«Notice Me, Hyung» [Yoonseok]

| 21 | Pt.1 |

Deja de hostigarme, déjame vivir en paz, déjame hacer mi vida.

Ya no soy un niño.

Se puede decir que todo iba de maravilla con los dos chicos de viaje, no, para nada, nada iba bien Yoongi se resignaba a pasar la gran parte del día encerrado en su habitación ¿Qué había pasado con eso de "talvez las cosas puedan cambiar"? ¿Acaso solo lo pensó pero nunca querrá que cambie? ¿Prefiere la miseria antes que la alegría, libertad? Ese era Yoongi, el chico que una vez cambió y a como iban los tiros no pretendía volver a ser feliz, no pretendía volver a salir y disfrutar con su mejor amigo, no pretendía nada.

Muchas de las veces que salían de la habitación era a rastras por Hoseok, nisiquiera porque Yoongi siquiera si no por "convencimientos" del menor, tan sólo un "si si, como quieras" y un rodeó de ojos ya eran suficiente para que Hoseok lo tomará del brazo y lo llevará fuera de allí. Pero en cierto modo le hacía sentir mal, más de lo que estaba, sentía que obligaba a Yoongi a hacer cosas que él no quiere, que nunca quiso realmente, la culpa lo carcomia, sentía vergüenza de si mismo porque Yoongi nunca en sus años de conocerse, nunca le ha obligado a nada.

Debía ser justo, debía pensar antes de actuar, está sería la última vez que lo obligaría a cosas que no, está sería una de esas tantas veces de charla ante los ojos del mayor pero una muy importante ante los del menor.

Bajo la noche oscura cubierta de brillantes estrella y una luna bella ambos chicos se encontraban tomando algún tipo de vino, silencio ante el lugar casi vacío, rodaban las once de la noche casi llegado a las doce, una ligera música se escuchaba de fondo del único bar habitado esa noche, la mirada sin vida del pelivino posaba en las danzantes olas del mar frente a ellos y la esperanzada del pelinegro sobre el líquido carmesí de su copa. Miles de pensamientos volaban en ese momento, esperando porque el correcto saliera como tema y que fuera realmente importante.

Suspiró con nerviosismo, girando levemente la copa en su mano derecha moviendo el liquido de esta.

—Hyung.-dijo, más sólo escuchando un leve "mhn" por parte del otro.

No quería cagarla, eso estaba claro, no quería arruinar lo que por ahora habían sido "vacaciones tranquilas".

—Tú... ¿Piensas seguir trabajando en lo mismo? ¿No quieres probar algo más?

Silencio más un suspiró se escuchó.

—Trabaje duró para tener ese trabajo, no pienso dejarlo después de todo lo que hice.

—Pero ¿No quieres tener más tiempo para ti?

—¿Eso importa?.-dijo Yoongi con fastidio.

Hoseok bajó la miraba.

—Salir con los chicos o conmigo... disfrutar de muchos lugares, viajar a otros países, reír, sonreír, hablar como hace mucho no haces.

—Nada de eso importa ya, debo ser suficiente para alguien... y eso requiere de esfuerzo, mucho.-suspira nuevamente.-tú no lo entiendes, tú si tienes un trabajo bueno y tranquilo, además del apoyo de tu familia.

«Sí claro».

Silencio.

—¿No es importante salir con tu mejor amigo?.-Preguntó el menor.

—.....

—Entiendo.-dejó la copa con aún líquido dentro sobre una mesa entre las dos sillas donde se situaban los dos.- iré.. iré a la habitación un momento, olvidé llamar a mi madre.-sonríe a duras levantandose para después no verse más en la vista del mayor.

Suspiros, maldiciones volaban en la cabeza del mayor dandose guerra dentro de esta.

—Yoongi... cuando se trata de tu mejor amigo ¿No eres capaz de decir una miseria palabra? Qué inútil eres.-se dijo así mismo.

Sus ánimos decayeron, más de lo que ya estaban, con pasos vagos y sin ganas caminó hacia el baño, Yoongi debía de venir luego, un baño era lo que talvez podría calmarlo, relajarlo, ayudarlo a olvidar su dolor creciente.

¿En qué estaba pensando cuando decidió viajar con la persona que pensó lo quería y ahora no solo no lo queria si no que tampoco le importaba? Ante los ojos de muchos sería un estúpido por seguir al lado de una persona a la cual no le importas en lo absoluto, pero se trataba de Yoongi, su mejor amigo si así se le podría llamar todavía. Debía cuidarlo, protegerlo, debía hacer lo posible para que este volviera a ser el feliz y animado Yoongi de antes, lo posible e incluso lo imposible.

Le importaba muy poco salir lastimado, después de todo su madre, hermana y amigos siempre lo consideraron como la persona que poseía una hermosa sonrisa y gran esperanza en todo su ser, en cierto modo sabía que era el único que podría ayudar a Yoongi a salir de su miseria.

Tomando una toalla de baño se dispuso a entrar a la ducha pero todo acto siendo interrumpido por el sonido de su teléfono a un lado del lavado, volteó hacía este, lo miró por varios segundos antes de acercarse al aparato, mirando la pantalla encendida, tragó saliva a duras, sus manos comenzaron a sudar, cerrando sus palmas en puños que se abrían nuevamente para limpiar el sudor de estas sobre su camiseta.

—Ho-hola.-contestó.

—Hola Jung Hoseok.

Esa voz, de alguna manera de entre todo el cariño que poseía, le tenía odio a esa voz, le fastidiaba y de algún modo le daba miedo, le hacía sentir inferior.

«No otra vez, no quería escucharlo en estos momentos».

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·LS·
Byee~