7: "El plan perfecto"

212 26 2
                                    

N A T H A N I E L

Subimos a mi auto y encendí la radio. Ella no tenía idea de a dónde la llevaría y esperaba que le gustara.

Comenzó a sonar "They don't know about us" de One Direction y escuché un chillido de parte de Rachel.

-¡Amo esta canción! -empezó a simular que tocaba el piano al inicio de la canción y luego prosiguió a cantar.

Wow, tiene una hermosa voz.

Tan solo me quedé mirando la carretera, de vez en cuando la veía a ella y escuchaba su voz, disfrutando y sonriendo.

No sé qué me pasa. Es la primera vez que conozco a alguien y estoy tan empeñado en ser su amigo, pero es que Rachel tiene algo que me llama la atención, además de que me gusta lo prohibido y ella es hermana de mi mejor amigo, y él le prohibió hablar con sus amigos.

Cada vez que iba a su casa y veía cómo desafiaba a Ian supe que quería ser su amigo, pero jamás logré acercarme, no hasta que me enteré de que seríamos compañeros. Ian me da miedo respecto a este tema, es capaz de arruinar mi reputación, y ni siquiera sé por qué le molesta que su hermana hable con sus amigos, jamás me lo dijo.

Sólo sé que no quiero cagarla, parece buena chica y yo necesito una amiga así. Las únicas mujeres en mi vida eran Cheryl, mi madre fallecida y espero que Rachel.

Viéndola cantando, se veía tan vulnerable y feliz...

Cuando terminó la canción, aplaudí por unos segundos, para no desconcentrarme del camino.

-¡Bravo! ¿Firmas mi autógrafo? -fingí fanatismo.

Casi. Estoy por convertirme en su fan número 1 si sigue cantando así.

-Ya basta -me da un golpe en el hombro, avergonzada-. Por un momento olvidé que estabas.

-Auch.

-¡No, no! Es que cuando canto disfruto de la música y me olvido de la gente -confiesa y se encoge de hombros.

-Entiendo -elevé una de mis comisuras-. Cantas muy bonito, Rachel, en serio.

-Gracias -nos miramos con una sonrisa.

[...]

-¿Falta mucho? -pregunta ella.

-No, ya basta de preguntar -suspira.

Ya es la quinta vez que pregunta, es exasperante.

La verdad es que llevamos una hora de viaje.

¿Creerá que quiero secuestrarla? Probablemente, pero se sorprenderá cuando vea el lugar.

Eso espero.

¿Por qué estoy haciendo tanto esfuerzo? Todavía no logro entenderlo, lo que dije no debería ser excusa.

Luego de varios minutos, en los que también estuve callando a Rachel, llegamos.

-Bueno, chillona, llegamos -le avisé.

Apagué el motor.

-¿Cómo me llamaste? -fingió estar ofendida.

-Chillona -me reí por su cara, y recibí un golpe en el hombro.

Bajamos del auto y esperé su reacción.

-Nate, esto es... -se tapó la boca con la mano, asombrada.

Estábamos en un prado lleno de flores y árboles, al final había un acantilado con una gran catarata.

-¿De dónde conoces este lugar? -me pregunta curiosa.

Algo Grandioso (SIN EDITAR)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora