"Un pelirrojo propio."

- Capítulo Único. -

Cuando regreso a Estados Unidos para mudarse a Peach Creek, creyó que lo más difícil sería ser el chico nuevo otra vez y es que, un año atrás le había ocurrido eso mismo al llegar a Japón a causa del trabajo de su padre.

Sin embargo se había equivocado rotundamente, lo más difícil había sido lidiar con la estúpida estrella del equipo de baloncesto, así como el capitán del similar de natación, al mismo tiempo y es que ambos muchachos parecían haber desarrollado una extraña atracción por molestarlo cada vez que lo veían.

Sobre todo aquel moreno, que podía insultarle en los dos únicos idiomas que entendía cada vez que quería, ahora que intercambiaban posición dentro de los durazneros.

Aomine Daiki era su nombre, insoportable era su apodo. Un japonés que había crecido en el país como él pero que, ni por eso lo dejaba de fastidiar.

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-Bakagami. - le escuchó canturrear. -Fresa mía, hazme caso.

-¡Con un demonio deja de llamarme así! - le grito con el rostro encendido por la furia, asustando de paso a su pequeño acompañante que dejo caer su proyecto de robótica tras su sobresalto. -¿Ves lo que causas idiota?

Aomine comenzó a reír, mientras el pelirrojo se inclinaba para ayudar a su similar de menor estatura con sus cosas.

Kevin Anderson, era un chico tan diferente a él pero a la vez que le entendía muy bien.

Había crecido en Peach Creek pero se había mudado a México por el trabajo de su padrastro, un año atrás regreso a su ciudad natal, atrayendo para su desgracia la atención de los deportistas cabezas huecas, en su caso especialmente la del capitán de natación.

De cierta forma, por eso se había convertido en su amigo, quería protegerlo del par de bravucones del colegio que los molestaban con frecuencia.

-¡Pumpkin! - el grito captó la atención de los tres chicos. -Dejemos a los tortolos a solas.

Kagami entrecerró sus ojos al no entender a lo que se refería el recién llegado pero para su sorpresa, observó como el chico de gafas asentía mientras que velozmente tomaba sus pertenecias para despedirse de él con un "lo siento, solo escuchalo" que enseguida se desvaneció en el aire tras verlo prácticamente, huir lejos de él.

Se quedo en blanco y aún más cuando Eddward Marion estampó sus labios con los de Kevin, tras unos segundos cayó en cuenta por fin que su amigo lo había traicionado.

-¿Qué mierda significa esto? - grito haciendo reír al azabache que se marcho con su brazo en la cintura de su novio, que apenado miraba de reojo hacia él.

-Es obvio Bakagami. - el moreno le abrazo por la espalda. -Doble D tiene a su pelirrojo, así que me ayudaron para que me consiguiera el mío propio.

Kagami se sintió timado pero por una extraña razón, eso a su corazón no le había molestado.

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Este era mi pre-festejo x el cumpleños de mi negro ❤ un pequeño drabblecín que ame escribir en su momento... Se me paso publicarlo pero, mejor para ustedes pq en un rato subo otra historia. xD

Ahora bien, ¿quien no shippeo el KevEdd? 7u7 yo sé que algún fan de ellos debo tener entre mis lectores. Asi que, disfruten esta fantasiosa escena donde la pantera de Touo es cercano al tiburón de Peach Creek y ambos se quieren almorzar a sus rojitos respectivos. >///< ❤❤❤