, éste le había invitado a ir a verlo con él supuestamente se iban a encontrar a fuera pero le aburrió estar esperando así que entró.

Llegó al asiento indicado y se sentó.
Llamó a su primo quería una explicación.
Marcó su número y una voz se escuchó.

~Por fin contestas! ¿Dónde estás? En 5 minutos va a comenzar el partido

~Hola Shikamaru

~Ah.. Hola tía

~Yunuske no va a poder ir porque está con gripe

~Ah bueno... Espero que se mejore

~Claro, cuídate hijito

~Tú también, Adiós tía

~Chao

-Desgraciado, me has hecho comprar las entradas por gusto - maldicio Shikamaru internamente.

Yunuske era un primo con el cual no se veía tan seguido pero se llevaban muy bien, era hijo de la prima de su madre, por eso no llevaba el 'Shika' adelante de su nombre.

Sonaron unas bocinas estruendosas, seguidamente comenzaron a nombrar a cada uno de los jugadores.

Miró hacia las otras gradas y se fijó en alguien que le parecía conocido, enfocó su vista y lo vió.
Era su rubio amigo Uzumaki Naruto no lo reconoció en cuanto lo vió porque tenía la mitad de la cara pintada de los colores de su equipo, a su costado iba su reciente novia Hyuga Hinata, él chico estaba gritando y aplaudiendo muy fuerte, por otro lado la tímida chica estaba toda roja por el escándalo que provocaba su novio.

-Oye! Me escuchas! - habló con un tono desesperado la señorita de su costado.

-Disculpe - dirigió su mirada a la cara de esa mujer y la vió, vio sus lindos cabellos rubios sujetos en dos coletitas, algo añiñado pero le quedaban perfectas y esos ojos verdes oscuros a parte de eso tenía una bella figura.

-Ese es mi sitio podrías irte al tuyo- se quejó ésta rodando los ojos.

- Que problemático - susurró, revisó bien el número de asiento y ella tenía razón - Perdón - se paró y se sentó en el asiento de su primo después de todo él no llegará, así dejando un asiento libre entre él y la chica problemática.

Comenzó el partido, a decir verdad él se entretenía más viendo las tonterías que hacía su amigo que el mismísimo partido. Habían pasado tan solo 3 minutos de partido y observó a su costado dónde estaba la dichosa chica, ella se encontraba hablando con una señora de edad avanzada al parecer la señora quería ocupar el sitio de la rubia.