-Capítulo 32-

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Coge mi móvil y lo pone entre mis pechos... Acaricia uno de ellos y poco a poco empieza a besar mi cuello, sentía calambres por mis piernas... No me inmutaba, tenia que hacer algo pero ¿el qué? Quizas era demasiado tarde para pararlo... O quizás no. Bajé mi mano por su pantalón y cuando llegue a su miembro, cerré la mano con mucha fuerza

Mateo: ¡aaaaaaaah! -Gritó-

Karen: shh... Te van a escuchar. -Me mofe sin soltarlo- repite conmigo...

Mateo: ni... en... sueños -Dijo pausado por el dolor, apreté más fuerte hasta que volvió a salir otro grito de su boca-

Karen: repite... Nunca

Mateo: nu... Nunca

Karen: volveré... -Dije a punto de estallar de la risa. Nunca había visto a Mateo tan dominable-

Mateo: vol... vere.

Karen: a tocar a Karen

Mateo: a tocar a Karen. -Dijo lo más rápido que pudo-

Karen: no te he entendido... -Volví a apretar-

Mateo: A TOCAR A KAREN. -Acabó por gritar, lo solté y di dos golpes secos en su espalda-

Karen: muy bien... -Caminé al fondo de la clase para alejarme de él-

Mateo: eres una... -Se mantuvo callado y puso cara de dolor- te vas a enterar

A palabras necias oídos sordos, ignore todo lo que dijo y volví a coger mi móvil. Si no me hubiera despertado, hubiera acabado por ponerle los cuernos a Julen. Me sentía mal pero recordar la cara de Mateo me levantaba los ánimos. Julen seguía teniendo una incógnita que yo no sabía y ya me estaba poniendo algo nerviosa, esas llamadas... Llegar tarde... Era imposible no confiar en el después de todo lo que me había dicho, pero yo lo hacia. Mateo no me dirigió más la palabra en los 15 minutos restantes... Solo malas miradas

Karen: a mí no me mires así, no soy María. -Digo con aire de superioridad-

Mateo: no sabes lo que te voy a hacer gritar cuando te coja... -Dijo por lo bajo-

La puerta se abrió, era el director. Ya era la hora de irnos. Salí rápido, corrí por todas las escaleras hasta la salida... ¿Julen? No había llegado. Dos veces en el mismo día. Me senté en el césped del campus a esperarlo... 5... 10... 15 minutos. 20... 25... Suena el claxon del coche de Julen. Por fin.

Julen: perdón, estaba ocupado. -Sonríe y me intenta dar un beso, giro la cara-

Karen: ¿me ocultas algo? -Pregunto extrañada- te estás comportando muy extraño

Julen:... No soy Mateo, en mi podrías confiar un poco. -Gira la cara y no vuelve a mirarme más. Conduce en silencio durante medio trayecto...- quién deberia de preocuparse por algo soy yo, ¿no crees?, estás en su misma clase... Vives al lado... Te desvirg...

Karen: te estas pasando ya. -Le digo en voz alta- cuando aceptaste estar conmigo sabias ya de cajón que no era virgen

No volví a mirarlo en todo el trayecto hasta... ¿su casa?. Hizo señales para que entrara, no me habló hasta que nos sentamos en el sillón de su casa. Él en una esquina y yo en otra

Julen: lo siento por lo que dije... No debí sacarte el tema sobre lo de Mateo. -Suspira- no sé en qué pensaba

Karen: ya... Ya veo. -Dije por lo bajo-

Julen: ¿me das el beso que me negaste? -Dice con cara de cachorro. Sonreí, era perfecto tener a alguien que admitiera cuando se equivoca, me levanté y di un beso en sus labios- ahora ven, quiero enseñarte algo

Tapó mis ojos con sus manos y me llevó hasta su habitación, no sabía que me esperaría allí donde íbamos. Cuando entré, un olor dulce me invadió. Quitó sus manos de mis ojos y en lo que recuperaba la vision noté que todo estaba cambiado. El color de la habitación, los muebles... Una enorme foto de los dos en Italia. Era una habitación perfecta en color malva, decorada en blanco... Dos mesillas, un ropero enorme...
Me sentía como una estúpida por haber desconfiado de él, todo esto lo había hecho por mí. Lo miré con vergüenza y tragué saliva, me odio

Karen: lo siento por desconfiar de ti. -Bajo la mirada-

Julen: después de lo que has vivido veo normal que desconfies, pero recuerda que yo no te haría sufrir -Me acercó a él y le doy un abrazó-

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Volví a mi casa anoche después de una tarde especial con Julen. Hoy llega a tiempo y me lleva al instituto un poco más temprano de lo normal

Julen: estudia mucho. -Dice dándome un hilo de besos- te amo

Karen: y yo a ti... -Le sonrió y salgo del coche. No hay muchas personas aún, pero una mano agarrando mi hombro me asusta- aaah, Manu... -Suspiro aliviada- ¿qué haces tan temprano aquí?

Manu: he madrugado. Ven, quiero presentarte a alguien -Agarra fuerte mi brazo y empieza a caminar rápido por el campus hasta las escaleras donde está esa chica... María. La chica se levanta deprisa y se sacude, se quita los auriculares y me mira-

Maria: hola...

Karen: Manu, ¿por qué me traes aquí con esta? -La miro con asco, Manu me golpea con el codo-

Maria: bueno por si no me conoces soy María... -La interrumpo-

Karen: claro que te conozco, pero quizás no como desearias -Manu vuelve a golpearme con su codo, suspiro alto y espiro. Vuelvo a mirarla-

María: te quería pedir perdón, se que me odias, que me matarias... -Hace un silencio- pero comprendeme, se que has pasado por lo mismo que yo. Me maniato, me sedujo y yo me deje llevar. Rompiendo mis amistades e incluso con el chico que me quería. -Una lágrima recorre su cara- no tengo a nadie, no tengo amigas... Todos me odian y me llaman puta. Y la verdad, tienen razón...

Sin querer darme cuenta, me había empezado a dar pena. Yo también perdí a mis amigos por Mateo, lo que supe volver sobre mis pasos. Había roto a llorar y se inclinó sobre sus rodillas para llorar. Manu iba a agacharse para consolarla pero me agache yo primero

Karen: María. -Le levanté la cara- no llores, les estás dando el gusto a todos de verte mal. ¿Sabes qué? Te cogí asco, no queria ni verte... Pero sé como es Mateo y aunque hayas perdido a tus amigas puedes contar conmigo para lo que necesites

Quizás mañana me arrepienta de esto pero su historia era tan parecida a la mía que me pudo. Nos dimos un abrazo como afianzando nuestra nueva amistad y le tendi un pañuelo para que se secara la cara. Manu tras nosotras sonreía y al levantarnos pasó los brazos por detrás de nuestros cuellos

Manu: muy bien preciosas, soy el mejor y las he unido. Me merezco un abrazo. -Nos miramos y fundimos a Manu en un abrazo lleno de miles de sentimientos. ¿Quién iba a pensar que este era amigo de Mateo?

Tocó el timbre y tuvimos que entrar a clase. Mateo estaba apoyado en la puerta, la primera en entrar fui yo, con mi cabeza alta, pero cuando me di la vuelta vi que María agachaba la cabeza porque algunos de los que van con Mateo le habían llamado p*ta. Retrocedi a donde estaban ellos

Karen: María, ¿bajas la cabeza por lo que te dicen ellos? -Dije muy alto para que Mateo y esos chicos que aparentaban mucho más de lo que tenian me escucharán. Ella seguía sin mirarme a los ojos- no bajes la cara y menos por ellos

Mateo me dirigió una mirada de extraño al ver que hablaba con ella, María levantó la cara y entró orgullosa en clase. Mateo me sujeta la mano

Mateo: ¿qué haces con ella? -Dice con cara de odio. Le sonrió con ironía-

Karen: estoy haciendo un club, se llama "los juguetes de Mateo Palacios", cuando menos te lo esperes te abremos pintado el coche con esmalte de uñas rosa...

Me suelto y sigo caminando... Sé perfectamente que esto no acaba por hoy, Mateo me buscara...

The Director's son -Mateo Palacios y Karen Watson- FanFictionDonde viven las historias. Descúbrelo ahora