Yo
Pa, estoy en
casa de Jimin.Iré a casa en cuanto
la lluvia se acabe.Papá
Aún estoy en el trabajo,
paso por ti cuando salga.Esta lluvia no parece
querer parar.Elevé mi vista del celular y vi a Jimin salir de su baño usando una sudadera y pantalonera, eran similares a las que me había dado.
Papá
Agradécele a Jimin por
cuidar de ti, kiddo"Papá dice que te agradezca por cuidar de mi" dije riendo. "Gracias".
"No hay de que, tonta" sonrió mostrando sus dientes, haciéndome sonreír también.
Se lanzó a la cama haciendo que rebotara un poco. Jimin no había cambiado. Podrá ser rubio ahora pero seguía siendo el mismo pastelito de arroz. Estaba acostado sobre su pecho y tenía las cara pegada a la almohada, sus cachetes resaltaban y su boca formaba un puchero por la presión de sus cachetes.
"Dormiré un rato, estoy algo cansado" soltó un suspiro. "Puedes dormir si quieres..." rió. "Como las viejas costumbres".
Después de diez minutos decidí acostarme al igual que Jimin. No me dormiría pero descansaría la espalda al menos. El estaba profundamente dormido, estoy segura de que no tardaría en escuchar sus pequeños y silenciosos ronquidos. Lucia tan pequeño como un bebé. Y pensar que ya tubo a alguien en estas sabanas, en esta cama.
Me removí un poco incómoda. No debí de haber pensado en eso. Aghhhhh.
Gire la cabeza y vi a Jimin de nuevo. Un metro de distancia nos separaba pero aún así lograba ver los detalles de su cara. Veía su pecho subir y bajar por su respiración. Fruncía el ceño un poco de vez en cuando. ¿Estará soñando?. Probablemente sea yo la que estoy soñando.
Recuerdo haber querido a Jimin desde siempre, cuidar de él y... amarlo como amigo en los viejos tiempos. No recuerdo exactamente la vez en la que me fijé en el como algo más que un amigo, años atrás ambos llegaríamos a ser golpeados por la pubertad en algún momento. Jimin pasó de estar de mi estatura a sacarme una cabeza de altura. Empezó a hacer ejercicio hace tres años, se puso delgado pero tenía músculos en cierta manera que no parecía ser su piel y después su hueso. Hueso. Músculo. Piel. Su cara cambio y sus cachetes dejaron de ser tan rellenitos. Seguían siéndolo, solo que no tanto como antes.
Hablaba de dar lo mejor de él mismo y ser siempre una nueva versión de él. En aquel entonces no tenía sentido para mi, no le prestaba tanta atención.
Hasta que una noche hace dos años en una feria de la escuela una señora abuela de alguien más me pregunto si el chico que se ofreció para ir por un jugo mientras yo esperaba en la fila para los hot dogs. Días después los pensamientos me dieron una paliza.
Mire a Jimin. En realidad el no se parecía a los chicos que salían en los dramas, no actuaba como uno ni lucia como uno. El era algo más. Atractivo o algo, supongo.
Aparte de gustarme por ser el, debo aceptar que es alguien muy muy atractivo.
Que vergüenza
¿Qué pensaría el, uh? Yo hablando de el, viéndolo como maniaca mientras duerme. Una vez Hoseok me dijo que viviera el momento, ¿pero esta bien si lo vivo Justo así? ¿siendo una invasora de la privacidad, observando a Jimin mientras duerme?.
Escanee la cara de Jimin una vez más. Mi mente me llevo al asunto de Hwang Yuna con esta cama y aquel baño de allá.
Me gire dándole la espalda a Jimin. Mi papá llegaría en una hora y media, tengo tiempo para dormir, ¿no?.
Cerré los ojos tratando de conciliar el sueño. Al poco rato mis ojos empezaron a pesar y empezaba a dejar de estar consiente el tiempo.
Mientras me rendía ante el cansancio, Jimin durante su sueño se removió en la cama hasta quedar junto a mi. A la mitad del metro de hace unas horas. Sentía su respiración.
¿Sabes Hwang Yuna? Soy la primera chica que Jimin trajo a casa... y conozco a sus padres...
Tú fuiste la séptima, Hwang Yuna.
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flaming hot cheetos [Park JiMin]
Fanfictionfhc | "Quiero ser lo que piensas por la noche" Inspirada en las rolitas de Clairo. Ranking chido: septiembre/2019 #1 cheetos