Cada minuto que pasa parece durar una eternidad. Ha estado lloviendo durante casi una hora, los cristales de las ventanas se empañaron. Eso fue un buen distractor para James, Onyx y David, que se dedicaron a hacer dibujos en los cristales empañados. Hicieron una réplica de Sheryl enfurecida, escupía fuego. Creo que ese dibujo fue lo único que logró arrancarme una sonrisa. Cuando Sheryl lo vio, se levantó de la cama e hizo un dibujo de ellos tres colgados por el cuello. Luego de eso, todo fue hacer dibujos en el cristal empañado. Y también me uní a la diversión e hice algo con James. Pusimos las palmas de nuestras manos y escribimos nuestras iniciales con las yemas de nuestros dedos. JH & PC.
Pero, por más risas que haya habido, es hora de volver a la realidad.
Me quedan poco menos de treinta minutos para que se termine el plazo que el padre de James me dio para abandonar el hotel. Eso significa que dentro de aproximadamente media hora, todas las personas dentro de este hotel morirán. Incluidos nosotros. Pero entonces, ¿por qué no puedo darme el valor para irme de aquí? Hay algo que me mantiene quieta, como si mi cuerpo entero se hubiera encarnado con el sofá donde estoy sentada. Sé bien lo que me ocurre, pero no quiero admitirlo. Es miedo. Tengo mucho miedo de lo que pueda pasar si abandono el hotel.
Ya no queda más que hacer. Tengo que encontrar la oportunidad para salir de aquí. Pero si me voy y nunca vuelvo… ¿Qué entonces? ¿Cómo podría explicarlo? Seré capaz de arriesgarme y sacrificarme con tal de que lastimen a alguien, pero… Aunque salve las vidas de todas esas personas, la angustia que les provocaré a Sheryl, James, Diamond y los demás no desaparecerá hasta que ellos me encuentren. Y si nunca me encuentran…
¿Qué está haciendo Sheryl?
Mira por la ventana con los brazos cruzados. En silencio. ¿Qué estará mirando?
—Creo que necesito salir a tomar un poco de…
—Tú no irás a ningún lado —dice Jackie con severidad.
—No creo que sea buena idea quedarnos aquí encerrados —interviene James a mi favor.
— ¿Qué vas a saber tú, Harrison? —se queja Sheryl en voz baja.
—Estamos aquí para mezclarnos entre la multitud, ¿o no? —dice Onyx.
—Y tú cierra la boca, Fox —continúa Sheryl—. Perdiste la oportunidad de formar parte de nuestras discusiones hace tiempo.
—Sólo quiero estirar las piernas —le digo.
Pero no funciona. Sé que ella está consciente de lo que tengo en mente y hará todo lo posible para evitarlo.
Y de repente, ella suelta una maldición en voz alta.
—Mierda.
Jackie y Diamond se acercan a la ventana e igualmente se muestran enfurecidos.
¿Qué está pasando?
— ¿Huelen eso?
La voz de Mewtwo me devuelve a la realidad.
Arrugo la nariz cuando yo también lo percibo.
Es gas.
—Una fuga de gas —dice Harumi un poco alterada.
Sheryl, Jackie y Diamond se miran
Ellos saben algo que yo no.
—Tenemos que salir de aquí —dice Sheryl.
Y yo insisto… ¿Qué está pasando?
Salimos corriendo a toda velocidad de nuestra habitación. No somos los únicos que se han dado cuenta pues otras personas también han comenzado su escape. Muchos de ellos llevan su equipaje a cuestas. Nosotros sólo llevamos a Jay Jason a rastras. No es fácil cargar con alguien que va atada de las manos y que además no parece querer seguirnos el paso.
— ¡Vamos por la escalera de emergencia! —dice Jackie y todos la seguimos hacia la puerta que conduce hacia el bloque de escaleras.
—Cuando estemos arriba, puedes llamar a Talonflame —dice Diamond, le cuesta seguirnos el paso gracias a sus patas cortas.
— ¡Estás loco! —Dice James—. Si es una fuga de gas, el sitio explotaría si llamas a un Pokemon de tipo Fuego.
Explosión.
El padre de James está haciendo esto.
La escalera da una sacudida y nosotros caemos de bruces. Harumi se ha abierto un par de cortes en las rodillas con la orilla de uno de los peldaños metálicos. Intentamos ponernos de pie, pero otra sacudida nos lo impide. David y James me toman con fuerza por ambos brazos para evitar que caiga de espaldas. Onyx mira hacia abajo y retrocede un poco perturbado.
— ¡Están intentando derribar el hotel!
Miramos en la dirección que él sugiere. Hay siete Pokemon de gran tamaño que están lanzando sus ataques hacia el hotel.
¿Por qué lo hacen? ¡El plazo aún no termina!
Las escaleras dan otra sacudida y el bloque donde estamos se parte por la mitad gracias a la fuerza del impacto. Liz y David tiran de mí para lograr que me quede en la mitad superior, pero Sheryl y Diamond se han quedado abajo. Extiendo una mano para que ambos vengan, pero sólo Diamond lo hace dando un salto. Se posa sobre mi cabeza y Sheryl se aleja un par de pasos, se sujeta de la baranda cuando las escaleras dan otra sacudida.
—Ustedes sigan, yo escaparé por tierra —dice y se va.
¿Qué?
¡No!
¡No puede quedarse!
— ¡¡Sheryl!!
Se pierde de vista y Jackie me aferra con fuerza para que no salte y vaya detrás de ella.
¿Qué diablos está pasando con ese par?
Me llevan a rastras por lo que queda del bloque de escaleras y llegamos a la azotea del edificio. Viendo hacia abajo desde el borde podemos ver que las personas comienzan a congregarse en la calle. Se escuchan las sirenas de las ambulancias y los autos patrulla, también veo las luces de un camión de bomberos que viene a toda velocidad. ¡Tengo que ir por Sheryl!
—Perla, tú vendrás conmigo —dice Jackie y tira de mí para separarme de James que ya estaba a punto de ayudarme a subir a Pidgeot para ir con él.
Pero no la obedezco y subo al lomo de Pidgeot, James aferra mi cintura con fuerza cuando sube detrás de mí y Jackie se nos une. Diamond va sobre la cabeza de Pidgeot y los demás suben también a los Pokemon voladores que poseen.
Nos levantamos en los aires y entonces, provocando que nosotros nos desestabilicemos gracias a la fuerza del impacto, el hotel estalla.
No puede ser…
¡¡Sheryl estaba ahí dentro!!
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Pokemon V: La Batalla Contra la Elite
Fanfic¿Por qué tuve que ver los ojos de Skyler antes de morir? Él lo dijo, Él lo repitió mil veces. Él me advirtió que si veo los ojos de alguien antes de darle muerte, esa última mirada me perseguiría el resto de mi vida. Y los ojos azules de Skyler no m...