Capitulo 4: "la chica"

44 1 1
                                    

Algo raro pasaba aquí, todo era tan confuso, no entendía por que desaparecían algunos chicos de segundo, se iban por un tiempo y regresaban, pero actuaban diferente, como si le hubieran lavado el cerebro. Me empezaba a preocupar, ya casi terminaba el ciclo escolar y pasaría a segundo, todavía no lograba entablar una amistad con la chica de ojos bonitos, cuando le quiero hablar, me sonrojo, tartamudeo y se me caen los huevos, pero esta vez será diferente, voy a agarrar valor y le hablaré.
Ella estaba ahí, platicando con sus amigas, era la oportunidad perfecta.
-Taylor ve y plática con su amiga.
-Pero yo porque!
-Para que la distraigas y yo hable con la chica guapa.
-Y yo que gano?
-Que una chava te hable.
-Y luego?
-Solo ve y te hago la tarea una semana!
-Bueno así pues si.
Ya estaba la oportunidad, mi amigo fue con su amiga, y ella se quedó sola, ya sabía que decirle: "hola me llamo henry y tu?" así le diré. Lucía tan hermosa, me paré enfrente de ella y le dije:
-aamm tienes un lápiz que me prestes.
-si claro, solo eso?
-Si es todo, gracias.
-De nada.
Que estúpido soy, un lápiz!, fue todo lo que se me ocurrió, tenía la gran oportunidad y lo eche a perder. Me fui a mi dormitorio, me sonroje de nuevo, en eso llegó taylor.
-Como te fue con la chica, amigo?
- De maravilla henry, es tan simpática, hasta me dio un beso.
-Oh genial. ._.
-Y a ti?
-Pues ya sabes, charlamos, reímos, me fue bien.
-Enserio henry?
-No a quien engaño! Soy pésimo ligando.
-Bloqueo mental cierto?
-Si taylor! le pedí un lápiz, soy un tonto .
-Sin duda amigo, lo eres. Ya tendrás otra oportunidad.
-Lo arruinare de nuevo, soy un fracaso total.
-Yo te ayudaré, me llevó a su amiga a caminar y tu vas y le hablas.
-Lo intentaré.
Mi amigo había tenido suerte, pues claro, como a el no lo vio desnudo, por eso. Espero que no le de asco a la chica de ojos hermosos, después de que viera mi "amiguito".
Alguien toca la puerta, quien será?
-Hola, esta ves si toqué para que no ocurriera lo de la otra vez.
-Ho... la, si creí que no lo recordaba.
-Intento olvidar eso, oye por que te pones rojo.
-No es que tengo fiebre, mucha fiebre, adios pude ser contagioso!
-Bueno adios.
Otra vez tenía la oportunidad y no la aproveché.
Después de clases, la vi en la cafetería.
Estaba sola, pues su amiga estaba con Taylor, me acerqué poco a poco, hasta que estaba a lado de ella, no comía, estaba leyendo.
-Oye, por que no comes?
-No me gusta, sabe asqueroso.
-Y no te da hambre en todo el día?
-Si, pero me como un poco y bebo más agua.
-Si quieres yo me acabo lo que te sobra, para que no te regañen.
-Enserio harías eso por mi?
-Si, esta "delicioso"
-Te gusta?
-Claro, es mi favorito.
-Bueno gracias amigo.
-Si, como es que te llamas?
-Magali, y tu?
-Henry
-Mucho gusto henry, creí que nunca me hablarías.
-Jeje pues lo intentaba pero me ponía nervioso.
-Si me daba cuenta, ya me tengo que ir a clase.
-Adios amiga.
-Bye henry.
Por fin le pude hablar!, aún que tuve que comer de esa porquería para agradarle, pero vale la pena la diarrea que me va a dar.
No entré a clases, estuve vomitando, la comida se vía igual que como entró a mi cuerpo, blanco y asqueroso.
Me lavé la boca y me recosté en mi cama, solo pensaba en ella, sus ojos cafés, muy bonitos. Espero no tener que volver a comer doble ración de porquería putrefacta mañana.
-Henry, dónde estuviste? , porque no entraste a clase?
-Me enfermé.
-Pero porque?
-Comí mucha cochinada blanca.
-Si a ti ni te gusta.
-Lo hice para impresionar a una chica.
-La chica de ojos bonitos?
-Si amigo.
-Y le hablaste?
-Si, se llama magali.
-Wow henry, creí que no lo lograrías
-Yo también lo creía.
-Bueno tienes que ir a ver a la enfermera.
Fui a buscar la enfermería, le pregunté a los chicos de segundo y tercero, pero la mayoría me ignoró. Di varias vueltas hasta que por fin la encontré, había un letrero en el que decía, donde estaba la enfermería. Habían unas escaleras, las luces estaban muy tenues, creí que nunca terminarían los escalones. Parecía la típica escena de terror donde hay una pasillo blanco y las luces parpadean, como si estuviesen a punto de fundirse. No tenía tanto miedo, algunas puertas tenían candado, menos le del fondo, esas era la enfermería, me empezaba a dar escalofríos y también me dolía el estómago, caminé cada vez más lento, hasta que estaba en la puerta.
-Puedo pasar.
-Si henry pasa...
La enfermera estaba gorda, cabello rojo y de tez blanca, su voz era gruesa, me provocaba una sensación de desconfianza. Como es que sabía mi nombre?, yo no era muy famoso.
-Enfermera podría darme algo para aliviar este dolor de estómago.
-mmm que comiste o bebiste muchacho?
-Doble ración de comida.
-Acaso estas demente!
-Que ocurre?
-Pudiste haber sufrido un derrame gastrointestinal.
-Porque??
-No se pero toma esto, para mañana te sentirás mejor.
-Que clase de medicina es esta?
-Quieres sentirte mejor?
-Si pero...
-Entonces no pregunte y vete de aquí muchacho, estoy muy ocupada.
Me marché con la duda de que me había dado esta señora, era un líquido de color azul un poco espeso, no se si era mi imaginación o esta cosa estaba brillando. De regreso a mi habitación encontré una puerta de hierro, no pude abrirla, parecía que la habían sellado años atrás, me preguntaba que podía haber detrás de ella, estuve unos minutos observando y después subí las escaleras para ir a dormir. Cuando llegue al primer piso, no había nadie, cuanto tiempo había tardado en llegar a la enfermería?, ya era noche, que bueno que las luces seguían prendidas.
Taylor estaba durmiendo, miré el reloj, decía 11:00, si ya era tarde, dormiré por que aveces no me despierto en la mañana, pero antes tenía que tomar la medicina, aún tenía ese horrible dolor de estómago, tomé el frasco y bebí, no sabía tan mal.

Secundaria "North Wood"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora