Aeromoza

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Y se encontraba llorando en medio del puente para abordar el avión con el corazón roto y con la fuerza que tenía para no llorar siguió caminando lamentablemente no resistió y se soltó a llorar a mares hasta llegar adentro del avión y buscar con la mirada el lugar donde permanecería sentada durante las siguientes horas se sentó bruscamente y tratando de olvidar todos aquellos recuerdos que estaban en su mente. Mientras el pasajero de atrás estaba sacado de onda por que el asiento de adelante se empezó a mover bruscamente.

Mientas la chica miraba hacia la ventana sin interés aún soltando lagrimas desconsoladamente, alguien gritó su nombre
-¡Lena!- la rubia buscó con la mirada al perteneciente de esa voz que le era tan familiar al parecer. Al encontrarlo la escena frente a ella la dejó sin palabras.

Se encontró a un chico semidesnudo peleando con los guardias del aeropuerto

Y así es mi vida todos los días, aguantando chingaderas de todo mundo de todas las edades.
Mi nombre es Jennifer María de los Ángeles Cristos Rodríguez Treviño de Portillo