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El silbó, encantado con lo que acababa de hacer se hacía llamar un genio, por su tan bien pensado plan. Aquel otro hombre solo le había dado un empujoncito a su sueño más anhelado.

Silbaba una canción de guns N roses, lo hizo mientras limpiaba su arma blanca, un cuchillo como los de película de terror que lo hizo sentir feliz por un momento y pronto lo haría sentir feliz por toda la vida, por fin había salvado a su princesa de todo aquel que quisiera dañarla, por fin la había alejado de todo el mal, y la tendría solo y únicamente para él.

En su mente enferma él creyó que hizo un favor, y por un momento era cierto, con esto ella caería a sus pies, lo amaría tanto como él amaba su cabello color chocolate y lo fascinante que eran sus ojos.

Y con su belleza, era como un ser místico, realmente hermoso pero tan dañino que morirías a gusto en sus manos, claro que lo haría, claro que ella caería ¿Quién no lo haría? ¿Quién no lo haría realmente? , todos por una extraña razón, caían a sus pies, caían por esos ojos y ese tacto al hablar con elegancia pero ella no lo había hecho,todos caían menos ella, ella era la única que él quería ¿por qué ella no lo hacía? Porque esa chica con ojos de colores distintos.

Su madre tocó su puerta, el rápidamente escondió el cuchillo debajo de su almohada y se recostó sobre su cama tomando un libro.

- pasa - dijo de mala gana, la mujer entro apresurada, a contemplar a su pequeño niño

- ¿Donde estuviste? - le dijo un poco enojada, aunque no lo estuviera ella jamás se enojaría con él

- estuve corriendo un poco, madre ¿Paso algo?- la mujer negó

- no avisaste donde ibas mi amor- él le sonrió un poco cínico

- ya no soy un niño - le dijo con cautela no quería que se enojara

- siempre lo serás para mi, así que ahora vete a tomar una ducha y te metes a la cama, ya es muy tarde- se acercó a él y le dio un beso en la cabeza.

En su departamento reina el silencio, hace un rato los policías se habían ido, ella aún puede recordar la voz de su hermano en toda la casa o los regaños de su madre gritando por cualquier cosa, cuanto los extrañaba y eso que sólo era el inicio, inicio de una vida sin ellos, Carmine ya había parado de llorar desde hace rato pero Nyx estaba destruida, amolada aunque sabría que se le pasaría pronto.

Por mandato de su padre, el cual solo llamó para aceptar la oferta de los policias de que ella se fuera a una estancia,un lugar como internado, ahí tendría una buena vida pues le ayudarían a superar sus traumas y no dejaría de estudiar. Y pues él no se haría cargo de ella, Matthew Bell jamás quería volver a ver a sus hijos y menos a esa chiquilla mentirosa. Aparte, ella estaba involucrada en un asesinato y siendo la única sobreviviente, tenía que ser investigada que mejor en un lugar donde la tuvieran controlada.

En ese lugar estudiaría y le tratarían con terapias lo que tuviera como daños era como para poder superar el trauma causado por ver tantas muertes, pero ella no puede recordar nada,¿ por qué tiene que superarlo? Esa pregunta se la hace todo el tiempo y es que toda su vida ha escuchado esas palabras, superar, superar y superar, Lo hacían parecer fácil.

La pobre de Carmine no podía ni mantenerse sola, con el dinero del bar no le alcanzaba de nada, mucho menos podrá hacerse cargo de su hermana menor, ahora tienen que pasar sus penas separadas.

Nyx se iría en dos días a su nuevo hogar, su estúpido padre ni siquiera se tomó la molestia de ir a identificar los cuerpos por lo menos el de su hijo, menos para consolar a sus hijas por la muerte de su madre y hermano, pero es que nadie sabía la verdad. 

En la casa de a lado los hijos de la pareja de vecinos, los Benetton,  lloraban, claro que se notaba la ausencia de esa pareja de ancianos tan modestos que solo habían sido daño colateral.

Los Jonhs era otro caso, a pesar de que Nyx odiaba a esas personas, jamás les deseo el mal, jamás deseo que ellos murieran así, ni siquiera el estúpido de su hijo Kevin.

Sin en cambio el pobre amor de Nyx era el que le dolía de manera distinta, amaba a su familia incondicionalmente, pero lo de Roger era distinto, a Roger lo amaba de otra manera la manera que se aman los niños aunque, amaba más a su muy retorcida historia de amor.

En la mente del asesino, había matado a todos con razón excepto a sus vecinos los Benetton, ellos solo fueron daño colateral, no necesitaba testigos y tenerlos tan cerca que solamente le dieron ganas de matar, su sed no se acababa así que fue por ellos.

a los Johns por hacerle la vida imposible a su amada esos seres horrorosos igual que él. Le hicieron daño a su Diosa.

a su madre por que debía hacerlo, era el único mandato y a su hermano por ser un puto machista y muchas cosas más, a pesar de ser un año menor que Nyx, la trataba como basura por eso le dio muchas ganas de matarlo al igual que a kevin.

La chica no pegó el ojo en toda la noche, de por sí padecía insomnio, pero ahora le llegaba a los oídos la risa de su hermano, la voz de su madre y las caricias de Roger, no había dormido,de hecho desde hace dos días que regreso de su shock lo único que hacía era llorar como una estúpida, le dolía el alma y por eso no quería dormir los recuerdos la invadían.

y no tenía la suficiente suerte de matarse, ella aseguraba que eso era para cobardes para los que no aguantaban ese tormentoso dolor de perdida, le era tan tortuosa la forma en la que los perdió y que la policía estuviera ahí no ayudaba mucho.

Pues le hacían recordar que su familia había muerto y que las cosas no serían iguales de nuevo.

Se iría en un día, no le quedaba nada que la atara aquí más que su hermana pero ella se vería sola, necesitaba salud mental, así que era justo irse y que toda esta locura terminará, rogaba a Dios que se le pasará, ella confiaba que lo haría, por primera vez le agradeció algo a su padre.
Algo por fin hacia bien ese ser sin corazón.

NYX© (Luke Hemmings)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora