Capitulo 9
Comencé a caminar hacia la escuela. Sonreía de una manera muy estúpida cada vez que recordaba aquel sueño que había tenido. Una pequeña pizca de esperanza se encontraba en mi interior, pero se esfumó cuando al llegar y comenzar a caminar por el pasillo vi a Yuu, abrazaba a una hermosa chica por la cintura y ella, muy sonriente y feliz le besaba la mejilla un par de veces. Suspiré pesado y negué con la cabeza un poco agachada.
Realmente había sido idiota al creer que lo de mi sueño algún día podría haberse hecho realidad. Él nunca se fijaría en mi, no era como yo y menos lo haría teniendo a todo ese montón de chicas tras de él, entre las cuales ninguna estaba mal.
Saqué mis libros del casillero y pasé de largo frente a él sin voltearlo a ver o decir palabra alguna. Al estar frente a la puerta del salón decidí voltear hacia atrás.
Lo peor que pude hacer.
Volteé hacia atrás y pude ver como sus labios se unían en un beso.
El día había transcurrido bien, excepto por lo ocurrido en la mañana. Milagrosamente había sobrevivido despierto en todas las clases, hasta el receso.
Salí del salón y fui a buscar a Akira. Mientras lo hacía, a mi lado pasó Mikk, ni siquiera volteó a verme o algo, sonreí para mis adentros y seguí caminando: al fin me había librado de él.
Seguí caminando por los pasillos sin encontrar a Akira, cuando vi que Yuu venía desde otro pasillo en dirección hacia mi. Comencé a caminar rápido para llegar al salón de Akira y al entrar, mi amigo se encontraba ahí recogiendo sus cosas. Dirigió su mirada hacia mi con una sonrisa y yo hice lo mismo.
Volteé de reojo hacia atrás y Yuu seguía caminando hacia acá. No quería verlo, quería evitarlo a toda costa, no hablaría con él igual, no desde esta mañana...
— Aki... ¿Puedes apurarte? — Le susurré mirando un poco hacía la puerta.
Me miró un poco extrañado por aquello y después miró hacia la puerta.
— ¿Por qué? ¿Qué no él...? — Me acerqué a él negando, indicando que se callara y no continuara con lo que iba a decir. Yuu estaba a solo unos pasos de la puerta.
Akira me miraba completamente confundido, supongo que era por lo que habíamos hablado ayer; pero ya no, lo de ayer había cambiado esta mañana.
Yuu entró y caminó hacia una chica que estaba parada observando por la ventana. La cargó y ella parecía estar sorprendida, rió y Yuu le beso la frente después de haberla bajado.
— Hola Taka~ — Dijo mirandome con una sonrisa.
— Hola. — Contesté sin mirarlo mucho.
Sentí su mirada por unos segundos mas, desde la puerta, hasta que la chica lo llamo y desde afuera y se acercó a jalar su brazo.
No dije nada, simplemente miré el suelo y salí del salón tras Akira. Comenzamos a caminar por los pasillos, ambos sin decir nada.
Llegamos a la cafetería y nos sentamos en la misma mesa de siempre con otro amigo de Akira, no recordaba bien su nombre.
Se pusieron a platicar como siempre lo hacían mientras comían. Yo estaba con la cabeza recostada sobre mis brazos en la mesa y mirando a las demás personas platicar, reír, comer y esas cosas que hacen los amigos en los recesos.
Mi subconsciente divagaba en ese montón de estupideces que quisiera y anhelaba que alguna vez pasaran. Me acomodé un poco en el asiento e inconscientemente comencé a buscarlo entre todo ese montón de personas.
Nuestras miradas se chocaron ¿era mi imaginación o igual me había estado buscando y observando? Sonrió eh hizo un saludo con su mano, sonreí un poco y su mirada se tornó con duda y preocupación, como si algo malo estuviera pasando y no lo entendiera. « ¿Estás bien, Takanori? » Dijo una voz sacándome e interrumpiendo mis pensamientos.
Era el amigo de Akira, me estaba mirando fijamente, como si tuviera algo en el rostro.
— ¿Eh? — Fue lo único que atine a decir, mirándolo igual.
— Que si estás bien, estás un poco extraño... — Volvió a decir.
— Es verdad, estás así desde que fuiste al salón y lo viste, ¿paso algo que no me haya enterado? ¿Te hizo algo ese maldito? — Cuestionaba Akira mirándome algo molesto.
Suspiré, no quería decirles pero ahora iba a tener que hacerlo...
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I've Been Wating For You
FanfictionTakanori, un niño de 14 años tiene problemas con sus compañeros de clases, debido a sus preferencias sexuales. Por causa de todos sus problemas, incluyendo los de sus padres que tampoco aceptaban que su hijo fuese gay, él empieza a tener notas bajas...