Dylan Miller (Actualización Lenta)

Capítulo 15

Dylan

Y aquí estabamos todos, sentados en los sofás de la sala con mantas cubriendo a todos y una chimenea con fuego como para tenerlos calentitos a todos pero eso no era suficiente. Nos habíamos quedado atrapados en la cabaña por una fuerte lluvia con indicios de que nunca terminaría pero de alguna forma no podríamos ir a acampar por la humedad y otro punto era que ya era tarde cerca de las 7:30.

Faris y Lola se encontraban sentadas en el suelo cerca de la chimenea, con las manos extendidas hacia el fuego para mantenerlas cálidas. En cambio, yo estaba sentado en uno de los sofás alejado de todos con una simple tasa de café sin chocolate porque no me gustaba el sabor amargo que provocaba estas dos combinaciones.

De pronto todo se volvió música suave porque Palmer había puesto una canción llamada Heal de Tom Odell. Respire profundo ante esta sensación de paz que se había creado aunque todo no estaba solucionado. Tenía que saber que le pasaba a Faris y porque a John le atraía de repente Faris.

- Me gusta- alguien había comentado a mi lado. Palmer estaba ahí. Era la primera vez que me había dirigido la palabra por pura casualidad. -Ahora veo porque les gusta venir a este lugar.

-Te hace pensar mucho estar aquí. -Dije de repente. Sólo hablaba en susurros, igual que ella. No quería arruinar el clima tranquilo a nuestro alrededor.

-Sii... Es tranquilo.- Palmer de pronto me miró fijamente a los ojos y yo trague saliva. Si antes me ponía nervioso está chica ahora más. Era de lo peor que te miraran fijamente era como si estuvieran leyendo tus pensamientos y siente la necesidad de hacer algo. Era incómodo para mí. Pero para ella parecía de lo más normal.

- Es increíble como puedes sacarle la verdad a alguien cuando lo vez a los ojos ¿Cierto?

Trague saliva. ¿Porque me decía eso?

-Hay diferentes formas de hacerlo y creo que está es la más íntima para mí. -Se hecho a reír. ¿Qué le causaba risa? A algunas personas la interacción ocular les molesta o les resulta muy íntima (puede ser para los tímidos) hubo un tiempo en el que no podía aguantarme la mirada a alguien porque era mucho...

-Esta es mi favorita, siento que puedo leer a las personas viendo los a los ojos.

Okay, ahora si me daba miedo. Aparte de inmediato la vista de ella. Y bebí de mi café.

100% seguro que no dormiria tranquilo está noche.

-¿Que verdad quieres de mi? - Me acomode mejor en mi lugar y Palmer subió un poco de la música con el control remoto. Parecía que ya se había puesto cómodo en la cabaña, gracias a Lola ya conocía parte de ella.

-No es como que te diré fácilmente lo que quiero de ti. Primero quiero jugar un poco -dijo tranquila y yo lo único que hize fue fruncir el ceño.

-Solo ve al punto. ¿Sabes que? Ni si quiera se porque hago esto. No ganare nada diciendote esto mas bien saldrás ganado tú. Luego pelearemos y no me volverás a dirigir la palabra como lo has hecho desde siempre.

- ¿Desde cuando importa si te hable o no? -dijo con incredulidad.

-No si quiera yo sé porque saque eso a relucir. - Me encongi de hombros.

-Solo quiero confirmar algo que me dijeron... ¿Entonces es cierto? -levanto un ceja con curiosidad.

-¿Qué? - me hice el desentendido porque lo estaba.

- Lo de... Ya sabes quién. -Palmer movió los ojos en dirección a las dos chicas sentadas junto a la chimenea.

Ahora cuadre todo y supe de inmediato de lo que estaba hablando y como no se me había ocurrido de lo que se refería. Era más que obvio.

No le diría eso a ella. Porque para mí era una casi extraña. Otra cosa: No podia creer que los chicos le dijeran a Palmer sobre lo que se supone que quedaría entre nosotros. Seguramente no tuvieron conversación en el auto.

- No entendí.

-¡De Ella! -Aun no mencionaba su nombre así que no podía dar crédito a nada. -Mira de todos modos ya me lo dijeron los chicos. En realidad fue Carter. Me siento muy mal por lo que está pasando porque creo que está mal...

Bien, ya se delató ella misma. Era algo que tenían las mujeres, no podían controlar su lengua.

-¡Solo dime si es cierto! -y comenzó a moverme por los hombros de una lado a otro Y no se detuvo hasta que yo diera fin a todo esto. Sólo hizo falta decir unas cuantas palabras para que todo se calmara.

- ¡Si! ¡Joder me gusta Faris!