-Capítulo 28-

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Mateo cumplió su palabra hasta las 6 de la mañana que el sueño le venció. Desperté a las 10 y en silencio me puse de pie. Miré mi móvil el cual tenía 3 llamadas perdidas de Julen y lo aparté. ¿Qué quería ahora?

Caminé hasta la habitación de los pequeños y me volví a sorprender con la ventana abierta, no sabía qué pasaba pero ya me estaba asustando. La cerré y los miré asegurándome de que ambos estaban bien. No podía seguir con eso. Me senté en la mecedora con los pies recogidos y sin dejar de mirarlos comencé a pensar. Teníamos 3500 pesos, cosa que solo nos alcanzaria para pañales y algo de comida para los niños. Aparte tenía que pagar la luz, el gas y el agua. Por no hablar de que también debía comprar comida para mí y para Mateo. Aún nos seguía faltando dinero y no sabia como hariamos para obtenerlo. Suspiré cuando alguien entró en la habitación.

Mateo: ¿Qué te ocurre? –era Mateo que aguantaba una cara de sueño increíble-

Karen: nos sigue faltando dinero –restregue mis ojos-

Mateo: tranquila, lo conseguiremos de alguna manera –mi móvil empezó a sonar en la otra habitación. Mateo me miro arqueando una ceja- ¿no respondes?

Karen: Ya sé quién es...-Sin decir nada, mi cara lo dijo todo. Él no supuso que sería alguna compañía telefónica que me quería vender un móvil o alguna empresa de libros empeñado a venderme el último libro de Stephanie Meyer... Sabía que era Julen y rápidamente salió de la habitación en busca de mi móvil-

Yo lo dejé ir, sabía que interponerme solo crearía una discusión entre nosotros y quería vivir feliz, aunque ese tiempo durara solo hasta que llegaran los recibos de pago. Mateo respondió activando el altavoz y caminó hasta la habitación de nuevo.

Mateo: dejanos en paz ya. No vuelvas a llamar

Julen: ¿Qué eres? ¿el secretario de tu mujer?

Mateo: no tientes a la suerte, ella no quiere saber nada de ti

Julen: ¿no quiere o no la dejas?

Mateo: las dos cosas. No la dejare acercarse a ti por nada en el mundo –Julen rio-

Julen: solo quería decirle que se olvido algo de ropa en mi casa y que estaría encantado de que viniera a buscarla

Karen: quedatela –dije en un susurro- ya no la quiero

Julen: genial, asi podre tocarme pensando en ti

Mateo: hijo de p... -interrumpi-

Karen: Mateo, no, eso es lo que el quiere. Ignóralo

Julen: veo quien lleva los pantalones en la casa... -volvio a reir-

Karen: cuelga... -le dije a Mateo tranquila. El suspiro y colgó- muy bien

Mateo: Eres la única persona que me hace relajarme en esos momentos en los que le partiría la cara -Le sonrei-

Karen: Vete a dormir, tienes una cara...

Mateo: Pero no tengo sueño -Aseguró. Aún así su cara demostraba lo contrario- ¿Quieres desayunar antes de que ellos empiecen a llorar?

Karen: Estaría bien

Monster -Mateo Palacios y Karen Watson (3ra temporada)- FanfictionWhere stories live. Discover now