El Semidiós y La Diosa Ψ

Capítulo 2: 'Ataque'

Capítulo 2: ‘Ataque’

Llegamos a un McDonald a desayunar luego de pelear con todos solo Percy me gano y valla forma, me tiro agua en la cara y me asuste, de un tirón me quito la espada y listo el tramposo gano.

Pedimos de comer y nos sentamos a esperar que traigan la orden.

-Lily.-Dice Annabeth.- Tenemos que decirte algo muy importante.

-¿Qué?-Digo dejando a un lado mi teléfono móvil nuevo.

-Pues… ¿Has escuchado los mitos griegos? ¿Sobre los Dioses del Olimpo y todo eso?-Dice Jason.

-Si.-Digo mirándolos.- Sí, me encantan ¿Por?

-Todos esos mitos… son reales.-Dice Leo un poco más serio.

-¿Ustedes cómo pueden asegurar que es así?-Digo sorprendida.

-¿Sabes que algunos Dioses bajaban del Olimpo a la Tierra y tenían hijos con mortales?-Dice Pipper ignorando por completo mi pregunta.

-Si…-Digo ya con un poco de miedo.

-Pues nosotros somos hijos de Dioses con mortales, somos Semidioses.-Dice Nico arrugando la nariz.

-¿Están jugando?-Digo enarcando una ceja.

-No.-Dicen los seis a la vez.

-Ok, les creo, pero ¿Qué tengo que ver yo con eso?-Digo siguiéndoles el juego.

-Eres una semidiosa, nos envió el mismo Zeus a buscarte.-Dice Jason.

-Y mi padre, Poseidón, está ansioso de verte.-Dice Percy.

-¿Tú padre es el Dios de los mares? No que había prometido con Zeus y Hades no tener más hijos con mortales.-Pregunto. Adoro ese mito ¿Sera verdad?

Noto que Percy, Jason y Nico enrojecen.

-¿Qué pasa?-Les digo.

-Yo soy hijo de Zeus.-Dice Jason.

-Y yo de Hades.-Dice Nico.

-Los tres rompieron la promesa en su momento.-Dice Percy.

-Aun no entiendo ¿Soy un semidiosa?-Les pregunto cambiando de tema.

-Sí, aún no sabemos hija de quien eres.-Dice Annabeth.-Eso lo sabrás cuando estés en el campamento.

-¿Están seguros, chicos? No creo que yo sea hija de un Dios.-Digo haciendo una mueca.- ¿Qué campamento?

-Sí tienes que ser tú.-Dice Percy.-El campamento Media Sangre, es para semidioses. Tienes que ir para que puedas desarrollar tus poderes. ¿Jamás te han pasado cosas extrañas?

-Si.-Digo y pienso.-Una vez estábamos en la playa y un chico me iba a besar.-Comienzo a reír.- Y una ola gigante lo cubrió y lo arrastro hasta el mar, pero yo quede completamente seca.

Los cinco intercambiaron miradas nerviosas, excepto Nico que estaba más entretenido en comer sus papas fritas.

-¿Ninguno de  esos famosos son tus padres?-Dice Pipper.

-No, ninguno. Mamá dice que aparecí en su puerta con una nota de que cuando esté lista debía ir a un lugar especial o que ellos llegarían a verme y que me querían mucho, también explica algunas cosas de las cuales no estoy informada.-Digo y recibo mi orden que era la única que faltaba.

-Eres tú.-Dice Nico firmemente.-Debemos irnos antes que alguien nos…

No termino de hablar porque la mesera se había convertido en un moustro horrendo con alas de murciélago y nariz puntuda.

Me agarro del cuello con su garra y comenzó a golpearme. Y como tengo tanta suerte, aparecieron dos más.

Ellos sacaron sus espadas y comenzaron a luchar, yo no lograba alcanzar la mía, hasta que alguien me la da. Nico.

De un solo golpe le corto la cabeza al asqueroso animal ese, caigo sobre la mesa y noto que al que acabo de matar desaparece en polvo negro.

Percy y Annabeth matan al otro animal, y Jason y Nico al otro ya que Pipper estaba con una herida de espada en la pierna.

-¿estás bien?-Le digo a Pipper la cual asiente haciendo una mueca.

-Toma un poco de ambrosia.-Dice Jason preocupado. Ella asiente y él se sirve un vaso de lo que parece jugo de manzana y ella se lo toma.- Vámonos ahora, que están llamando a la policía.

Jason carga a Pipper hasta la salida y nos montamos en mi auto.

-¿Dónde vamos?-Dice Pipper.

-Debemos ir a tu casa, Lily.-Dice Percy y yo asiento, presiono el acelerador a fondo y conduzco hasta mi casa.

Cuando llegamos, encontramos a un gran grupo de paparazis en la puerta de mi casa, los vigilantes me ayudan para poder entrar rápido, al parecer, mi madre acaba de llegar a casa.

-Hola.-Digo un poco nerviosa a mi mamá ¿Y quién no, si estoy bañada en algunas partes de sangre?

-¿Qué te paso?-Dice asustada.

-Nada, mamá tenemos que hablar.-Le digo y hago que entren los demás.

-Buenas tardes, señora Austin.-Dice Jason.

-Lily ya no está a salvo aquí, debemos llevarla al campamento.-Dice Annabeth.

-¿Ustedes son los que iban a mandar? Está bien, es por su bien.-Dice enjuagándose las lágrimas.-Martina, prepara las maletas de mi hija, toda su ropa y pertenencias importantes.

La empleada asiente y se va.

-Te amo ¿Si? Tu padre también te ama, pero esto es por tu bien y…

-Siempre serás mi mamá.-Le digo y la abrazo.

-Espera.-Dice y va a la caja fuerte, de dónde saca unas cajitas.- Esto me lo entrego tu madre, era un regalo muy importante, me pidió que te lo diera cuando llegue este momento.-Dice sonriendo.

-Gracias.-Digo y lo cojo en mi mano.

-Ve a cambiarte, igual ustedes.-Dice notando lo sucios que están.