" Hola, 13 "

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— ¿Por qué sólo hay libros pedorros aquí, Greck? —preguntó molesta a un pequeño oso de peluche que se encontraba sobre la cama de su hermana Ada.



Había entrado a la habitación de su hermana para tratar de encontrar sus audifonos, no para ver muchos libros en ingles que obviamente no entendía, y que estaba segura, su hermana tampoco los entendía.



— ¿Sabes que, Greck? —volvio a hablarle al oso de peluche mientras su vista se concentraba en una caja que estaba hasta arriba de la repisa de los libros—, esta repisa me la pela.



Y sin más, tomo un pequeño banquillo para que se le facilitará tomar la caja, y despues de varios intentos que fallaron gracias a su baja estatura, pudo tomar la caja entre sus manos.



Tenía la pequeña corazonada de que Ada habría puesto sus audifonos en esa caja sólo para hacerle la vida imposible, así que abrio la caja, y al instante se decepciono de lo que había dentro de ella.


— ¡Otro libro! —comentó al aire de forma retorica sacando el libro que se encontraba dentro.




Habría dejado el libro de forma desinteresada como hizo con los demas, pero este era particular. Sobre la portada estaba escrito con plumon las palabras; “Propiedad de Ada, no tocar o sufriras mucho”. ¡Ja!, por favor, a ella nadie le decía que podía y no tocar.




— Hola diario, soy Ada... —empezó a leer en voz alta la primer linea de la primera pagina.




Comenzó a leer sin mucho interes y pensando que sólo conseguiría material para burlarse de su hermana, pero mientras más seguía con su lectura, más ganas tenía de seguir leyendo.



“ Hoy fue un día muy malo, se fue la tele por cable y no pude terminar de ver mi serie favorita, pero bueno, al ir a la tienda me compre unos dulces para ponerme feliz ...”



Su vista no podía desviarse ni un poco de la lectura, incluso se había emocionado cuando fue mencionada en una de las hojas, su nombre estaba mal escrito pero eso no hizo que su emoción disminuyera.




Por favor, hasta se había identificado con la gran mayoría de todo lo que se encontraba escrito en esas paginas.



No paso mucho para que revisará las fechas que se encontraban escritas en la parte de arriba en cada hoja y se dio cuenta de que todo eso había sido escrito cuando su hermana tenía su edad; trece años.




Realmente leyo todo de forma muy rapida. Ni siquira se había dado cuenta y ya se encontraba en la ultima pagina.


“ Pero bueno, ya tengo 14, esperare a tener la mayoria de edad para poder irme de casa y que nadie me diga que hacer, para eso no falta mucho, sólo cuatro años para los 18 años marabillosos. Buenas noches ”



En todo el diario sólo se narraba como su hermana tuvo que enfrentar la niñes y adolescencia practicamente sola, teniendo que lidear con responsabilidades como cuidar de sus hermanas menores y soportar los regaños y maltratos de su padre.



Elisa se encontraba estática, no sabía bien que decir o que hacer, nunca había visto de esa forma a la aburrida de su hermana mayor, de verdad que había muchas cosas que no sabía de ella.



— ¿Leyendo el diario de Anna Frank? —se escucho la voz de otra de sus hermanas, Ana, hacíendo que por primera vez en todo ese rato, Elisa desvira la vista del diario. Ana había pasado por el pasillo y al percatarse de que la puerta del cuarto de Ada estaba abiera no lo dudo ni un poco y entro, tampoco se sorprendio mucho al ver a Elisa con algo súper personal para Ada entre las manos.


— ¿Tu ya habías leido esto? —pregunto algo entusiasta extendiendo el diario.



Ana sólo la miro con una ceja alzada, no entendía por qué de la expresión de Elisa. Estaba segura que esa niña había tonado el diario para tener más material con el cual burlarse de Ada.



— Obvio que ya lo lei —contesto de brazos cruzados esperando a que Elisa sontara el diario. Ella había estado al lado de Ada desde que ella empezó con ese diario, así que claro, lo había leido, y le molestaba que Elisa lo tomara solo para burlarse de los problemas que había tenido Ada




— Me siento súper identificada —solto la menor sorprendiendo a Ana—, esto lo escribio Ada cuando tenía mi edad.



Elisa cerro el libro y sin más, salio de la habitación pasando a Ana de largo, dejando a la mayor muy sorprendida por el repentino comportamiento de Elisa.


Por otro lado, Elisa pensaba quedarse en secreto con ese diaro, de verdad se identificaba con todo lo que Ada había escrito en el y le gustaría leerlo más de una vez. Era como tener a una si tubiera a una amiga hablandore de sus problemas. Para ser honesta tenía ganas de hablar con Ada y verla con esos nuevos ojos.

" Mi yo del pasado "Donde viven las historias. Descúbrelo ahora